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RESUMEN PRIMER PARCIAL TEORIA DEL ESTADO
Martes 12/03: Politicidad y política. Politicidad del hombre. Caracterización del universo político y de la política. El político.
Politicidad del hombre: [POLITICIDAD-SOCIABILIDAD-COEXISTENCIA]
La politicidad del hombre constituye un dato de la realidad, es un hecho observable, que se desarrolla en un ámbito de coexistencia. Es decir, los hombres existen junto a otros hombres, coexisten, y en el marco de esa coexistencia entablan relaciones de diversa índole: cooperan, compiten, se traicionan, comparten sentimientos, etc.
El hombre esta condenado a existir, y en esa existencia obligada va implícita la coexistencia con los otros, por lo tanto, podría decirse que la politicidad del hombre constituye para él una nota existencial.
Para los antiguos, el hombre era tal en tanto formaba parte de una comunidad política. Los griegos (Atenas s.V a.C.) comprendían que el hombre era él y su polis, es decir, él y su contexto político; contexto que lo hacía ser tal hombre específicamente, con tal nombre, con tal educación, con tales costumbres, etc.
[1º Existencia en colectivo, 2º Existencia individual]
-Ejemplo histórico: Sócrates. A pesar de ser injustamente condenado, se niega a escapar de la muerte para no violar las leyes de su comunidad. à patético y paradigmático.
Pero Sócrates es Sócrates, porque ha vivido toda su vida coexistiendo políticamente con otros hombres sometidos a las mismas leyes.
Aristóteles (discípulo de Sócrates) à El Hombre: “zoon politikón”à “animal político”. Otras caracterizaciones de la condición humana: la racionalidad y el lenguaje.
Politicidad- Racionalidad- Lingüisticidad: Los tres se refieren a la misma condición humana.
El lenguaje es lo que permite al hombre comunicarse con otros hombres; la racionalidad (para los griegos), no es la fría razón instrumental-individual moderna, sino que es una razón dialógica, es decir, lingüística, comunitaria, política. La condición socio-política del ser humano es inherente a su condición de ser racional con capacidad de habla.
Esta antropología política del mundo antiguo se ve reforzada por una cosmovisión organicista de las cosas. Un hombre aislado de la comunidad no es propiamente un hombre (ya que no ejerce su capacidad lingüística, racional y política). El hombre para ser hombre, debe ser ciudadano; y ser ciudadano es ser parte de un “organismo” mayor (la polis) que le da existencia como tal, y lo saca de la animalidad vulgar.
En la modernidad (s.XVI) esa concepción del hombre político se altera radicalmente. Cambia la visión organicista; cambia la concepción del hombre; cambia el contexto político. Pero, aunque la Politicidad deje de ser vista como una característica definitoria del ser humano, no deja de constituir un dato observable de la realidad.
La novedad fundamental de la era moderna es la aparición del individuo; es decir, el descubrimiento de que el hombre puede tener intereses individuales diferentes de los de su comunidad. La vida política viene a plantearse como algo adjetivo, no sustancial. En los antiguos, la Politicidad se presupone para explicar al individuo concreto; en los modernos, el individuo concreto se presupone para explicar la Politicidad. -->ninguno de los dos aspectos deja de estar en momento alguno.
El hombre-individuo en la cultura moderna trae aparejada una distinción, que en los antiguos no existía. La distinción entre “sociedad civil” y “Estado”.
-Sociedad civil: constituye el universo de las relaciones privadas entre los individuos, relaciones por las cuales cada uno persigue sus fines particulares.
-Estado: se presenta como un “mecanismo” creado por los hombres para asegurar la convivencia pacifica en el seno de un pueblo.
Caracterización del universo político y de la política. (caracterización cualitativa del universo político)
El universo político esta constituido por el conjunto de relaciones de influencia interhumanas. Todo hombre en su coexistencia con otros hombres permanentemente busca influir en la conducta de los demás. Todos, de una forma u otra, buscan imponer su voluntad; todos, recurriendo a diversas técnicas, pretenden determinar la conducta de quienes lo rodean.
Ahora bien, en primer lugar, hay que excluir del universo político toda situación de aislamiento individual. En estos casos, no existe Politicidad porque directamente no existe ningún tipo de interrelación humana. El mínimo requisito del juego político es que coexistan, al menos, dos personas. Pero, en segundo lugar, la coexistencia de dos personas como mínimo es requisito necesario pero insuficiente. En efecto, no cualquier tipo de interrelación humana es política. Para que pueda hablarse de relaciones de influencia se precisa:
Así, quedan excluidos del universo de relaciones políticas, el estado de guerra (donde no existe la intención de determinar la voluntad del otro, sino de reducirlo directamente por la violencia física) y el estado de armonía perfecta (al no haber conflicto, no hay necesidad de influir sobre los otros). La política viene a ser un intento por solucionar conflictos interhumanos evitando (o economizando) violencia.
Entre la guerra y la armonía perfecta se presenta una escala de gradaciones según las vías empleadas para imponer la voluntad. Tales vías son la amenaza, la contraprestación y la argumentación (y en este mismo orden se alejan de la guerra, y se acercan a la armonía). Esta “técnicas de influencia” son los recursos por los cuales los hombres actúa políticamente, procuran imponer su voluntad a los otros economizando violencia.
Argumentación- contraprestación- amenaza
Armonía política violencia
Amenaza: hacer sentir temor sobre una posible violencia.
Contraprestación: a cambio de lo que quiero que hagas, obtenes un beneficio.
Argumentación: exponer discursivamente mi voluntad, dar fundamentación/justificación.
Universo político: es el conjunto de interrelaciones de amenaza, contraprestación y/o argumentación por medio de las cuales los hombres procuran recíprocamente imponerse sus respectivas voluntades.
(caracterización cuantitativa del universo político)
Existe un aspecto “cuantitativo” del asunto que puede plantearse recurriendo a dos pensadores clásicos de la política:
-Maquiavelo: Concibe la política como una actividad reservada a unos pocos, los “leones”; la inmensa mayoría de la gente, el “rebaño”, permanece ajena a esa actividad.
-Hobbes: la política, en tanto intento de imponer la voluntad a los demás, es connatural a todos los hombres, “lobos” de si mismos.
Mientras Maquiavelo postula una clara distinción entre quienes “nacen” para la vida política y quienes no, Hobbes ve en el hombre una tendencia generalizada y natural a la lucha política. Para Hobbes, todos son políticos; para Maquiavelo, unos lo son y otros no.
Parece claro que Hobbes tiene razón: todos, desde la cuna intentamos determinar a los otros, imponerles nuestra voluntad; todos actuamos dentro del universo de las relaciones políticas; la extensión de este universo es amplia y general. Pero del hecho de que todos hagamos política, no se desprende que todos “seamos políticos”. Para determinar quiénes “son” políticos convendrá establecer un limite como en el modelo de Maquiavelo. El universo político nos comprende a todos (como sostiene Hobbes), pero en su seno se mueven unos seres específicos que hacen de la política la actividad central de sus vidas: los políticos.
¿Qué es la política?
-Sentido amplio: abarca cualquier género de actividad directiva autónoma. Todos hacen política (con el voto por ejemplo); buscar influir en la dirección.
-Sentido restringido: la dirección o la influencia sobre la dirección de una asociación política (actualmente llamado Estado); imponer influencia.
El político
-El político es quien realiza actos políticos de manera profesional.
El político emplea su influencia para acrecentarla; es decir, la invierte con el objeto de lograr mayor influencia. El político es un “inversor de influencia”.
Diferencia entre economía y política: La economía gira en torno del concepto de eficiencia, la política lo hace en torno del concepto de eficacia. La eficacia consiste en la obtención de los objetivos buscados, y la eficiencia es la manera menos costosa de hacerlo. La política no es pura -ni siquiera predominante- racionalidad. Muchas veces, el “inversor de influencia” debe tomar decisiones sin tiempo para calculo alguno, es decir, debe librarse al azar; muchas otras veces para asegurar el objetivo buscado debe invertir mucho mas de los estrictamente necesario.
El político, apoya un pie en el calculo y otro en el azar. Esto lo advirtió Maquiavelo (para adquirir y conservar un principado) virtú (habilidad) y fortuna (suerte/azar).
[La fortuna demuestra su dominio cuando no encuentra una virtú]
El político, entonces, busca imponer su voluntad. El contenido de la voluntad del político es posicionarse cada vez mejor para poder seguir imponiendo su voluntad; se trata de “la voluntad de imponer la voluntad”.
Para aclarar: político no es solamente quien se ha posicionado estratégicamente para imponer su voluntad, sino también el que lucha desde el llano para posicionarse. Por otro lado, tampoco son políticos todos los que llegaron a posiciones de poder, puede darse el caso de quien lo haya hecho por total azar, y el ser político implica un mínimo de premeditación y calculo, algo de arte y de habilidad personal.
Viernes 15/03: El conocimiento político. Orígenes del conocimiento político: los sofistas, Platón y Aristóteles.
Puede decirse con certeza, que la política ha constituido un objeto de interés para el conocimiento desde los principios de la filosofía occidental. La política era la finalidad practica (también existía una finalidad religiosa) de todo el proceso de iniciación filosófica.
Es recién con los sofistas, que la política se perfila por vez primera como disciplina específica del conocimiento. Estos maestros populares del s.V a.C. ateniense enseñaban el arte de imponer la voluntad, de convencer en las asambleas y de vencer en los pleitos. Concebían el conocimiento político como el desarrollo de una habilidad susceptible de ser enseñada y aprendida mediante la práctica de técnicas retoricas. Para ellos el conocimiento político era un saber obrar (lo que los anglosajones denominan know-how).
Características comunes a todo el movimiento sofistico: relativismo antropológico y realismo sociopolitico; relativismo epistémico e importancia de la retorica y de la Politicidad como rasgo del hombre.
Los maestros sofistas eran grandes viajeros, lo que les permitió descubrir la diversidad de costumbres que regían a los distintos pueblos de la época. De aquí derivaba un relativismo antropológico que les impedía determinar cuales fueran mas justas y cuales no (Protágoras resumía esto diciendo que: el hombre era la medida de todas las cosas); es decir, advertían que las instituciones por las que un pueblo se daba existencia política no eran inmutables, sagradas e iguales en todas partes, sino que dependían de circunstancias y contingencias históricas, sociales, geográficas, etc. A partir de este relativismo antropológico, los sofistas mantenían un relativismo epistémico (concepción de la verdad como algo convencional y variable) y un realismo sociopolitico. Este realismo no es otra cosa que la adaptación a las reglas costumbres vigentes en cada pueblo para lograr una acción política exitosa. La clave de esa acción exitosa es la retórica, o sea, el arte de convencer.
Los sofistas concebían el conocimiento de la politica como una técnica para desenvolverse con éxito en el universo de las relaciones de influencia. Era un conocimiento práctico en el que se trataba de ver la realidad social tal cual es en un lugar y momento determinado, y actuar en forma inteligente para tener éxito en su seno.
