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Final A | Semiología (Cátedra:
Di Stefano - 2020) | CBC | UBA
Para la evaluación se tendrá en cuenta la prolijidad, la legibilidad y la
ortografía.
No use abreviaturas. Deje márgenes y sangría. Sea explicativo en sus respuestas.
a) Responda correctamente 3 (tres) de las siguientes consignas:
1. Explique qué diferencias existen entre el enunciado y la oración, según M.
Bajtín. (Debe mencionar y explicar al menos 3 diferencias).
Según Bajtín diferenciar los conceptos de enunciado y oración es sumamente
relevante y no deben confundirse primeramente podemos exponer que la oración no
es más que una unidad de la lengua mientras que el enunciado forma parte de la
unidad real de la comunicación discursiva, de acuerdo a los límites de su
extensión en el caso del enunciado es determinado por el cambio en el sujeto que
toma la palabra y en la oración sencillamente se determina por reglas
gramaticales como una mayúscula y un punto para dar comienzo y fin, en cuanto a
su contexto en el enunciado le anteceden y proceden otros enunciadores de
autores ajenos mientras que la oración se encuentra dentro del enunciado de un
único hablante, otro punto importante para la diferenciación de estos es su
expresividad por el lado de la oración tiene únicamente un significado
lingüístico y una entonación gramatical a diferencia del enunciado que se
caracteriza por tener la capacidad de generar una respuesta debido a la
intención discursiva que posee y el oyente puede comprender.
2. Explique la relación entre las siguientes afirmaciones de Bajtín: “El
enunciado es un eslabón en la cadena de la comunicación discursiva” (Bajtín,
1992: 285); “Todo hablante es de por sí un contestatario” (Bajtín, 1992: 258) y
“El hablante no es un Adán” (Bajtín, 1992: 284).
De acuerdo a las afirmaciones que plantea que Bajtín: “El enunciado es un
eslabón en la cadena de la comunicación discursiva”; “ Todo hablante es de por
si un contestarío” y “El hablante no es Adam”, comenzando por esta última que
expone la realidad que no existe un sujeto que haya interrumpido por primera vez
el eterno silencio del universo y puedan atribuirle la creación de los primeros
enunciados sino que el objeto de los discursos ya se encuentra empleado,
discutido, valorado y tiene miles de repeticiones con algunos cambios quizás que
se van actualizando uno tras otros y esto se debe a que como bien dice la primer
afirmación “El enunciado es un eslabón en la cadena de la comunicación
discursiva” puesto que cada uno de los enunciados se encuentra conectado con
anteriores y posteriores al mismo de una manera constante en todo momento de la
instancia discursiva y esto también deriva a que “Todo hablante es de por si un
contestario” ya que siempre al momento que un sujeto en el presente exprese un
enunciado se encontrara que anterior a él hubo otros de los cuales toma como
base para contestar o bien incluye y refleja conceptos ya descriptos en ellos;
todo este ciclo contante e interminable forma parte de la particular
organización y estructura de la comunicación discursiva, por lo que es imposible
tomar un enunciado independiente y abstraerlo de todo su contexto discursivo.
3. Benveniste afirma, en relación con los pronombres yo y tú que: “Es una
realidad dialéctica, que engloba los dos términos y los define por relación
mutua, donde se descubre el fundamento lingüístico de la subjetividad.” Explique
y fundamente.
Según la afirmación de Benveniste en relación con los pronombres yo y tu “Es una
realidad dialéctica, que engloba los dos términos y los define por relación
mutua, donde se descubre el fundamento lingüístico de la subjetividad”, lo
primero para desglosar es explicar que los pronombres personales como lo son
“yo” y “tu” son las formas lingüísticas que indican la figura de la persona en
el discurso además que son los que le permiten al hablante realizar el acto de
apropiación de la lengua y crear su centro autorreferencial que también
concientiza al ego en el mismo a partir de plantear al hablante como “yo” en su
instancia de discurso y en paralelo automáticamente se postula a su alocutario
cualquiera sea el grado de presencia que se le atribuya a este, estos dos
sujetos coexisten necesariamente en todo momento, dependen uno del otro, siempre
el sujeto que esté hablando será “yo” y a quien se esté refiriendo será “tu”,
esta relación hace posible el desarrollo del lenguaje y muestra la realidad de
las comunicaciones discursivas.
b) Analice el siguiente texto a partir de los conceptos estudiados de los
géneros discursivos y la teoría de la enunciación (situación de enunciación,
deixis –incluido los usos del “nosotros”-, subjetivemas, apelativos, objeto de
discurso, modalidades). Escriba un texto que dé cuenta del análisis realizado,
aplicando los conceptos teóricos y ejemplificando con el texto. Recuerde: Ud.
puede marcar el texto a analizar, pero eso no será evaluado. Sólo se evaluará el
texto que redacte.
