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Taller de Semiología | Monografía sobre el genero fantástico | Cat: Arnoux | Prof: Marcelo Muschieti | 2ºcuat.de 2007 | Altillo.com |
" El FANTÁSTICO mundo del lector "
Introducción
El cobró en los últimos tiempos un papel principal en la
literatura principalmente por el efecto de incertidumbre que causa en el lector.
Sin embargo, es posible preguntarse si el lector posee un papel activo, o pasivo
en el texto.
En el siguiente informe se analizara como el lector se enfrenta al mundo de lo
invisible que rompe con los estándares de "normalidad", dando lugar a una forma
de literatura fantástica, basada en estos rasgos y tomando el recurso de lo
siniestro para lograr tal sentimiento de extrañamiento en el lector.
Para esto, se utilizaran "Fantasy: literatura y subversión" de Rosmary Jackson;
"Lo siniestro" de Sigmund Freud; "El sentimiento de lo fantástico" de Julio
Cortazar y "Ensayo de una tipología de la literatura fantástica" de Ana María
Barrenechea y a modo de ejemplificación, se citan los cuentos "Espiral" y
"Estatuas" de Enrique Anderson Imbert y "Felinos" de Raúl Brasca.
Por último y a modo de cierre se encuentra la conclusión y aparece detallada la
bibliografía a la cual se recurrió.
Desarrollo
Definición del fantástico
La literatura fantástica es un género de ficción fantástica cuyas obras se
distinguen por referir hechos o fenómenos contrarios a las leyes naturales,
reales o ficticias , es generalmente utilizado cuentos, novelas o relatos cortos
que se caracteriza por utilizar esos sucesos que sobrepasan lo ordinario como
elemento principal de la temática.
El género fantástico se asocia y contrasta con el sobrenaturalísimo y al mismo
tiempo con lo mimético que pretende imitar la realidad externa.
En este estilo tan particular de narrarar se profundizan temas tales como
"existencia de otros mundos: dioses o poderes maléficos y benéficos; [...]
relaciones entre elementos de este mundo que rompen el orden reconocido" [1],
entre otras cosas y se toma como realidad aquello que se considera imaginario,
poniendo en duda, incluso, la propia consistencia del lector. Es una importante
fuente de inspiración no solo para la literatura, sino también para la
cinematografía, y juegos de rol.
El papel del lector
En la literatura fantástica una de las propiedades más importante según la
escritora Rosmary Jackson en su libro "Fantasy: literatura y subversión" se basa
en que el texto obliga al lector a vacilar entre explicaciones naturales y
sobrenaturales de los sucedido, extendiendo este sentimiento de duda,
perplejidad e indecisión que caracteriza la vacilación, hacia el personaje y
rechazando tanto la interpretación alegórica como la poética a la cual se tiene
que enfrentar el lector. Por lo tanto dicho lector, responsable de recibir y
recrear el texto, se enfrenta con un determinado acontecimiento que rompe con
las legalidades que rigen la vida cotidiana dando lugar a una infinidad de
interpretaciones compuestas por elementos naturales y otras derivadas de los
elementos sobrenaturales que caracterizan al genero fantástico, actuando de este
modo, de una forma "activa" y haciendo de este genero tan particular, un
sentimiento individual de libre interpretación, el cual puede variar de lector
en lector.
Jackson también señala que lo fantástico tiene, generalmente, una composición
singular que incluye elementos de preocupación por los problemas de visión y
visibilidad que producen un vacío tanto en el personaje como en el lector, a
causa de la distorsión de la realidad y el desarraigo de no contar con el
sentido preponderante de la vista (dificultad de enfocar visualmente la
realidad, la existencia de cosas invisibles, y la aparición de espejos como
objetos esenciales en la narración) que da como resultado la vacilación en la
estructura narrativa que da forma y sustancia a lo fantástico.
Julio Cortazar desde otra perspectiva, plantea en su conferencia dada en la
U.C.A.B [2] que tanto en la literatura, como fuera de ella, lo fantástico es
definido como ese sentimiento donde no existen las pautas de la lógica, ni la
causalidad del tiempo y espacio. La realidad se ve expuesta a una especie de
"sacudida" donde la presencia de algo extraño e inexplicable se enfrenta a las
leyes que se obedecen habitualmente haciendo que no se cumplen del todo.
Este "sentimiento de lo fantástico" se produce en los sujetos y hay quienes
tienen la sensibilidad necesaria para captarlos y la habilidad para plasmarlos,
generando de este modo la literatura fantástica, y abriendo las puertas para que
los lectores, generen, en si mismos, este sentimiento. Incluso el mismo Sigmund
Freud [3] emprende sus investigaciones sobre hecho de que un sentimiento de
extrañamiento, angustiante y espeluznante tal como es lo siniestro "se da en
grado extremadamente dispar en los distintos individuos" (cix. Lo siniestro
1919) por lo tanto esta sensibilidad evocada a los sujetos es producida por un
suceso espantoso que afecta las cosas conocidas y familiares evolucionando hacia
la ambivalencia ( estado de ánimo transitorio o permanente, en el que coexisten
dos emociones o sentimientos opuestos, tales como el amor y el odio) y dicha
impresión no se da de exacta manera en todos los integrantes de la sociedad.
Más adelante el autor afirma que Jentch [4] sostiene que "Uno de los
procedimientos más seguros para evocar fácilmente lo siniestro mediante las
narraciones [... ] consiste en dejar que el lector dude si determinada figura
que se le presenta es una persona o una autómata. Esto debe hacerse de manera
tal que la incertidumbre no se convierta en el punto central de atención porque
es preciso que el lector no llegue a examinar y verificar inmediatamente el
asunto, cosa que, según dijimos, dispararía fácilmente su estado emotivo
especial" afirmando, de este modo el papel crucial que juega el lector, y las
estrategias que posee el autor frente a, por ejemplo, la literatura fantástica.