En tanto conocimiento teórico, la politica reconoce en Platón (desde el 427 a.C. al 347 a.C.) a su fundador. Con él principia propiamente la Teoría Politica.
Pensamiento platónicoàtres líneas temáticas inseparables entre sí:
Platón advierte una relación muy estrecha entre la vida politica y las creencias de sus protagonistas. Platón ve una Atenas convulsionada políticamente y responsabiliza por esta situación a las enseñanzas de los sofistas, quienes habrían alterado la estructura recta del alma de sus ciudadanos.
Platón parte de una firme analogía entre el alma individual y la constitución de la polis. Su filosofía politica consiste en un traslado al ámbito de la organización politica de su teoría tripartita del alma. El alma individual se compone de tres partes, en las que las inferiores deben subordinarse a las superiores (3ºapetitos, 2ºvoluntad y 1ºrazon) para que el hombre sea armonioso y justo, de igual manera en la organización politica, los trabajadores y artesanos debe subordinarse a los soldados, y ambos a los gobernantes, que vienen a ser la razón de la polis. Para que la polis sea justa, es preciso que cada clase posea una virtud especial: los trabajadores y artesanos, la templanza; los soldados, la valentía y los gobernantes, la sabiduría.
Platón distingue la mera “doxa” (opinión) de la “episteme” (ciencia).
Doxa: opiniones y creencias sobre el mundo empírico (no importa sean acertadas o no).
Episteme: conocimiento de los objetos inmutables de las matemáticas y las ideas (formas o esencias).
La episteme para Platón constituye el verdadero y único conocimiento, valido en todo tiempo y lugar. Mientras el común de la gente solo es capaz de doxa, el filosofo accede (o se aproxima) a la verdadera sabiduría; por lo tanto, solo el filósofo debería gobernar en una polis justa.
*Despojarse de las cosas de cuerpo es clave para llegar a la episteme à los filósofos.
*Razónàmás próximo para llegar a la episteme.
*El rol del filosofo gobernante de Platón, responde a la idea de Justicia.
La polis ideal de Platón no puede hacerse efectiva; esta formulada en el plano del deber ser. Debe entendérsela como un modelo analítico para juzgar y clasificar a las polis reales.
A partir de la polémica de Platón con los sofistas, queda abierta una brecha entre el deber ser y el ser.
-Sofistasàseràproto teoría explicativa.
-Platónàdeber serà teoría prescriptiva.
Republica justa (gobernada por los filósofos)
Aristóteles (discípulo de Platón y tercer pilar en que se funda el origen del conocimiento político), procurara cerrarla construyendo una teoría política del poder ser. Su interés es explorar las condiciones de realización y funcionamiento de la mejor organización politica posible.
Aristóteles concibe la polis como producto de una evolución histórica de unidades sociales que se han ido agregando unas sobre las otras. Así la unión del macho y la hembra, la aparición de la familia, el posterior surgimiento de la aldea, etc., son como células constitutivas de la polis, que a su vez expresan distintos estadios de su desarrollo histórico. Aristóteles también pasa revistas a una serie de constituciones y revisa la literatura politica que le precedió. De todos eso regímenes, empíricos o ideales, efectúa un breve análisis crítico, lo que lo representa como precursor del método comparativo en los estudios políticos.
-Aristótelesàpoder seràteoría prescriptiva
Constituciones, conductas de las polis; las va comparando y así quiere llegar a un modelo de polisàEudaimonia: felicidad/bienestar.
La finalidad de toda comunidad politica es, para Aristóteles, el buen vivir; solo cuando los gobernantes se desempeñan movidos por el bien común puede decirse que un gobierno es recto o justo.
-Aristóteles elabora una tipología de las formas de gobierno: tres formas rectas y tres formas corruptas o degeneradas.
Polis justas |
Polis injustas |
Monarquía: la recta forma del gobierno de uno para el bien común. |
Tiranía: el interés común es desplazado por el interés particular y el capricho del gobernante. |
Aristocracia: forma recta del gobierno de pocos. |
Oligarquía: es su especie degenerada |
Politeia: (gobierno popular bueno) es la forma recta del gobierno de muchos. |
Democracia: (gobierno popular malo, en la terminología aristotélica), es su versión corrompida. |
-Aunque esta tipología haya perdurado por siglos, Aristóteles solo la empleara por meros fines didácticos.
En realidad, dice el filósofo, que lo verdaderamente determinante es el tipo de intereses que predominan: si los ricos o los de los pobres. Una oligarquía será tal si prevalecen los intereses de los ricos (no importa si formalmente gobierna uno, pocos, o la mayoría). Una democracia será tal si los intereses que predominan son los de los pobres (independientemente del número de los que gobiernen).
Aristóteles ahora se pregunta por el mejor régimen posible, y su respuesta es: el mejor régimen posible ha de ser una adecuada síntesis de la aristocracia y la Politeia, de virtud y de libertad; una polis donde no se pueda diferenciar mayoría y virtud y donde no haya enfrentamientos entre ricos y pobres. Esta polis posible es aquella en la que predomina ampliamente la clase media.
-Los sofistas, Platón y Aristóteles, constituyen los tres pilares en que se apoya la tradición politica occidental desde sus orígenesàEl ser, el deber ser y el poder ser, son ámbitos donde ellos han tematizado la politica como objeto del conocimiento. Como aportes fundamentales de estos padres fundadores pueden apuntarse:
1) la politica como objeto del conocimiento practico (“know-how”), habilidad que puede enseñarse y aprenderse;
2) la politica como objeto del conocimiento teórico, es decir, como un saber especulativo, de carácter proposicional (“know-that”);
3) la incipiente concepción de la politica como conocimiento aplicado (ingeniería social);
4) el descubrimiento de la relación entre psicología individual y organización politica;
5) el empleo de modelos abstractos con fines analíticos y prescriptivos (no siempre claramente diferenciados los unos de los otros);
6) el empleo del método comparativo;
7) el descubrimiento de la relación entre estabilidad politica y distribución de la riqueza;
8) la tipología clásica de formas de gobierno.
Viernes 22/03: Refundación de la teoría politica en la modernidad: Maquiavelo. Disciplinas. Epistemología y método de los estudios políticos.
Refundación de la teoría politica en la modernidad: Maquiavelo (s.XV)
Sera recién en el Renacimiento (s.XIX) cuando el conocimiento político cobrara nuevas fuerzas teóricas y metodológicas. No es que Maquiavelo rompa con la tradición antigua; por el contrario, en cierto modo, la retoma en especial, el legado de la sofistica y del aristotelismo político, aunque también, pero en medida menor, el platónico. La gran novedad en Maquiavelo es que la politica, como actividad y como objeto de estudio, adquiere total autonomía de otras esferas; ya que, durante el Medioevo, el pensamiento religioso tiñe toda la producción intelectual, con lo que la politica tampoco logra adquirir autonomía. Maquiavelo logra dar definitivamente a la politica una entidad diferenciada de cualquier otra disciplina. Con él, la politica, tanto como actividad y como rama del conocimiento, pretende descubrir su propia lógica y leyes sin auxilio externo y sin oponerse al servicio, tampoco, de nada externo a si misma.
Considera Maquiavelo, que cierto nivel de conflicto es imprescindible para garantizar en el seno de una comunidad politica un sistema de libertades para los distintos sectores de la población.
Es en El Príncipe, donde Maquiavelo hace sus mayores aportes al estudio de la politica. Aquí es donde, los estudiosos políticos adquieren autonomía frente a la religión, la metafísica y la ética. La especulación filosófica deja paso a la indagación histórica como técnica de recolección de evidencia.
El Príncipe:
*Maquiavelo, dos tipos de principados:
--Adquiridos: el príncipe lo obtiene por sí mismo por una conquistaàmás difíciles de conservaràpueden haberlo sido por “virtú” (habilidad) o por “fortuna” (azar) (*)
--Heredados: herencia del padre.
(*) La “fortuna” puede facilitar la adquisición, pero la conservación seguramente será precaria. En cambio, los principados adquiridos por “virtú”, son de más difícil logro, pero su conservación resultara más segura.
*Objetivo de la politica para Maquiavelo: obtención y protección del poder.
Con Maquiavelo se refunda el conocimiento político; se enriquece considerablemente el vocabulario político; la politica adquiere por fin carácter independiente de otras actividades y disciplinas; y queda, definitivamente establecida en la teoría politica, la distinción del ser y el deber ser. También con Maquiavelo, aparece una clasificación típicamente moderna de las formas de gobierno (republicas y monarquías).
El conocimiento político: disciplinas.
Los estudios políticos constituyen un conjunto de disciplinas (científicas y no científicas) heterogéneas entre si. De las diversas disciplinas que conforman los estudios políticos, conviene distinguir entre dos formas principales de conocimiento:
-La faz agonal (lucha por el poder): “el arte político”, o sea, la habilidad de imponer la voluntad a los demás. Se trata de un “obrar” exitoso sobre los demás. à”la política como lucha”
-La faz arquitectónica (construcción social desde el poder): un saber tecnológico, es decir, aplicado. Se trata de la “ciencia política aplicada”. à” para conservar el poder, hay que saber construir”
Los anglosajones distinguen:
-“Politics” (la política como objeto de conocimiento y como actividad humana de la lucha por el poder)
-“Policy” (implementación racional de conocimientos para pasar de un estado de cosas a otro)
*En lengua castellana, últimamente se ha popularizado el giro “políticas públicas” para referirse a esta disciplina de los estudios políticos. Podríamos denominarla “politología”, entendiendo por tal disciplina “ingeniería social” o “ciencia política aplicada”.
-Para resumir, disciplinas que integran la familia de estudios políticos:
*Ciencias políticas (sociología política, psicología política, antropología política, etc., mas las disciplinas auxiliares: derecho constitucional, estadística y filosofía política).
*Arte político (obrar hábil en la lucha cotidiana por imponer la voluntad a los demás).
*Politología (implementación racional y deliberada de las ciencias políticas, del arte político y de cualquier forma de conocimiento a los fines de desarrollar políticas públicas, o sea, moldear la sociedad).
-El saber del cientista político es un “explicar” àel saber del intelectual de la política
-El saber del artista político es un “obrar” (en el sentido de actuar adecuadamente)àel saber del político
-El saber del politólogo es un “hacer” (en el sentido de construir)àel saber del tecnócrata
Sartori, refiriéndose a cómo pueden complementarse en el futuro estos tres tipos de “conocedores de temas políticos” dice: *Aun cuando gobernaran los hombres de ciencia, el poder seguirá en manos de los “especialistas del poder”, de aquellos que hacen de la conquista y el ejercicio del poder el objetivo primario, si no exclusivo, de su existencia. De hecho, el político moderno entiende y aprovecha a la clase teórica, como un recurso estratégico. *
Epistemología y método de los estudios políticos.
Como introducción general al problema de la epistemología e las ciencias sociales, hay que aclarar la distinción entre explicación y comprensión. (La distinción es importante porque se relaciona directamente con la polémica entre quienes sostienen, por un lado, la unidad de métodos de las ciencias sociales y las ciencias naturales, por otro lado, quienes sostienen la dualidad metodológica).