A MARTHA BERNAYS
Viena, martes, 9-10-1883
Mi amada Marty:
¿Que qué hago? Trabajar más y más que nunca y sentirme mejor que nunca. La
mayoría de mi tiempo la dedico a escudriñar grandes montañas de papeles que leo
en parte para mí y en parte para el Semanario Médico. O me siento en el
laboratorio, donde mi método está actualmente en marcha con la mejor apariencia
posible, aunque aún precisa que le corrija varias cosas. Y, desde las primeras
horas de la mañana hasta las once (casi se me había olvidado decírtelo), ando
por las salas como Sekundararzt, muy ocupado en aprender y en escribir, y
actuando de cuando en cuando como cirujano. Todo mi estado mental posee una
densa cualidad, algo parecido a un sueño o a un delirio, y éstas son las
condiciones más adecuadas para ayudarle a uno a sobrellevar una prolongada
separación. No sé a ciencia cierta si todo esto resulta placentero o no, aunque
es evidente que los sentimientos personales no poseen demasiadas oportunidades
para emerger a la superficie. Tener continuamente tanto que hacer actúa como una
especie de narcótico; mas, como sabes, hace tiempo que buscaba algo que lograse
extraerme de mi estado de gran excitabilidad. Ahora ya lo tengo. A veces me
parece que las olas del mundo exterior, del mundo grande, no vienen a romper
contra mi puerta. Otras tengo que luchar contra la sensación de que soy un monje
en su celda, como el descrito por Scheffel . En mi cerebro surgen criaturas
extrañas. Casos clínicos, teorías, diagnósticos y fórmulas están ocupando mis
otrora parcialmente cavidades craneanas, y la medicina, tomada globalmente, está
comenzando a serme familiar, a adquirir plasticidad. Tales bacterias habitan
aquí, y unas se vuelven verdes, mientras tórnanse otras grises. O aquí llega el
remedio para el cólera, muy convincente como letra escrita, mas probablemente
inútil. Y sobre toda esta conmoción surge predominantemente el grito:
¡Tuberculosis! ¿Es contagiosa? ¿Es adquirida? ¿De dónde viene? ¿Está en lo
cierto el maestro Koch, de Berlín, al afirmar que ha descubierto el bacilo que
la provoca?
Cuando recibo carta tuya, todo el ensueño se disipa y la vida real se introduce
en mis células. Los problemas extraños quedan borrados en mi cerebro; se
desvanecen las misteriosas concreciones pictóricas de las diversas enfermedades
y desaparecen las teorías vacías “en relación con la fase científica actual”,
como se añade habitualmente.
Y con tus cartas, el mundo se torna de nuevo cálido, alegre y fácil de
interpretar. Mi dulce amada no es una alucinación ni tiene que ser objeto de
experimentación química. Y, a pesar de no ser muy alta, la mirada logra captarla
sin necesidad de auxiliarse con lentes o microscopio. Por fortuna, no tiene nada
que ver con las enfermedades —espero que se encuentre maravillosamente bien—, su
única torpeza fue hacerse novia de un médico. ¡Oh, Marty! Ser un ente humano
resulta mucho más agradable que convertirse en almacén de monótonos
experimentos. Mas uno no puede permitirse el lujo de ser un ente humano durante
una hora si antes no se ha ocupad de transformarse durante once en una máquina o
un almacén. Es un círculo vicioso.
Espero tener noticias tuyas mañana, mi preciosa niña. Adiós, y trata de no
aburrirte demasiado. Tu devoto,
Sigmund
Freud. Epistolario I (años 1873-1883). Ediciones Orbis, Buenos Aires, 1988
(Edición y Notas: Ernst L. Freud)
Este texto corresponde al género discursivo epistolar, clasificado como
secundario debido a que conlleva un pensamiento previo a su narración aunque
haya sido pequeño ya que se trata de una carta más bien personal y cotidiana
pero aun así tiene un orden y organización necesaria para su narración. El
enunciador es Sigmund Freud, el enunciatario es Martha Bernays y el tema o
referente es como se siente Freud y su vida cotidiana. Las tres características
de todo género discursivo:
Composición/estructura:
Lugar y fecha: Viena, martes nueve de octubre de 1883.
Encabezamiento : “Mi amada Marty”.
Cuerpo de la carta: “¿Que qué hago? Trabajar más y más….”