Y de este modo se puede llegar a la deducción, de que incluso desde una
perspectiva psicoanalítica es posible que un sujeto se enfrente a un determinado
suceso que rompe con los estándares de normalidad impuestos por la legitimidad
de la sociedad que provoca en él un sentimiento de extrañamiento que se da de
manera única y particular en cada individuo.
Ejemplares de la literatura fantástica:
Una de las mejores formas de reafirmar los rasgos que caracterizan a este
género, es comparándolo con algunos ejemplares de la literatura fantástica en
Latinoamérica que "ha resultado ser una de las zonas culturales del planeta,
donde el cuento fantástico ha alcanzado sus exponentes más altos" (Cortazar,
op.cit). Por ejemplo, en el cuento "Espiral" del argentino Enrique Anderson
Imbert donde un hombre, se encuentra ante la situación aparentemente normal de
llegar a su casa por la madrugada y al entrar a su cuarto (atravesado las
escaleras en forma de espiral) rompe con esta situación de estabilidad y
naturalidad debido a que se encuentra a si mismo sentado en la cama. A partir de
este momento el protagonista empieza a dudar "¿quién sueña a quien?" cuando de
repente ambos "yo" escuchan pasos por la escalera de caracol y afirma que "de un
salto nos metimos uno en otro así fundidos nos pusimos a soñar al que venia
subiendo, que era yo otra vez", confirmando el narrador la idea de la espiral
como concentrador o disparador del objeto de vacilación (Jackson, op.cit.) y
poniendo la realidad fantástica ante el lector, como un hecho que se acerca y se
aleja de un punto determinado, sin dejar de lado la interminable búsqueda de
sentido en el texto que el mismo escritor crea en los lectores. Otro ejemplar
del mismo autor donde también, abunda este recurso es en el cuento "Las
estatuas" donde una estudiante del colegio de señoritas Brighton escapa de su
dormitorio a media noche para, en forma de travesura, pintar sobre el piso del
colegio huellas de pintura y de este modo hacerles creer a sus compañeras y
directivos, que pertenecían a dos estatuas ubicadas en el jardín de dicho
colegio. A la mañana siguiente, las huellas habían sido restregadas, y a manera
de sorpresa para la alumna, una de las estatuas del patio, poseía las manos
sucias de pintura, asegurando de este modo, la idea de dos mundos enfrentados,
donde lo sobrenatural y lo familiar conviven, dejando la posibilidad al lector
de reconsiderar la realidad perteneciente al cuento y tomar como propios los
rasgos siniestros mencionados por Freud, pertenecientes a los acontecimientos
que hacen de este cuento, literatura fantástica.
Para terminar, como último ejemplo de este género, es imprescindible no dejar de
lado el cuento "Felinos" de Raúl Brasca donde un sujeto se encuentra en su casa
observando a su gato, cuando este clava la vista en un punto, y el protagonista
lo mira concentradamente (utilizando, de este modo uno de los recursos nombrados
por Jackson anteriormente basado en el eje de miradas, y la sucesión de hechos
sobrenaturales a partir de este cruce que nace en el sentido de la vista)
generando, según el autor una especie de "torbellino" que arrasa con la
identidad del personaje principal, provocando en el actitudes felinas tales como
ovillarse en el sillón en el cual permanecía sentado. Ante esta situación, al
igual que en los cuentos anteriores, el lector nuevamente se ve frente al
contraste de lo real y lo irreal, creando en si mismo, una vacilación entre
estos dos mundos opuestos donde predomina la incertidumbre que lo asecha.
Conclusión
A partir del análisis de los diferentes cuentos, libros de opiniones e incluso
conferencias, se puede llegar a la conclusión de que el genero fantástico tiene
como principal objetivo motivar al lector para que éste logre romper con los
estándares de normalidad impuestos por la sociedad, dejando de lado las leyes
que rigen su vida cotidiana y tomando como verdad única e irrefutable, la
impuesta por el autor. Si bien la temática de los cuentos, relatos o novelas
fantásticas varia de una en otra, todas poseen la particular característica de
la vacilación entre un mundo real, muy parecido al de quien recibe el texto,
entrelazado con hechos sobrenaturales los cuales el lector tiene que tomar como
propios para, de este modo, poder dejarse llevar por los hechos que caracterizan
el texto, cumpliendo así, un papel fundamental en la interpretación de la
literatura fantástica.
Bibliografía
ANDERSON IMBERT, Enrique, "Espiral", en Clara Obligado (comp..), Por favor sea
breve. Antología de relatos hiperbreves, Madrid, Páginas de Espuma, 2001.
ANDERSON IMBERT, Enrique, "Las estatuas", en Narraciones completas; Buenos
Aires; Editorial Corregidor; 1989
BARRENECHEA, Ana María, "Ensayo de una tipología de la literatura fantástica",
en Cuentos fantásticos Hispanoamericanos , Buenos Aires, Huemul, 1980
BRASCA, Raúl, "Felinos", en Clara O Obligado (comp..), Por favor sea breve.
Antología de relatos hiperbreves, Madrid, Páginas de Espuma, 2001.
CORTÁZAR, Julio, "El sentimiento de lo fantástico", en La casilla de los Morelli,
Editorial Tusquets
FREUD, Sigmund, "Lo siniestro", en Obras completas, Buenos Aires, 1919
JACKSON, Rosemary, "Fantasy: Literatura y subversión", Buenos Aires, Catálogos,
1986