Para los primeros, el único método científico consiste en la “explicación” de los fenómenos observados, refiriéndolos a causas que los producen.
Para los segundos, el método de la explicación solo es útil en el ámbito de las ciencias naturales, mientras que para las ciencias o estudios sociales y humanos el método adecuado debe basarse la “comprensión” de los fenómenos y comportamientos observados, buscando su finalidad y sentido.
Ejemplo: en un aula, el profesor deja caer una tiza al suelo para ejemplificar lo que esta diciendo, “explicar” lo ocurrido consiste en remitir la caída de la tiza a una causa: la ley de gravedad; “comprender” lo ocurrido consiste en encontrar la finalidad y el sentido que tiene la conducta del profesor: dar un ejemplo a la clase.
-De la postura explicacionista se deriva una metodología esencialmente cuantitativa: se trata de medir y cuantificar todo lo observado, clasificándolo en “variables” y buscando relaciones causales entre ellas. Ej.: técnicas típicas como encuestas, estadísticas, experimentos controlados y las mediciones de todo tipo.
-De la postura comprensivista se deriva una metodología del tipo cualitativo: de lo que se trata aquí es de sumergirse directamente en el mundo cultural de los actores estudiados, procurando entender desde su propio mundo, sus comportamientos. Ej.: técnicas de observación participativa, entrevistas personales en profundidad, historias de vida, análisis hermenéutico de documentos y discursos, etc.
-El cuantitativismo metodológico presenta una serie de limitaciones ante el universo político, que pueden agruparse en tres grandes aspectos:
1) La faz simbólica: los símbolos revisten singular importancia dentro de la política, y mas especialmente en la democracia. La política se expresa por medios simbólicos; ej.: discurso, palabras, slogans, banderas, sonrisas, etc. Los símbolos no pueden ser satisfactoriamente estudiados a través de encuestas y mediciones Los analistas que se quedan solo con los métodos cuantitativos tienden a creer que aquellos aspectos de la política que no pueden ser medidos no existen o no son importantes.
2) La faz irracional: comprende todos los factores del tipo inconscientes, azarosos, imponderables, etc. Por ej: los factores psicológicos no son fáciles de medir por el mero calculo numérico de los métodos cuantitativos.
3) La faz practica o artística: se refiere a todas aquellas maniobras que hacen de un hombre un político hábil y exitoso. La cotidianidad práctica de la política, sus personajes, sus habilidades para lograr sus objetivos, sus fines individuales, etc., solo serán comprendidos si el investigador toma comunicación directa con ellos, y conoce sus puntos de vista y el contexto en que se mueven y comportan.
Estas tres fases de la política (que escapan a la metodología cuantitativa) no son secundarias, sino que son centrales. Si queremos estudiar la política en todas sus dimensiones y en su realidad cotidiana, es necesario “comprender” a sus actores desde su propio mundo. Las técnicas cuantitativas seguramente brindan un complemento inestimable para “explicar” ciertos fenómenos importantes (por ej., tendencias electorales) pero de ninguna manera pueden reflejar la plenitud del universo político.
Martes 26/03: Concepto y orígenes del Estado moderno. Concepto de Estado. El Estado absolutista como primera expresión del Estado moderno: el pensamiento político de Bodin y Hobbes. Finalidad de la teoría de la soberanía.
Concepto y orígenes del Estado moderno
Solo consideraremos Estado a la forma de organización política propia de los tiempos modernos, reservando otros nombres para las formas de organización política preexistentes.
Concepto de Estado
*La palabra “Estado” es un término extremadamente multívoco.
Puede decirse que existen tres grandes y predominantes conceptualizaciones de “Estado”:
Significados de Estado |
1. Estado: organización política; población; territorio. |
2. Estado: organización política (cualquiera). |
3. Estado: organización política surgida en Occidente a partir del Renacimiento. |
Adoptamos el ultimo sentido que es más específico. Por tanto, de acuerdo con Hermann Heller, el Estado queda caracterizado por los siguientes elementos:
-Hay también otro dato fundamental para diferenciar a la organización política de las sociedades occidentales modernas (Estado) de las diversas formas en que las agrupaciones humanas se han ido organizando a través de la historia. Ese dato fundamental es l aparicion de la sociedad civil como realidad social anterior y contrapuesta al Estado, esto quiere decir, que lo político y lo social, se han divorciado, corren por carriles opuestos; situación que era totalmente extraña a los antiguos y a los medievales. Existe una gran novedad en los tiempos modernos: el descubrimiento del individuo.
La irrupción el individuo en la conciencia cultural moderna no es otra cosa que el descubrimiento de que los hombres pueden, y de hecho suele, tener intereses particulares, independientes e incluso opuestos a los de la comunidad. Esto en términos jurídicos, significa que el hombre moderno se escinde en dos esferas:
-la pública: lo hace miembro de una organización política (Estado) a la cual queda sujeto.
-la privada: lo hace actor en un universo de relaciones privadas (sociedad civil) donde persigue individualmente su interés particular. à(el mundo de las relaciones económicas y comerciales, y las prácticas religiosas y las relaciones familiares)
*La sociedad, en cuanto concepto reciproco del Estado, es un fenómeno muy reciente en la historia de Europa. Su aparición se halla estrechamente unida al pleno despliegue de la forma económica capitalista, a la definitiva liquidación del orden social estamental y al nacimiento de la “sociedad civil”.
El Estado absolutista como primera expresión del Estado moderno: el pensamiento político de Bodin y Hobbes.
Ya en el s.XV, en Inglaterra y las ciudades-republicas del norte de Italia se habían dado organizaciones políticas que merecían, propiamente, el nombre de “Estado”. Y es, precisamente en una de esas ciudades italianas, Florencia, donde surgió el primer pensador político que utilizo el término “stato” para designar a la nueva situación política. Ese pensador es, Nicolas Maquiavelo.
Sin embargo, la concepción del “Estado soberano” no aparece sino hasta el s.XVI. Para comprenderla es necesario remontarse a la situación social de Francia de esa época:
En Francia la guerra de los hugonotes de 36 años de duración entre los Guise católicos por un lado y los estamentos y ciudades hugonotes, por el otro, fue conducida con crueldad inexorable, con asesinatos y barbaries de todo tipo. Los reyes de Francia vacilaban entre la tolerancia y la participación en el terror religioso, pero no lograron poner fin al trajín sangriento: ni su autoridad, ni el poder militar eran suficiente. Los reyes no eran todavía “soberanos”, sino dependientes del poder propio de los estamentos y de las ciudades o, en todo caso, demasiado débiles para imponerse a estos últimos. […] Indecisión, resignación paralizante y la continuación imperturbable de la matanza por parte de los fanáticos religiosos sin esperanza de un fin, caracterizaban la situación.
Solo un pequeño grupo de juristas e intelectuales no estaba dispuesto a la resignación en esta situación desesperada. Trataron de encontrar un tercer camino, una salida que prometía paz. Se llamaban politiques: buscaban una salida política; no querían contribuir a la victoria de la causa católica o protestante, sino de la causa de la comunidad política, y esta causa exigía en primer lugar la paz. Su finalidad era fortalecer de tal modo la autoridad del rey como para capacitarlo a hacer efectivos los edictos de la tolerancia. Para este objetivo era necesario crear una base de lealtad suficientemente fuerte, mas fuerte que todas las ataduras feudales y mercenarias. A este objetivo servia la doctrina de soberanía.
-El más famoso de esos politiques fue Jean Bodin (sXVI), quien pensaba que la situación de enfrentamiento entre católicos y hugonotes en Francia requería de medidas drásticas para la posibilidad de una convivencia religiosa. Para este pensador, era necesario fortalecer de tal modo la monarquía que ninguna facción pudiera imponerse sobre la otra; la paz, y la tolerancia debían ser impuestas por un poder inapelable. A esta necesidad política concreta intenta dar respuesta la teoría de la soberanía.
-El poder soberano que postula Bodin debe ser entendido como el poder supremo del Estado para crear las leyes., y para ser tal, ostenta las siguientes características:
*Obedecen a la misma finalidad que persigue su teoría: asegurar la paz y la convivencia social. |
-El poder soberano de Bodin reconoce algunas limitaciones:
El poder soberano del monarca bodiniano termina reduciéndose, simplemente a legislar prudentemente y nombrar funcionarios.
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-La teoría de la soberanía le permite a Bodin efectuar una incipiente distinción entre Estado y gobierno.
-El poder soberano en síàcorresponde al Estado
-El ejercicio de su poder soberanoàcorresponde al gobierno
-Tres formas de “ejercicio” del poder:
*Bodin es el padre de la teoría de la soberanía; y, por ende, el primer filosofo del absolutismo moderno. Sin embargo, su pensamiento o es típicamente moderno en todos sus aspectos; sus concepciones y presupuestos son todavía bastante clasistas.
Sera un inglés quien fundamente filosóficamente al Estado moderno absolutista desde una base contractualista.
Tomas Hobbes (Inglaterra, s.XVII), es uno de los tres grandes contractualistas modernos. Con él, no solo la teoría de la soberanía adquirirá su forma mas acabada y radical, sino que la fundamentación contractualista del Estado desplazará totalmente a las versiones organicistas y teológicas.
-El modelo hobbesiano puede esquematizarse en tres estadios:
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Este modelo explica el paso del “estado de naturaleza” al “Estado” a través de un “pacto o contrato”.
*El estado de naturaleza no viene a ser necesariamente una realidad pre social, sino una posibilidad siempre latente y amenazante.
*En ambos casos es el miedo lo que motiva el pacto.
-Hobbes, es un pensador absolutista y, como tal, acepta la teoría bodineana de la soberanía; pero, la desarrolla de manera mucho más sistemática y radicalizada. Rechaza las limitaciones que, según Bodin, afectaban incluso al soberano. Para Hobbes, el derecho natural no puede obligar al soberano porque solo él puede determinar qué cosa es acorde con el derecho natural y que cosa no lo es. En cuanto a las limitaciones surgidas de la propiedad, tampoco son oponibles al soberano, porque esta no es anterior al Estado, sino que nace con este y solo puede existir dentro de este. Finalmente, las leyes de sucesión al trono tampoco pueden servir de limitaciones, pues soberano es quien logre ser obedecido sin importar como haya llegado al trono.
Igual que Bodin, Hobbes rechaza la teoría del gobierno mixto y de la soberanía divisible. Tampoco acepta la clásica distinción de prosapia aristotélica entre formas justas de gobierno y formas degeneradas o corruptas. Según Hobbes, no puede existir un uso abusivo o ilegitimo del gobierno porque la soberanía es absoluta y, si la soberanía es absoluta, todo lo que el soberano decida será conforme a derecho.
A partir de Hobbes, el orden público procura legitimarse por sí mismo, independientemente de la mitología, la metafísica y la religión. Su concepción de la “verdad” como “producto” humano viene íntimamente ligada a sus concepciones políticas. Para Hobbes, lo que determina característicamente al estado de naturaleza es la ausencia total de acuerdo sobre el significado de las palabras (justo, bueno, etc.); esto se debe a la pluralidad de intereses enfrentados que mueve a los hombres.