Despedida: “ Espero tener noticias tuyas mañana, mi preciosa niña. Adiós, y
trata de no aburrirte demasiado. Tu devoto”.
Firma: “Sigmund”.
Estilo verbal: Narrado en primera persona, con un vocabulario sujeto a la época
en la que fue escrita con rasgos de formalidad en su trato con el destinatario.
Contenido temático: La carta trata de la situación actual que vive el enunciador
y sus sentimientos.
Deícticos puro de 1ra persona (Sigmund Freud): mí, sentirme, me, ando, sé,
buscaba, extraerme, tengo, mis, serme.
Deícticos puro de 2da persona (Martha Bernays): decírtelo, sabes, tuya, tus,
tiene, aburrirte, tu.
Deícticos de tiempo: ahora, ya, mañana.
Deícticos de lugar: aquí.
Apelativos vocativos (Martha Bernays): Marty, dulce, amada, novia, niña.
Apelativos delocutivos: montañas, papeles, Semanario Medico, laboratorio,
horas, Sekundararzt, cirujano, sueño, delirio, sentimientos, narcótico, olas,
mundo, puerta, monje, celda, cerebro, remedio, tuberculosis, carta, problemas,
concreciones, enfermedades, teorías, lentes, microscopio.
Subjetivemas (referidos a..):
Trabajo profesional: mas, mejor, mayoría, grandes, en marcha, posible,
ocupado, plasticidad, verdes, grises.
Freud: densa, sueño, delirio, adecuadas, sobrellevar, placentero, gran
excitabilidad, romper, extrañas.
Martha Bernays: real, borrados, desvanecen, nuevo, cálido, alegre, fácil,
dulce, alucinación, alta, maravillosamente, bien, torpeza, agradable, vicioso,
preciosa.
Modalidades:
De enunciación: Comienza utilizando la forma Interrogativa con una pregunta
retórica para hacer referencia a una pregunta anterior a su enunciado; luego
continua con una forma declarativa hasta que se produce un quiebre en esta y se
expresa una enunciación exclamativa para demostrar un hartazgo y explosión por
parte del enunciador para luego bajar y continuar con la forma declarativa hasta
el final del texto.
De enunciado: Mayormente conserva juicio mas bien lógico, aunque ya en los
últimos párrafos al hablar de Martha Bernays se vuelve mas bien un juicio
apreciativo del enunciado.
A modo de conclusión:
Como primer punto que me parece importante destacar es como a través de todo el
texto fluye una energía de sinceridad y entrega total hacia compartir tus
pensamientos por mas alborotados o cargados de sentimiento que estos estén,
desde su sensación en relación a su parte profesional hasta el amor o mejor
dicho la sensación de bienestar que le provoca su amada como él la llama todo
eso lo trata y hace un excelente trabajo en tratar de dejarlo plasmado en una
simple narración como suele ser una carta; resulta admirable al lector.
Analizando su estructura, encuentro que comienza con una pregunta que
aparentemente le hizo el destinatario anteriormente a la cual responde
detallando su rutina del día a día y su situación actual al respecto de ello
tratando de destacar las partes más positivas poniendo foco en ellas confiando
en que lo que está haciendo es lo correcto y se encuentra conforme con ello.
Luego de narrar todas cosas tangibles y frías en algún punto pasa a desarrollar
como se encuentra psicológicamente al respecto con ellas, utilizando
subjetivemas tales como densa, sueño, delirio, excitabilidad, que lo acompañan
normalmente en su cotidianidad pero tener mucho trabajo en que concentrarse
hacen que lo mantengan ocupado y no tener tiempo para dejar volar su mente a
extremos que no son los deseados para él, aunque aún así se sumerge en ese
estado extraño que suele experimentar y aquí es donde se produce un corte un
cambio en la modalidad de enunciación que venía siendo declarativa pasa a una
exclamativa como demostración de explosión y desahogo de todas estas cosas que
lo abruman en su día a día. Luego retoma su modalidad declarativa para narrar
que lo que lo libra de todos esos pensamientos es recibir las cartas de la
destinataria pone el enfoque de la narración únicamente en ella, en las
sensaciones que le provoca, atribuyéndole subjetivemas y apelativos tales como
novia, niña, maravillosamente, cálido, alegre, amada, fácil, preciosa, la vuelve
un ser tan real pero irreal a la vez en lo que representa para él esto también
se ve reflejado en la despedida cuando se autodenomina como un devoto de ella.
Realiza una reflexión final acerca de todos estos sentimientos y conclusiones,
resignándose a que así es el ciclo de la vida en general donde hace falta
también pasar por momentos de rutina de cosas no tan relevantes para poder
apreciar aquello que realmente si lo es.