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Horacio Maceyra

El carácter del peronismo, orígenes y primer gobierno.

Antecedentes à crisis del año 30.

à el pacto Roca-Runciman.

à migración interna à esta masa provinciana se desenvolverá en condiciones precarias: carente de experiencia gremial, no conocerá el sindicato y encontrará difícil su inserción en el nuevo medio social.

à golpe militar de 1943 que quebró la ficción constitucional encarnada en el gobierno fraudulento de Castillo, mostró matices ideológicos tan cambiantes y contradictorios como lo eran los sectores que se disputaban su hegemonía: liberales aliadófilos, confusos representantes del nacionalismo católico, germanófilos confesos.

A poco, sin embargo, prevalecería en la conducción el grupo de militares nacionalistas nucleados en el GOU, sobre el cual tenía influencia Perón. Cuando su amigo personal, Farrel, asume la presidencia, Perón cuenta con una base firme para desarrollar su acción política. Ocupará la Dirección Nacional de Trabajo (luego convertida en Secretaría de Trabajo y Previsión por él) y desde allí comenzará a moverse con miras a obtener una base de apoyo popular para el gobierno militar.

Perón tomará contacto personal con mucho de los viejos líderes sindicales, los escuchará y estimulará sus iniciativas y sus luchas.

El gobierno, a través de Trabajo y Previsión, propicia el fortalecimiento de la CGT y apoya la rápida formación de nuevos sindicatos en las ramas industriales donde antes no existían. El número de agrupaciones crece rápidamente, pero no se incrementa con la misma rapidez el número de trabajadores agremiados.

Cambia la actitud oficial frente a la clase obrera y a los conflictos laborales. El proletariado se hacía “peronista” sin emplear ese vocablo.

1944 -> se sanciona el estatuto del peón rural, que fijaba condiciones mínimas de trabajo para quienes eran víctimas de una explotación secular.

1945 à por iniciativa de Perón, se impulsaron una serie de leyes y decretos que constituían una verdadera transformación en materia de legislación laboral y social: extensión de la indemnización por despido, de las jubilaciones, régimen de vacaciones pagas, aguinaldo, remuneración mínima para el trabajador en relación de dependencia.

Por primera vez el trabajador se sentía protegido e interpretado.

Adhesión de la clase obrera al peronismo à argumento à las “masas en disponibilidad”, los sectores recién incorporados al trabajo industrial, carentes de experiencia política y sindical, vendieron sus libertad a cambio de unas pocas ventajas materiales, demagógicamente concedidas.

1945 à perón es desplazado de sus cargos por la presión de los grupos más conservatistas dentro del gobierno militar. Las masas obreras sintieron amenazadas sus conquistas materiales y su nueva situación social, y decidieron afirmar su protagonismo defendiendo al coronel.

1946 à el peronismo llega al gobierno, con comicios libres, cerrando toda una época de fraudes electorales.

à el proletariado hace su ingreso a la vida política.

El impacto del peronismo sobre la estructura política tradicional dejaría descolocados a todos los antiguos partidos, al polarizar la vida nacional.

La revolución nacional que el peronismo inició.

El peronismo à sus dos pilares fundamentales à la clase obrera

à el ejército

El peronismo produciría la modernización de la estructura productiva decadente, impulsando un rápido desarrollo industrial y recuperando para el país los resortes fundamentales de su economía. También produciría una modificación en la distribución de la riqueza: elevaría las remuneraciones, la justicia social (pivote de la política peronista) se implementaría en multiplicidad de formas, a través de la política social del gobierno en las áreas de vivienda, salud, educación, regímenes laborales, de previsión social, etc.

El gobierno emprendió la nacionalización de los servicios públicos en manos extranjeras.

Se repatrió la deuda externa, eliminándose un factor de pérdida de divisas por vía de los intereses.

Regulación de las importaciones con vistas a la protección y fomento de la industria nacional.

La virtual nacionalización del comercio exterior mediante el IAPI permitió monopolizar la oferta exportadora (fijando precios mucho más convenientes y remunerativos al concertar las operaciones de gobierno a gobierno) y regular las importaciones, resguardando la producción nacional. El estado obtenía una diferencia en la comercialización de las exportaciones, que derivaba en parte hacia la industria, otorgando divisas a precios diferenciales para la adquisición de bienes de capital y materias primas esenciales, obteniéndose así mismo recursos para financiar la inversión social. Esa política de transferencia de ingresos del agro a la incipiente industria, implicó el establecimiento de un nuevo equilibrio económico regional y sectorial, posibilitando un singular impulso hacia la industrialización y la diversificación productiva, que esta vez era producto de un esfuerzo deliberado del gobierno.

La industria creció.

La sustitución del capital privado extranjero por capital nacional, hizo que la proporción de capital extranjero sobre capital todo descendiera.

Ampliación del mercado interno, por la expansión del consumo popular.

La fijación por el IAPI de los precios de los alimentos permitió abaratar el consumo interno, contribuyendo a mejorar el nivel de vida popular.

Política social de construcción de viviendas, extensión del sistema de salud y asunción por las obras sociales sindicales de nuevas funciones como el turismo social, que posibilitó (junto con las colonias de vacaciones estatales) el acceso a la recreación y el descanso de mi miles de trabajadores, que nunca habían conocido tales beneficios.

La transferencia de ingresos hacia el sector asalariado, con alta propensión al consumo, no impidió la inversión.

Las limitaciones de la industria liviana y la naturaleza del peronismo.

La política aplicada tenía aspectos vulnerables. Había sido encarada en un momento particularmente propicio.

Hacia 1949 à el desarrollo encontraría obstáculos.

La demanda internacional volvió a contraerse, empujando los precios hacia abajo, lo que se combinaba con una merma en la producción debida a factores climáticos. Tales condiciones limitarían el crecimiento industrial, que seguía dependiendo de insumos y bienes de capital importados, cuyo abastecimiento se tornaba crecientemente difícil.

Si bien había reducido la vulnerabilidad externa de la economía, el carácter dependiente de la mismo no se había eliminado totalmente: el eje de la dependencia habiase trasladado de los bienes de consumo intermedio, a las materias primas industriales, los insumos y los bienes de capital que el país no producía. Las políticas implementadas por el peronismo, no revelarían igual eficacia frente a esta situación crítica, como en la fase ascendente del ciclo económico.

Críticas a la debilidad estructural de la industrialización alentada por el peronismo à si bien se estimuló poderosamente la industrialización sustitutiva de importaciones en las ramas menos complejas de la industria de consumo e intermedia, no se abocó a un esfuerzo análogamente intenso en la industria de bases, desperdiciando una oportunidad inmejorable para el “despegue” del país en este aspecto.