Para Hobbes, el soberano, igual que todo el mundo, sigue su propio y particular interés, que es conservarse en el poder. Por tanto, si ha de gobernar con prudencia e inteligencia no será por el “bien común” sino por no provocar a los súbditos poniendo en peligro su propia permanencia en el trono.
Finalidad de la teoría de la soberanía.
-Kriele: La teoría de soberanía no era tan solo un resumen de las pretensiones de poder que el rey había tenido y afirmado de todos modos. Esta teoría tenía una función politico-programatica. Los reyes tenían, en parte, competencia muy amplia, pero estaba legitimada por el derecho: mediante la investidura imperial, la tradición por la unión de diversos derechos y regalías en la persona de un gobernante. Esta base de legitimidad debía ser destruida y reemplazada por la teoría de soberanía. Mientras el rey solo tenia derechos asignados por el derecho, también los señores feudales tenían los derechos asignados a ellos por el derecho; había, todo un cosmos de pretensiones y competencias que rivalizaban entre sí. La planificación y la legislación centralizadas solo pudieron ser llevadas a cabo, si el rey podía disponer de todos estos derechos. Esto presuponía que él estaba por encima del derecho y, por consiguiente, su poder no podía provenir de este derecho.
Viernes 29/03: Transformaciones del Estado moderno. El Estado constitucional-liberal como segunda expresión del Estado moderno. Finalidad, principios y técnicas del constitucionalismo liberal. El pensamiento político de Montesquieu: la división de poderes.
Transformaciones del Estado moderno
La segunda forma histórica del Estado moderno; el Estado constitucional-liberal, nacido de los reclamos de la burguesía por incrementar sus márgenes de libertad (hablamos en este caso de libertad negativa) y tomamos como principal exponente teórico de esta forma de Estado a Montesquieu. Y como consecuencia de un reclamo de la sociedad en pos de obtener un mayor margen de libertad en el ámbito del Estado (libertad positiva), surgirá el Estado demo-representativo.
El Estado constitucional-liberal como segunda expresión del Estado moderno.
Conviene precisar un poco el significado del termino “liberal”. Para ello Benedetto Croce distingue tres acepciones diferentes: Liberalismo económico, liberalismo filosófico y liberalismo político.
Liberalismo económico: doctrina económica que promueve la libre empresa y la autonomía total del mercado. Se apoya en dos instituciones jurídicas fundamentales: la libertad de contratar y la propiedad privada. Principio básico de funcionamiento: la libre competencia entre las fuerzas económicas.
Liberalismo filosófico: es la actitud propia de los libres pensadores. Viene asociada a ciertas posiciones de critica anti dogmática.
Liberalismo político: doctrina política, producto de un movimiento histórico, que tuvo y tiene como finalidad garantizar ciertos derechos individuales a los gobernados y limitar el poder de los gobernantes. El liberalismo político es el constitucionalismoà “Estado constitucional-liberal”.
-Estado constitucional-liberal: pretende garantizar a los individuos cierta esfera de privacidad y libertad.
En el Estado constitucional hay “soberanía jurídica”àel Estado como la totalidad de los órganos y del derecho es soberano frente a la sociedad.
No hay dentro del E. Constitucional un soberano, es decir no hay nadie que tenga soberanía, o hay un poder que tenga las características de ser indiviso, incondicionado, ilimitado.
Existencia de un soberano Estado constitucional
En el E. constitucional solo hay competencias, limitadas por el derecho constitucional preexistente. El poder estatal esta distribuido entre los órganos; y todo órgano solo tiene aquel poder jurídico que le ha sido asignado por el orden constitucional.
*Si la constitución a la vez asigna y limita todas las competencias, ¿cabe decir que la constitución es soberana? àse trata de una soberanía en un sentido metafórico.
Constant: primero en advertir la diferencia entre la idea antigua de libertad y la moderna. Actualmente se distinguen dos acepciones: la libertad positiva y la libertad negativa. à(carecen de valoración)
Libertad positiva: comprende los derechos políticos de participación en el proceso de toma de decisiones colectivas.
Libertad negativa: comprende la esfera de derechos del individuo frente al poder políticoà sirve de faro al moderno Estado constitucional-liberal àÉsta es también la idea de libertad que tienen fundamentalmente los modernos a diferencia de los antiguos.
-L a primera transformación que experimenta el Estado moderno, desde el absolutismo al constitucionalismo, obedece a la necesidad de asegurar la libertad negativa (la necesidad de poner limites al poder del Estado frente a la sociedad).
Finalidad, principios y técnicas del constitucionalismo liberal: El constitucionalismo es un sistema de “técnicas jurídico-políticas” orientadas a una finalidad. Como ingeniería política, parte de ciertos presupuestos teórico-ideológicos. Por lo tanto, podemos distinguir:
El pensamiento político de Montesquieu: la división de poderes.
Montesquieu (1689-1755) àpadre del constitucionalismo
¿Qué leyes gobiernan o deben gobernar a las sociedades humanas?
El presupuesto del que parte Montesquieu es que todas las cosas están regidas o gobernadas por leyes, y este presupuesto vale tanto para el mundo físico como para el mundo moral. à en este último, la libertad de que goza el ser humano le permite alejarse de esa normatividad naturalà y es esta la que hace más difícil el estudio de la sociedad que el de la naturaleza.
Montesquieu comienza su estudio distinguiendo dos tipos de leyes:
-las positivas: son particulares de cada sociedad
-las naturales: son comunes a todos los hombres
La relación entre ellas es de complementación: las leyes positivas existen para hacer cumplir a los hombres las leyes naturales, es decir, para hacerlas efectivas en cada sociedad con sus respectivas peculiaridades.
Las leyes naturales son algo así como principios generales que requieren ser especificados encada caso concreto; estas leyes naturales son: la paz, alimentación, la unión de los sexos y la vida en sociedad.
Las leyes positivas varían de sociedad en sociedad, y de época en época, y son la implementación practica de aquellos principios naturales.
Es lógico, entonces, que las leyes positivas difieran en cada sociedad, ya que existen factores diversos que hacen que la implementación practica de las leyes naturales sea distinta en cada caso. Esos factores son de tres tipos:
Según Montesquieu estos distintos factores favorecen en distinta medida la libertad o el despotismo.
Tipología de formas de gobierno de Montesquieu: Es un perfeccionamiento de la tipología de Maquiavelo. Montesquieu la transforma en tricotómica (agregando el despotismo).
Montesquieu distingue 3 formas de gobierno
Clasificación fundada en el modo y las limitaciones que experimenta el ejercicio del poder político: formas moderadas y formas despóticas. El despotismo oriental lo es por naturaleza; la monarquía es la forma moderada por excelencia y las formas republicanas podrían ubicarse entre medio, siendo la subforma aristocrática mas propensa a la moderación que la subforma democrática.
La monarquía es, por lo tanto, la forma de gobierno más acorde con la libertad es la forma donde el poder político resulta más moderado. àHay que apuntar dos cosas: Montesquieu tiene la idea moderna de libertad negativa; el modelo de monarquía que Montesquieu tiene en mente es la monarquía parlamentaria inglesa, esto es, una monarquía limitada en dos sentidos: horizontalmente, por la división de poderes que Montesquieu cree ver en ese sistema y, verticalmente, por la existencia de grupos intermedios de poder (la nobleza) entre el monarca y el pueblo.
Montesquieu propone su doctrina de división de poderes:
-uno legislativo: ejercido por representantes parlamentarios de aquellos grupos sociales intermedios;
-uno ejecutivo. Ejercido preferentemente por un monarca hereditario;
-y uno judicial, de carácter temporario.
*Resulta que es exactamente a la inversa de como se ha tomado finalmente la teoría de división de poderes.
Mientras que Montesquieu propone un ejecutivo y un legislativo permanentes y un judicial temporario, el constitucionalismo liberal triunfante terminara sosteniendo lo contrario: un poder judicial permanente y un legislativo y un ejecutivo temporario.
Viernes 05/04: El Estado demo-representativo como tercera expresión del Estado moderno. Estado y sociedad. Sociedad civil, Estado y sociedad política. Las formas de Estado. El Estado de Bienestar: caracterización.
El Estado demo-representativo como tercera expresión del Estado moderno.
La nota característica de esta última transformación del Estado moderno ha sido (y es) la ampliación de los derechos políticos, es decir, dar lugar, aunque de manera parcial, a la libertad positiva.
En el Estado demo-representativo ya no es indistinto quien ejerza el gobierno del Estado.
En el Estado absolutista lo importante era el Estado en sí; en el Estado liberal lo importante era como se ejercía el poder del Estado sobre la sociedad y en el Estado demo-representativo importa también quienes ejercen ese poder estatal. Y solo es legitimo el gobernante electo por el pueblo (en realidad, el cuerpo electoral). à A la exigencia liberal de gobernar el aparato estatal respetando ciertos derechos individuales (libertad negativa), se le suma la exigencia de que los gobernantes (gerentes del aparato estatal) sean mandatarios de pueblo. Pero este pueblo no se autogobierna, sino que se limita a decidir quienes lo han de gobernar.
[…] el Estado constitucional democrático no es otra cosa que el Estado constitucional parlamentario que ha sido influido y modificado cada vez mas por la idea del gobierno del pueblo. Bajo el Estado constitucional democrático entendemos, el Estado constitucional parlamentario que ha sido democratizado. La democratización del E. constitucional significa la complementación del principio de libertad por el principio de igualdad.
El principio de igualdad debe garantizar que sea el pueblo, y no una parte del pueblo, el que tiene el poder estatal, y que los órganos del Estado, en especial el parlamento, ejerzan el poder en representación, al servicio y en interés del pueblo, y no de una parte del pueblo. El núcleo de la legitimación democrática es la elección periódica, las prerrogativas del legislador electo y la obligación de respetar la ley para todos los órganos del Estado.
El Estado demo-representativo es una forma evolucionada del Estado constitucional-liberal; una forma donde el valor libertad (en su acepción negativa) se complementa, dentro de lo que permite una organización estatal del poder, con el valor igualdad (libertad política). Esta tercera expresión del Estado moderno es producto de la alquimia del liberalismo con la democracia. Estas consideraciones son importantes para evitar la confusión entre el” Estado democratizado “y la “democracia”.
Estado y sociedad. Sociedad civil, Estado y sociedad política.
Con el advenimiento del individuo, también la sociedad religiosa medieval deviene una sociedad civilàes la esfera de las relaciones privadas, de los intereses particulares, de las relaciones económicas; es el reino del individuo, guiado por sus fines propios y autónomos y su razón instrumental àdos principios en que se apoya esta sociedad civil son el individuo como fin y el otro como medio, Hegel lo explica así:
-En su realización, el fin egoísta, at través de la universalidad, establece un sistema de dependencia multilateral, según el cual la subsistencia, el bienestar y la existencia jurídica del individuo, se mezcla con la subsistencia, el bienestar y el derecho de todos, se funda en ellos y solo en esta conexión está seguro.
