CLASE DEL 28/09: “Nueva racionalidad en el Estado Keynesiano”, Martin Unzue

A lo largo de la historia existieron diferentes tipos de Estados:

Estado Absolutista: Se basaba en la concentración del poder en el monarca, la intervención del Estado en la economía. Se desarrollaba lo que se denomina mercantilismo y contaba además con leyes que protegían a los pobres.

Estado Liberal: Se basaba en la supremacía de la ley, en la responsabilidad individual, en la división de poderes, en el reconocimiento de la ciudadanía, en la no intervención del Estado en la economía, entre otros cosas. A pesar de todas estas características el estado liberal fue mucho más interventor de lo que dice la propia teoría liberal.

Estado de Bienestar: Es importante aclarar que cuando hablamos de Estado de Bienestar, estamos hablando de algo totalmente diferente al Estado keynesiano.

Surge hacia 1880 y se desarrolla en Alemania, paralelamente al desarrollo de la democracia en Europa. El creador de las políticas en que se basa este Estado interventor fue Bismarck. Este tipo de intervencionismo se creó con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de los trabajadores a través de mayor gasto social por parte del Estado y así de esa forma lograr que las masas obreras puedan acceder y disfrutar de mayores beneficios (salud, derechos de trabajo, etcétera). Se busco intervenir y de incluir a las masas populares en las cuestiones políticas para evitar una posible revolución social. Entonces para legitimar las políticas llevadas a cabo, se propone que el sector de los trabajadores pueda votar a sus representantes. Es importante aclarar que la relación entre gasto social y el sufragio universal es de suma importancia, ya que los conservadores a través de las promesas y su posterior cumplimiento lograban legitimar las políticas llevadas a cabo y eso les permitía evitar la revolución social.

Estado Keynesiano: es un tipo de Estado de Bienestar al cual se le aplican las ideas de Keynes. Este modelo de Estado surge hacia 1929 con el estallido de la crisis económica y de la depresión que provocó especialmente en Estados Unidos pero que afectaba a una gran parte del planeta. Este Estado Keynesiano no se preocupa por el sector social ya que no garantiza los derechos sociales, sino que se preocupa por el mantenimiento del sistema económico capitalista. Según Unzué el Estado de Bienestar Keynesiano tiene un límite, y ese límite es el sector privado.

Keynes sostenía que los comportamientos individuales son ilógicos al interés colectivo, por eso la necesidad de que “alguien” intervenga en la economía. De esa manera legitima la acción por parte del Estado para que garantice el interés colectivo de la sociedad.

Keynes considera de gran importancia que el Estado intervenga para poder crear empresas y que de esa manera surjan puestos de trabajo. A través del surgimiento del pleno empleo, el Estado va a comenzar a generar déficit, que para Keynes es beneficioso porque es señal de que el Estado está invirtiendo.

Hacía 1973, el Estado de Bienestar Keynesiano sufre una grave crisis debido a la acumulación de capitales. En esta crisis los capitalistas dejan de invertir y por lo tanto el Estado pierde la posibilidad de financiarse, ya que al no haber inversión de capitales en empresas, el Estado no puede cobrar impuestos a las empresas. Como este Estado keynesiano no garantizaba derechos, era más factible terminarlo; de esa manera surge “la nueva derecha” con el objetivo de salir de la crisis. Margaret Thatcher, en Inglaterra adoptó políticas neoliberales (la privatización de empresas estatales por ejemplo). No sólo se intentaba que el Estado dejara de ser deficitario sino que también buscaba disciplinar a los trabajadores, acabando con el pleno empleo para lograr así que haya desarrollo económico.