-Cuando la sociedad civil funciona sin obstáculos, se acentúa así dentro de ella el progreso de la población y de la industria.
-En medio del exceso de riqueza la sociedad civil no es suficientemente rica, es decir, no posee bienes propios suficientes para impedir el exceso de pobreza y la generación de la plebe.
El problema político que representa esta nueva forma social es que sus tendencias centrifugas son auto aniquiladoras. Al no existir ya los fuertes lazos religiosos que conservaban la cohesión social en el mundo medieval, las relaciones intersubjetivas se vuelven cada vez mas libres; y “libres” quiere decir aquí, imprescindibles, sin reglas supraindividuales, no fundadas en otra instancia que no sea el interés egoísta que pueda perseguir cada uno.
La sociedad civil moderna es esencialmente igualitaria pero la cohesión social se vuelve problemática. Ante este problema surge el Estado como respuesta. El Estado moderno viene a cubrir el lugar que antes ocupo la religión, es decir, el papel de garante del orden social. Es como si la sociedad civil, consciente de sus propias tendencias auto aniquiladoras se autoasignara un tutor, para que imponga y haga respetar un mínimo de reglas de convivencia.
La sociedad finalmente vuelve a reivindicar para si ciertas funciones políticas. A esta sociedad activa, que ejerce su control sobre el Estado, es a la que llamamos “sociedad política”. La sociedad política está conformada por aquella esfera donde los hombres actúan como coexistentes o convivientes en una misma sociedad. Mientas el protagonista de la sociedad civil es el individuo, l protagonista de la sociedad política es el ciudadano.
“libertad negativa”à sociedad civil
“libertad positiva”àsociedad política
En tanto integrantes de la sociedad civil, los hombres tienen derechos individuales, y en la medida en que son también integrantes de una sociedad política, a esos derechos individuales se le suman los derechos políticos como ciudadanos. La sociedad civil empieza donde el Estado no llega. La sociedad política controla y dirige al Estado y solo existe en la medida en que la sociedad ejerce algún control y dirección sobre el Estado.
*La polis antigua (la ateniense), constituía un orden político donde no había sociedad civil ni Estado, solamente sociedad política.
*Rousseauàsociedad política total: hombre ciudadano total
En el contexto de la Teoría del Estado, la existencia de una sociedad política se presenta solo de manera limitada y parcial en lo que hemos llamado Estado demo-representativo. Este Estado demo-representativo no es propiamente una democracia sino un Estado parcialmente democratizado. Es decir, es una sociedad dominada por un aparato coactivo (el Estado) sobre el que ejerce algún tipo de control al elegir sus gobernantes, y al decidir, por si misma algunos asuntos.
En resumen, la sociedad civil nace con la Modernidad. La sociedad política “resucita o “despierta”, aunque solo parcialmente, después de un largo sueño de siglos, con el Estado demo-representativo. El Estado nace junto con la sociedad civil para contrarrestar sus tendencias centrifugas auto destructivas. La sociedad política es la reasunción parcial por parte de la sociedad de su autogobierno, parcial, porque esa reasunción no es mas que un control y dirección electoral sobre el Estado.
Las formas de Estado
-Estado democratizados: aquellos que están controlados y dirigidos políticamente por la sociedad mediante el sufragio universal, el reemplazo periódico de los gobernantes, las formas semidirectas de decisión (plebiscito, ej.). Es decir, son aquellos donde existen derechos políticos y donde hay una esfera de “libertad positiva”.
-Estado autoritarios: son precisamente lo contario; no existe en ellos sociedad política, ni, por ende, libertades positivas; la sociedad no ejerce ningún tipo de dirección o control político sobre el aparato estatal.
-Estados pasivos: mantiene ante la sociedad civil una actitud de no compromiso, de no interferencia. Es el Estado liberal clásico, limitado a sus funciones de seguridad, administración judicial y relaciones exteriores.
-Estado activos: el llamado Estado interventor. Este adopta frente a la sociedad civil una posición determinada; busca corregirla o moldearla de acuerdo con determinados fines. Este Estado activo admite varios subtipos:
*Los subtipos del E. activo, según el grado de la intervención:
+Estado de gestión limitado: persigue sus objetivos sobre la sociedad civil respetando la esfera de la “libertad negativa”, o sea, los derechos individuales.
+Estado total: busca ampliar la esfera estatal hasta los últimos recovecos, es decir, la reduce drásticamente en perjuicio de la libertad negativa. No existen derechos individuales frente al poder estatal.
*Los subtipos de E. activo según los fines que persiga:
+Estado desarrollista: se propone la industrialización y modernización de las estructuras productivas de la sociedad.
+Estado socialista: se propone la igualdad económica.
+El Estado redistribucionista: se propone como finalidad la igualdad de oportunidades.
El Estado de Bienestar: caracterización.
El Estado de Bienestar puede ser definido como un Estado democratizado, respecto de la sociedad política, y redistribucionista (activo limitado), respecto de la sociedad civil. De esta manera, el Estado de Bienestar y el Estado totalitario parecen ser diametralmente opuestos; democratizado y limitado el primero; autoritario y total el segundo.
Caracterización jurídico-constitucional:
Estado de Bienestar o “Estado social de derecho”à es la forma jurídico-institucional que corresponde al estadio de la democracia social, entendiendo a esta como forma y como sustancia política de un régimen basado en la concepción personalista de la dignidad del hombre, con pleno rechazo de toda teoría o interpretación transpersonalista que anteponga otros fines que el hombre mismo.
*La democracia social brega por la toma de decisiones que favorezcan gradualmente la creación de condiciones generales en las cuales prospere el mayor grado posible de igualdad de oportunidades.
Acerca del Estado de Bienestar, podemos decir que puede ser caracterizado desde tres puntos de vista: el sociopolítico, el jurídico-institucional y el ideológico-fundamentador.
Caracterización del Estado de Bienestar:
a) Política |
Estado democratizado |
Limitado |
Redistribucionista |
b) Jurídica |
Derechos políticos |
Derechos civiles |
Derechos sociales |
c)Ideológica |
Libertad positiva |
Libertad negativa |
Igualdad de oportunidades |
-El E. de Bienestar ha sido criticado desde los ángulos ideológicos más diversos:
*Desde la derecha conservadora tradicionalista se le critica sus tendencias igualitaristas y “socializantes”.
*Desde el liberalismo ortodoxo se le critica su excesiva injerencia en la sociedad civil, restringiendo la esfera de libertad negativa.
*Desde la izquierda se le achaca la conservación y el fortalecimiento de las diferencias de clase.
Viernes 12/04: El pensamiento político anti-Estado. Introducción a la teoría democrática. La democracia en la teoría de las formas de gobierno. El Contrato Social de Rousseau. Marxismo y anarquismo.
El pensamiento político anti-Estado.
E. Absolutista |
E. Liberal |
E. demo-representativo |
Anti-Estado |
Bodin |
Locke |
Mill |
Rousseau |
Hobbes |
Montesquieu |
|
Proudhon |
|
|
|
Marx |
“Anarquismo individualista” del “Estado mínimo”: busca la ampliación al máximo de la sociedad civil, sin hacer cuestión de la sociedad política.
Para el auténtico anarquismo: un Estado mínimo puede ser tan o mas perverso que uno grande o mediano. Para el pensador anti-Estado no se trata de un asunto de grados; se trata, mas bien, de pensar, soñar, planificar, profetizar, fomentar una sociedad organizada políticamente con prescindencia de la mediación estatal, una sociedad política y solidaria donde el Estado no tenga cabida ni necesidad.
Rousseau es considerado habitualmente como el principal filosofo de la Democracia. La concepción rousseauniana de la Democracia va más allá de las formas estatales de organización política. La Democracia rousseauniana se apoya en la idea de una “voluntad general” que debe ser buscada por todos y entre todos en el interior de cada uno, pero mediante la discusión común asamblearia. Esa “voluntad general” no puede ser mediada, delegada, ni representada. De esta manera, la Democracia rousseauniana es estrictamente directa.
Lo que esta proponiendo Rousseau es un desplazamiento total del Estado por la sociedad políticaàun desplazamiento total del individuo y el funcionario (ambas caras de una misma moneda) por un ciudadano total.
Proudhon, fundador teórico del anarquismo moderno. Su pensamiento parte de una dura condena a la propiedad privadaàes un robo a la sociedad. La propiedad privada, en su forma capitalista desarrollada es una institución de corte político, autoritaria, apoyada en la fuerza del Estado. De esta forma, la igualdad social se ve impedida por interferencias políticas, es decir, su causa es la existencia de la propiedad privada y del Estado, su garante. El programa político de Proudhon acepta la pequeña propiedad artesanal y cooperativa. Su propuesta consiste en una reorganización de la sociedad a partir de pequeñas comunidades agrario-artesanales, asociadas libre y federativamente entre sí.
Marx, también es un pensador anti-Estado no solo por sus criticas a la burocracia estatal, sino por su concepción misma del Estado y el socialismo. Marx, igual que los anarquistas, no ve en el Estado a un representante ni un garante del “bien común”, sino un instrumento de opresión. Para Marx, el Estado no es otra cosa que “el comité ejecutivo de la burguesía”, es decir, un administrador de los intereses de la clase dominante. A diferencia de los anarquistas, considera que la desigualdad social es consecuencia de las relaciones económicas de producción, no de interferencias políticas. La propiedad privada capitalista es una etapa necesaria en el desarrollo histórico de las sociedades (etapa que debe ser superada). Las diferencias de clase surgen en el seno de la sociedad civil, es decir, de las relaciones económicas; y, el Estado, como “junta ejecutiva” de la clase dominante. Cuando no existan diferencias de clase, no existirá Estado. El socialismo de Marx es un socialismo sin Estado.
*Es bastante fundado pensar que su proyecto político podía inspirarse en la experiencia revolucionaria de la Comuna de Paris (1871), experiencia donde el pueblo parisino ejerció, durante un breve lapso, democrática y directamente su autogobierno.
-Los 3 autores ven al Estado como: organización jerárquica burocrática, que genera desigualdad.
Anarquismo:
-Idea: desarrollo teórico de esos pensadores
-Movimiento: puesta en práctica de esas ideas
Caracteres del anarquismo:
“Ninguna opresión del hombre por el hombre”
-No acepta al Estado es un “parasito”:
Hecha esta breve reseña de tres pensadores importantes de los que puede y suele nutrirse lo que hemos llamado “neodemocratismo”, corresponde efectuar ahora un esbozo de las propuestas operativas de este “democratismo no estatal”. Modelo estructurado en tres momentos:
1)importantes responsabilidades y servicios que satisfacer
2)alto grado de autonomía política
3)recursos económicos propios
De esta forma, el régimen municipal puede ofrecer al cooperativismo un campo propicio para un aumento en la eficacia de los servicios públicos. También permite un proceso de regionalización libre y contractual, mediante la asociación voluntaria de los municipios entre sí, para atender a problemas y necesidades comunes.
-Podemos considerar como requisitos indispensables para la existencia y funcionamiento de una organización cooperativa a los dos principios siguientes:
La democracia: en el sentido simple y textual de que, a cada hombre, y a todos los hombres, corresponde un voto y nada más que un voto.
El servicio común: puede expresarse en cualquiera de sus formas: redistribución de excedentes y utilidades a prorrata de las actividades y operaciones de cada miembro, o su destino a finalidades comunes.
-Estos tres requisitos mínimos e indispensables se cumplen en los tres tiempos básicos de organización cooperativa:
Las metas colectivas de un sistema político, así como su satisfacción y su evaluación, dependen en mayor o menor medida, de factores no estatales. Aun en un Estado democratizado (demo-representativo), no obstante gozar el gobierno de legitimidad popular, sus objetivos, sus medios y sus resultados dependen de la influencia de grupos de presión extraestatales. En una sociedad ampliamente cooperativizada, la clase de metas colectivas, las técnicas para su logro y la evaluación de sus resultados serán muy diferentes a los de cualquier otra sociedad, pues las demandas sociales a las que responda el sistema político provendrán de organizaciones también democráticas en su organización y sus fines.
El municipalismo, como condición previa o simultanea de la cooperativizacion, permite no solo la descentralización en la persecución de las metas politicas, sino, también, la diversificación de estas dentro de un marco contractual de coexistencia humana. Esto significa que las numerosas demandas sociales que compiten por transformarse en metas politicas ya no tendrán que pujar por llegar a un único y alejado centro procesador (el gobierno del Estado), sino que existirán varios y cercanos centros de procesamiento de demandas (los municipios).
*Este modelo de política democratista, solo pretende brindar alguna idea de las posibilidades de profundización de la Democraciaà Municipalizar el Estado y cooperativizar los municipios.
Introducción a la teoría democrática. La democracia en la teoría de las formas de gobierno. El Contrato Social de Rousseau
La palabra democracia, presenta el habitual inconveniente en el ámbito de la política de no tener un significado univoco y aceptado. La polémica en torno a su valoración positiva o negativa no deja de aparecer.
Para Platón, democracia es sinónimo de arbitrariedad de las mayorías, de desorden social y de decadencia política. En la concepción platónica los únicos aptos para gobernar eran los filósofos.
Aristóteles (discípulo de Platón), la forma mala del gobierno de muchos es la democracia, y la forma buena es la “Politeia”, donde debe prevalecer la clase media, ya que la preponderancia de esta clase evita los excesos que conducen a la oligarquía (facción de los ricos) y la democracia (facción de los pobres).
Para los antiguos, democracia significaba no solo gobierno de mayorías, sino también gobierno de los pobres; gobierno arbitrario de los pobres frente a los ricos.
En el s.II a.C., Polibio emplea la palabra “democracia” en un sentido positivo: a la forma buena del gobierno de muchos la llama “democracia”, y a la forma mala la denomina “oclocracia”.
El concepto “democracia” (exceptuando de algún modo a Polibio), conservan una connotación negativa durante toda la Antigüedad, el Medioevo y gran parte de la Modernidad.
Es Rousseau, en el s.XVIII, el primero en tematizar y apologizar la democracia.
-Síntesis de los conceptos fundamentales de la democracia rousseauniana:
En el Discurso sobre el origen de la desigualdad entre los hombres, Rousseau plantea la hipótesis de un hombre presocial inocente que vive en un estado idílico de igualdad, paz y libertad; que posee dos instintos: el de conservación y el de piedad hacia sus semejantes. En determinado momento, sin explicarse muy bien por qué, el hombre va entrando en la “civilización”, y, con ella, en la desigualdad, la injusticia y los conflictos. Esta “caída” comienza con la institución de la propiedad privada, a partir de la cual surge la primera desigualdad: la que hay entre ricos y pobres.
En el Contrato Social, Rousseau intenta explorar la posibilidad de recuperar algo de aquella igualdad social originaria perdida àel Contrato social pretende ser una respuesta política al problema planteado en el Discurso, al problema de la desigualdad que sobrevino a la “caída” en la civilización.
El punto de partida del Contrato Social es el consenso como único criterio legitimador del gobierno y del derecho. La fuerza no crea ni puede crear derechos, cuando uno obedece bajo amenaza de fuerza lo hace por mera prudencia o conveniencia, pero no por convicción en la legitimidad. Esto explica dos datos importantes del pensamiento rousseauniano: a) que no existan en su sistema formas malas o corruptas de gobierno y b) que todas las formas de gobierno que él trata sean formas democráticas.
Para Rousseau, la facultad legislativa, es decir, el establecimiento del derecho no puede ser ejercida mas que por el pueblo de forma directa, reunía en asamblea. El cumplimiento y la ejecución de esos mandatos legislativos si puede recaer en una persona (monarquía), en pocas (aristocracia) o en muchas (democracia). A cualquiera de estas formas, hoy por hoy, no dudaríamos en llamarla democrática.
El punto de apoyo fundamental de la teoría política rousseauniana es el concepto de “voluntad general”, que, en nuestra consideración, la voluntad general viene a expresar la igualdad primitiva perdida. Es una voluntad que no se crea, sino que se descubre en el interior de cada uno, pero mediante la discusión con los otros. La voluntad general, es la voluntad de los hombres en tanto iguales entre sí. Es mas bien definida por su objeto que por su sujeto: es mas importante que se aplique a todos que el hecho de que provenga de todos.
Rousseau no admite mas soberanía que la de las leyes. La ley es la única vía por la que puede expresarse la voluntad general. Esta ley tiene dos características: a) debe ser votada por la mayoría y b) debe ser aplicable a todos por igual.
Sin embargo, esta ley, por ser universal, requiere de un instrumento que vele por su cumplimiento y su ejecución; este instrumento es el gobierno, el cual tiene como función hacer cumplirla ley, es decir, la voluntad general, expresada únicamente por el pueblo reunido en asamblea legislativa; los actos del gobierno no son leyes, son decretos.
Esquema del cuerpo político en Rousseau:
Pueblo (soberano) |
Gobierno |
Pueblo (súbdito) |
Legisla |
Decreta |
Es libre porque se obedece a si mismo |
Ahora puede verse mejor por qué Rousseau es un pesador anti-Estado. De sus doctrinas se desprende claramente su oposición a cualquier forma de mediación política y, en particular, a la representación de la voluntad general. La democracia rousseauniana no puede ser vista como una forma de gobierno del Estado, sino que debe ser entendida como una forma de organización política no estatal donde la sociedad reasume libre y consensuadamente su autogobierno directo.
Viernes 26/04: Teoría del poder: formas de influencia. Poder y Derecho: efectividad y legitimidad.
Teoría del poder: formas de influencia
Conviene trazar una distinción entre “poder” e “influencia”.
“La influencia es una relación entre actores donde las necesidades, deseos, preferencias o intenciones de uno o mas actores afectan los actos o la predisposición para actuar de otro u otros”à influencia es la capacidad de uno para imponer su voluntad a otro.
Por “poder” podemos entender cierta organización, sistematización y objetivación de influencias.
La influencia se refiere a una capacidad subjetiva, evidenciada en relaciones entre los individuos; mientras que el poder consiste en un conjunto objetivado de influencias; conjunto sistema que reviste cierta organización, impersonalidad y permanencia. El poder no puede constituir una característica o capacidad individual de una persona (una persona puede tener influencia, pero no poder); el poder es una característica del régimen de dominación politica.
Las formas de influencia son 3: a) amenazas, b) contraprestaciones y c) argumentos.
Las amenazas y las contraprestaciones tienen en común su carácter manifiesto. La diferencia entre ambas es la que existe entre el castigo y el premio.
-La amenaza: implica para el influenciado “algo que es lo bastante penoso, física o emocionalmente, de tal modo que renuncia a buscar su propia voluntad con objeto de evitarlo”. La amenaza puede consistir no solo en la violencia física, sino también, en una multa, perdida de un empleo, un reproche verbal o moral, etc.
-La contraprestación: “ofrece al individuo una recompensa o pago lo suficientemente ventajoso para que el o ella renuncie a perseguir su propia preferencia a cambio de la recompensa.
-La argumentación: esta forma no es tan visible, porque el influenciado acepta libremente la voluntad del influenciante. Este, mediante recursos retóricos y argumentativos, convence a aquel acerca de la conveniencia o inconveniencia de determinadas creencias, actitudes y comportamientos. à” acción comunicativa”
Estas tres formas de influencia dan origen a tres tipos de poder correlativos:
*Con estos elementos teóricos es posible construir un “continuum” cuyos extremos sean la situación de guerra social, por un lado, y la situación de armonía social perfecta, por el otro. En ninguno de los dos casos existe política propiamente dicha, pues ya vimos que para que tal cosa exista es preciso tanto la presencia de conflictos como la economización de la violencia en su solución; para que haya política es necesario moverse en la zona intermedia de ese “continuum”, en las zonas grises entre ambos polos ideales.
El poder autoritario (fundado en la amenaza como técnica de influencia) es un primer paso alejado de la guerra social. Por ello constituye una forma de poder políticoà no es igual motivar la conducta de la gente a los garrotazos que con la amenaza de garrotazos.
En un segundo escalón del” continuum” se ubica el poder poliárquico. El poder político poliárquico determina la conducta de la gente mediante la libre oferta de premios y contraprestaciones de unos a otros.
El poder democrático es la forma de poder político que mas se aproxima al polo ideal de una sociedad perfectamente armónica. Los conflictos se abordan con argumentos. El ciudadano de estos regímenes orienta su conducta (influye y se deja influenciar) por el recurso a la persuasión discursiva; su participación política se expresa a través del “voto de opinión”.
Teníamos dos extremos polares del “continuum”: la guerra social y la armonía perfecta, de los cuales ninguno es un estadio político. En el primero hay conflicto, pero no hay paz; en el segundo hay paz, pero no hay conflicto. En medio de esos extremos encontramos los tres estadios políticos en el siguiente orden: poder autoritario, poder poliárquico y poder democrático. Los limites entre los cinco estadios no son tan claros como pareciera, existen “islas”, donde se refugian los demás estadios, incluso los no políticos (la guerra social y la armonía).
Poder y Derecho: efectividad y legitimidad.
Por un lado, el derecho es un sitema objetivado de valores morales e inereses materiales, y, por otro lado, que el poder politico es un sistema objetivado de influencias. El derecho se apoya en, y por ende se correlaciona con una determinada situacion de poder. Tanto la “efectividad” como la “legitimidad” de uno y otro dependen de su interrelacion reciproca.
La legitimidad del poder politico consiste en el grado de consenso y aceptacion que recibe entre los propios afectados. La efectividad del dercho consiste en el grado de su realizacion, vigencia, y eficacia ante los coflictos interpersonales que debe preveer, evitar o resolver. Cuando afirmamos que el dercho y el poder politico se correlacionan, se quiere decir que un conjunto de intereses y valores se objetiva como derecho en la medida en que una determinada situacion de poder politico lo hace efectivo. Y viceversa, un conjunto de influencias se objetiva como poder politico en la medida en que un determinado derecho lo legitima. La relacion derecho-poder, como la relacion legitimidad-efectividad, se comprenden a partir de la relacion generica deber ser/ser .
El ser y el deber ser son, sin dudas, elementos antagonicos que no pueden ser referidos ni uno al otro, ni ambos, a una comun raiz logica, pero que si pueden ser enlazados en el concepto de la ordenacion normativa social. Pues, un deber ser social que, por principio, no guardase relacion alguna con un ser social a que hubiera de dar forma, no seria en puridad un deber ser.
APOLOGÍA DE SÓCRATES
Sócrates no escribió ningún libro. La apología es escrita por Platón y plasma la defensa que hace frente a las acusaciones de la ciudad. En este momento el pensador griego tiene 70 años.
Comienza su exposición señalando que han precavido a los jueces de que él es un muy hábil orador y en contra de ese rumor dice que solo dirá la verdad, que no le interesa emitir frases bellas sino lo justo. Una de las acusaciones es de ateísmo, el no creer en los dioses:
"a muchos de ustedes desde niños los persuadían y me acusaban mentirosamente, diciendo que hay un cierto Sócrates, sabio, que se ocupa de las cosas celestes, que investiga todo lo que hay bajo la tierra y que hace mas fuerte el argumento mas débil, Estos, atenienses, los que han extendido esta [mala] fama, son los temibles acusadores míos, pues los oyentes consideran que los que investigan eso no creen en los dioses" (Págs. 149-150)
Los que Sócrates llama "primeros acusadores", que lo acusaban en ausencia sin el defensor presente, extendían entre niños y jóvenes esta mala fama. Quienes ahora lo acusan se han criado bajo estos rumores y prejuicios; él se lamenta porque el tiempo de su defensa es muy poco para revertir la mala imagen que se tiene sobre él y que fue construida lo largo de años. Él distingue a estos primeros acusadores de la acusación jurídica que se le hace, la acusación es la siguiente:
"Sócrates comete delito y se mete en lo que no debe al investigar las cosas subterráneas y celestes, al hacer el argumento mas fuerte el argumento mas débil y al enseñar estas mismas cosas a otros"
Sócrates repara en que él no cobra por sus enseñanzas, a diferencia de los sofistas, y que su mala fama se debe a que tenía una cierta sabiduría, pero que no era la propia de los sofistas. Él cuenta que Querofonte fue al oráculo de Delfos a preguntar si había hombre mas sabio que Sócrates. La Pitia le contestó de que no había nadie mas sabio.
Sócrates explica su mala fama de la siguiente manera: él tiene conciencia de que no es sabio, ni poco ni mucho, se siente extrañado ante la palabra del oráculo y comienza a conversar con todas las personas que parecían mas sabias que él. En cada charla le hacía preguntas a esa persona que creía ser sabia y descubría que no lo era:
"me pareció que otras muchas personas creían que ese hombre era sabio y, especialmente, lo creía él mismo, pero que no lo era. A continuación de ello, me gané la enemistad de él y de muchos de los presentes. Al retirarme de allí razonaba a solas que yo era mas sabio que aquel hombre. Es probable que ni uno ni otro sepamos nada que tenga valor, pero este hombre cree saber algo y no lo sabe, en cambio yo, así como, en efecto, no sé, tampoco creo saber. Parece, pues, que al menos soy mas sabio que él en esta misma pequeñez, en que lo que no sé tampoco creo saberlo. A continuación, me encaminé hacia otro de los que parecía ser mas sabios que aquel y saqué la misma impresión, y también allí me gané de enemistad de él y de muchos de los presentes" (Pág. 155)
Habló con políticos, poetas y artesanos con el mismo resultado: los que creían saber no sabían, eran ignorantes. Y eran ignorantes de esta ignorancia. En todo esto era acompañado por los jóvenes hijos de los ricos que se divertían viendo a Sócrates examinar a otros; esa gente examinada se enoja con Sócrates y lo acusan de ser malvado y corromper a la juventud. Como son muchos, apasionados y susceptibles y hablan de forma persuasiva y apasionada en contra de Sócrates, y llenaron los oídos de las personas con violentas calumnias por mucho tiempo.
Sócrates entabla una conversación con su acusador Meleto para desmentir las acusaciones de impiedad y de corromper a los jóvenes, acusaciones que considera sin sustento y contradictorias. El pensador griego procede a justificar su forma de vida:
"Quizás alguien diga: -¿No te da vergüenza, Sócrates, haberte dedicado a una ocupación tal por la que ahora corres peligro de morir?
A este yo, a mi vez, le diría unas palabras justas:-No tienes razón, amigo, si crees que un hombre que sea de algún provecho ha de tener en cuenta el riesgo de vivir o morir, sino el examinar solamente, al obrar, si hace cosas justas o injustas y actos propios de un hombre bueno o de un hombre malo (...) En el puesto en el que uno se coloca porque considera que es el mejor, o en el que es colocado por un superior, allí debe, según creo, permanecer y arriesgarse sin tener en cuenta ni la muerte ni cosa alguna, mas que la deshonra (...) obraría indignamente (...) Al ordenarme el dios, según he creído y aceptado, que debe vivir filosofando y examinándome a mi mismo y a los demás, abandonara mi puesto por temor a la muerte o a cualquier otra cosa"(Pág. 165-7)
Sócrates recalca de que si lo dejaran libre a condición de que no gaste mas tiempo en la búsqueda de la verdad y que deje de filosofar (bajo amenaza de que si lo volviera a hacer lo matarían), diría:
"Yo, atenienses, los aprecio y quiero, pero voy a obedecer al dios más que a ustedes y, mientras aliente y sea capaz, es seguro que no dejaré de filosofar, de exhortarlos y de hacer manifestaciones al de ustedes que vaya encontrando, diciéndole lo que acostumbro:
-Mi buen amigo, siendo atenienses, de la ciudad más grande y más prestigiada en sabiduría y poder, ¿no te avergüenzas de preocuparte de cómo tendrás las mayores riquezas y la mayor fama y los mayores honores, y, en cambio, no te preocupas ni interesas por la inteligencia, la verdad y por cómo tu alma va a ser lo mejor posible?
Yo si alguno de ustedes discute y dice que se preocupa, no pienso dejarlo al momento y marcharme, sino que le voy a interrogar, a examinar y a refutar, y, si me parece que no ha adquirido la virtud y dice que si, le reprocharé que tiene en menos lo digno de más y tiene en mucho lo que vale poco. Haré esto con el que me encuentre, joven o viejo, forastero o ciudadano" (Pág. 168)
Concluye que le hace un bien a la ciudad, que su muerte dañaría más a la ciudad que a él mismo, que su función es la del tábano:
un caballo grande y noble, pero algo lento por su tamaño necesita ser aguijoneado por una especie de tábano. El tábano es una especie de mosca grande cuyas hembras producen picaduras dolorosas. De la misma manera que un tábano, el trabajo de Sócrates en la ciudad es la de despertar, persuadir y reprochar uno por uno durante todo el día. Este trabajo lo hace sin cobrar salario, descuidando sus propios bienes, cuya demostración más visible es su pobreza. Él dice que puede parecer raro que descuide todos sus asuntos en favor de la ciudad y nos cuenta que siempre está acompañado por el daimon, que tiene rasgos divinos. Ese daimon lo acompaña desde niño y toma la forma de voz y siempre que se manifiesta lo disuade de lo que va a hacer.
Nota: el daimon podría ser considerado lo que en la actualidad llamamos "voz de la conciencia"
El daimon le exigió que su labor sea dentro del ámbito privado y no el ámbito público (el de la política):"no hay hombre que pueda conservar la vida, si se opone noblemente a ustedes o a cualquier otro pueblo y si trata de impedir que sucedan en la ciudad muchas cosas injustas e ilegales; por el contrario, es necesario que el que, en realidad, lucha por la justicia, si pretende vivir un poco de tiempo, actué privada y no públicamente" (Pág. 171)
Y con determinación de hierro afirma: "no cedería ante nada contra lo justo por temor a la muerte, y no ceder, al punto de estar dispuesto a morir" (Pág. 171)
Sócrates describe sus acciones públicas:
"si alguna vez he realizado alguna acción publica, no he mostrado de esta condición, y también privadamente, sin transigir en nada con nadie contra la justicia ni tampoco ninguno de los que, creando falsa imagen de mí, dicen que son discípulos míos. Yo no he sido jamás maestro de nadie. Si cuando ya estaba hablando y me ocupaba de mis cosas, alguien, joven o viejo, deseaba escucharme, jamás se lo impedí a nadie. Tampoco dialogo cuando recibo dinero y dejo de dialogar si no lo recibo, antes bien me ofrezco, para que me pregunten, tanto al rico como al pobre, y lo mismo si alguien prefiere responder y escuchar mis preguntas" (Pág. 176)
A los jóvenes les gusta pasar tiempo a su lado porque les gusta oír examinar a los que creen ser sabios y no lo son.
A diferencia de otros, Sócrates en su defensa no llevó amigos, familiares e hijos para pedir compasión. No lo hace porque le parece un comportamiento vergonzoso y porque "tampoco me parece justo suplicar a los jueces y quedar absuelto por haber suplicado, sino que lo justo es informarle y persuadirlos" (Pág. 176)
Luego de estas palabras se realiza una votación en la cual Sócrates es condenado. Meleto propone la pena de muerte, Sócrates podía realizar una propuesta alternativa para que luego el jurado eligiera una de las dos.
Inicia su propuesta mencionando los servicios que brindó a la ciudad, sus esfuerzos para lograr el mayor bien con quienes hablaba, de intentar convencer a cada uno de que se preocupara por ser mejor y lo más sensato posible antes que encargarse de otros asuntos.
La propuesta alternativa que Sócrates sugiere por su tarea es que merecería ser alimentado permanentemente en el Pritaneo. En el Pritaneo comían las personas a las cuales la ciudad juzgaba como benefactores, siendo un honor muy estimado. Señala que, aunque pareciera hablar desde la arrogancia, él considera que no hizo ningún mal voluntario a nadie, pero dada su mala fama y el poco tiempo que tiene disponible para exponer su postura es imposible convencer de lo contrario para liberarse de las calumnias. No propone ni una multa, ni la cárcel, ni el destierro ya que considera que no realizó ningún daño y por eso no merece ningún castigo. También rechaza una vida de silencio, porque hacer eso sería desobedecer al daimon, al dios, es necesario tanto el examen de uno mismo como el examen a los otros ya que "una vida sin examen no tiene objeto vivirla" (Pág. 180)
Luego de estas palabras se vuelve a realizar una nueva votación donde 80 personas cambian de opinión y dan el voto adverso. El juicio ha terminado: Sócrates es condenado a la muerte, condenado a beber cicuta. Él termina diciendo que la ciudad con esta condena a un sabio se condena a la culpa y a la mala fama; a pesar de todo "prefiero con mucho morir habiéndome defendido de este modo, a vivir habiéndolo hecho de otro modo"
"Hay muchos medios, en cada ocasión de peligro, de evitar la muerte, si se tiene la osadía de hacer y decir cualquier cosa. Pero no es difícil, atenienses, evitar la muerte, es mucho más difícil evitar la maldad; en efecto, corre más deprisa que la muerte. Ahora yo, como soy lento y viejo, he sido alcanzado por la más lenta de las dos. En cambio, mis acusadores, como son temibles y ágiles, han sido alcanzadas por la más rápida, la maldad. Ahora yo voy a salir de aquí condenado a muerte por ustedes, y estos, condenados por la verdad, culpables de perversidad e injusticia"(Pág. 182)
Brinda unas palabras a quienes votaron a favor de él, les comenta que el daimon, el dios, en ningún momento se ha opuesto a ninguna palabra ni ningún acto; Sócrates piensa que "es probable que esto que me ha sucedido sea en bien, pero no es posible que lo comprendamos rectamente los que creemos que la muerte es un mal" (Pág. 183)
Reflexiona sobre la muerte concluyendo de que tiene que ser una de estas dos cosas: o bien la muerte es nada o bien es una transformación, un cambio de morada para el alma.
Si es un cambio de morada y va a parar al Hades [ver Vocabulario], estaría rodeado de grandes hombres a los cuales examinaría e investigaría para ver quién de ellos es sabio y quien cree serlo y no lo es. Eso para Sócrates sería el colmo de la felicidad.
Para finalizar, les deja como misión que examinen constantemente a los ciudadanos para lograr desarrollar la virtud en ellos, hacerlos mejores. Les deja como misión continuar su misión.
Critón
Sócrates, estando en prisión, espera la ejecución de su sentencia, cuando recibe la visita de Critón, su mejor amigo, quien lo instiga a evadirse.
Critón, le pide a Sócrates que le hago caso ahora y se salve, porque a más de perder un amigo, mucho que no lo conocen bien, ni a Critón ni a Platón, creerán que habiendo podido salvarlo, no quiso desenvolver dinero, no quiso ayudarlo.
Critón teme de la opinión general, de lo que dirán si no intenta salvar a su amigo. El teme ahora, que es preciso cuidarse de la opinión de la gente, dado que las actuales circunstancias muestran por si como la gente puede hacer, no ya males pequeños, sino los mayores males, si alguien ha sido calumniado ante ella.
Sócrates le responde que no debe temer al vulgo, pues quienes obran al azar, no pueden obra la prudencia o la imprudencia (liga al conocimiento con la virtud: la rectitud de los actos deriva de la idea del bien). Solo hay que atender las opiniones del entendido en la materia. No obedecerlas implica perjuicios.
Critón le dice a Sócrates, que no esté preocupado por el ni por los otros amigos, temiendo que si huye de prisión, los sicofantes los acosen por haberlo sacado en secreto, y por esa causa, tener que entregar todo su fortuna, o sufrir todavía alguna otra pena.
Critón insiste con que debe escapar de la prisión y así salvar su vida.
El argumento por el cual Sócrates, responde a Critón porque debe atenerse a la condena que le impusiera la ciudad de Atenas, radica en el hecho de que lo justo, lo pactado, debe cumplirse inexorablemente. Durante toda su vida, Sócrates vivió sujeto a las leyes de Atenas, a las que consideraba justas y con las que se comprometió, prefiriéndolas por sobre las demás y sintiéndose orgulloso de su ciudadanía, como todo ateniense. Si se fugara, estaría conculcando los compromisos contraídos con ellas, con las cuales no se comprometió forzado, ni urgido a tomar una decisión en poco tiempo, sino en 70 años. No es justo, pues, que por las circunstancias actuales se deba incumplir la ley. El hombre de bien nunca debe obrar voluntariamente el mal, ni burlar lo convenido justamente.
Para Sócrates, lo que más importa no es vivir, sino vivir bien; que el vivir bien sea lo mismo que el vivir noblemente y el vivir justamente.
Si para Sócrates, el tener que salvar su vida, implicaría tener que pagar un alto precio, es decir “su propio destierro”, esto conllevaría que no podría continuar, en ningún caso filosofando (es decir; que para predicar hay que predicar con el ejemplo).
Para el griego, las leyes son lo justo, de carácter general (válida para todos sin excepción) y casi sagradas. Si son respetadas, otorgan el carácter de ciudadano ateniense (la patria es aquello a lo que nos resulta valioso pertenecer).
Si las leyes se acomodaran a las necesidades de los particulares, no servirían, dejarían de ser justas. Si no son cumplidas por todos, pierden su fuerza, dejan de ser ley, por lo tanto, el Estado, que se apoya en ellas, deja de existir.
Sobre la Libertad, Mill
El objeto del ensayo como recalca nada más empezar es tratar los límites del poder que puede ejercer legítimamente la sociedad sobre el individuo.
En un principio, el Gobierno de una población estaba dirigido por un hombre que concentraba todo el poder. Además este no se discutía la creerse necesario para defenderse contra sus adversarios. Sin embargo, también podría usarse contra sus propios súbditos. Fue en ese momento cuando los hombres cesaron de considerar como una necesidad natural que sus gobernantes fuesen un poder independiente. En consecuencia se creyó que sus gobernantes deberían ser revocados y elegidos en función del pueblo y así el poder no podría ser usado contra ellos al mismo tiempo que conseguían que alguien gobernara. Por otro lado, también se puede dar la ocasión en el que el tirano no es el gobernante, sino la sociedad. Por lo que se necesita protección contra la opinión y sentimientos prevaleciente así como la tendencia dela sociedad de imponer sus propias ideas menospreciando la de los demás.
Además el propósito del ensayo es también afirmar que el único fin por el cual es justificable que la humanidad, individual o colectivamente, se entremeta en la libertad de acción de uno cualquiera de sus miembros es la propia protección. Detallando que sobre sí mismo, sobre su propio espíritu, el individuo es soberano.
Comienza este segundo capítulo con la anotación de que las épocas de represión sobre la prensa ya han terminado, y no es necesario defender la libertad de expresión con tanto ánimo. Pese a las persecuciones que hubo por el gobierno en 1858, justo después de escribir este ensayo, se detalla que no se siente Stuart Mill arrepentido de haberlo escrito y que las persecuciones no fueron persistentes. Además, nuca podemos estar seguros de que la opinión que tratamos de ahogar sea falsa, y si lo estuviéramos, el ahogarlos constituiría un mal también.
Por otro lado, si el hombre nuca actuara según su opinión porque esta pudiera ser errónea, abandonaríamos nuestros intereses. Por ello es deber del Gobierno así como del individuo formar las opiniones más verdaderas que puedan, Además se defiende que ninguna opinión, ni ningún hombre es falible, ni siquiera la creencia en Dios. Por lo tanto no se puede poner por ley aquellas creencias que no sean justificadas por los hombres, sin importar los antecedentes. Para explicar se expone el ejemplo de Sócrates, condenado por no creer en dios alguno, con la muerte por sus conciudadanos y reconocido por el Estado. Este mismo suceso ocurre a lo largo de la historia en donde la intolerancia religiosa es demasiado notable para no hacer mención de él.
En consecuencia, se defiende que la libertad de pensar no sólo es necesaria para la formación de grandes pensadores, sino indispensable para el promedio de los hombres para alcanzar un mayor nivel intelectual.
Es por ello que las doctrinas deben ser discutidas, y concretamente las religiosas y la cristiana deben llevarse a revisión. Pese a poder contener conceptos éticos y morales positivos para la sociedad se defiende que tan solo representan un parte de la realidad y aunque exista una porción de la población que lo haga no es necesario aplicar estas doctrinas divinas en todo momento, así como en la educación. Finalmente reconoce que la tendencia de todas las opiniones a hacerse sectarias no se cura por la más libre discusión y es por tanto cuando la verdad aparece si las gentes se ven forzadas a escuchar dos versiones y no solo una.
La libertad del individuo es indispensable, sin embargo, nadie pretende que las acciones sean tan libres como las opiniones. Hasta las opiniones pierden su inmunidad cuando las circunstancias en las cuales son expresadas hacen de esta expresión una instigación positiva a alguna acción perjudicial. Debido a este, la libertad no debe convertirse en un perjuicio para los demás. Por otra parte, la diversidad de opiniones no es un mal, sino un bien de igual modo que es útil en tanto la humanidad sea imperfecta.
Además, se recalca la importancia de dichas diferencias combinando la individualidad de poder y el desenvolvimiento en originalidad según la doctrina de Wilhelm Humboldt.
Cuando una persona acepta una determinada opinión, sin que sus fundamentos aparezcan en forma concluyente a su propia razón, esta razón no puede fortalecerse, sino que probablemente se debilitará; y si los motivos de un acto no están conformes con sus propios sentimientos o su carácter, se habrá ganado mucho para hacer sus sentimientos y carácter inertes y torpes, en vez de activos y enérgicos. El que escoge por sí mismo su plan emplea todas sus facultades. Realmente no sólo es importante lo que los hombres hacen, sino también la clase de hombres que lo hacen.
Stuart Mill determina además que no obra mal los hombres porque sus deseos sean fuertes, sino porque sus conciencias son débiles. Exponiendo además que en las sociedades primitivas el elemento de espontaneidad e individualidad dominó excesiva por lo que era necesario dominar los impulsos (al puro estilo estoico). Sin embargo, en la actualidad, la sociedad absorbe lo mejor de la individualidad; y el peligro que amenaza a la naturaleza humana no es el exceso, sino la falta de impulsos y preferencias personales. La humanidad se pregunta ¿qué es lo más conveniente para mi posición? En vez de ¿qué prefiero yo? Así el mismo espíritu se doblega al yugo; hasta en lo que las gentes hacen por placer, la conformidad es la primera cosa que piensan. No tienen ni ideas ni sentimientos nacidos en ellos o que puedan decidirse propios suyos.
Este hecho es perfecto para la teoría calvinista (contraria a Stuart Mill, pero expuesta en el capítulo), según la cual el mayor defecto del hombre es tener una voluntad propia, teniendo que someterse a la voluntad de Dios.
Existe actualmente (en el siglo XIX) una fuerte tendencia a favor de esta estrecha teoría de la vida y hacia este tipo inflexible y mezquino de carácter humano que patrocina.
No es vistiendo uniformemente todo lo que es individual en los seres humanos como se hace de ellos un noble y hermoso objeto de contemplación, sino cultivándolo y haciéndole resaltar, dentro de los límites. El desenvolvimiento de la individualidad provoca un mayor valor para cada persona y un mayor valor para los demás. La individualidad vale tanto como desenvolvimiento, es sólo el cultivo de la individualidad lo que produce o puede producir, seres humanos bien desarrollados.
Por otro lado, el genio sólo puede alentar libremente en una atmósfera de libertad. Los hombres de genio son ex vi termini, más individuales que los demás, menos capaces de adaptarse. Si es por timidez, son forzados en los moldes de la sociedad y si es por su fuerte carácte3r son tachados de turbulentos y extravagantes.
La gente considera al genio como una cosa hermosa, pero casi todos en el fondo piensan que pueden pasarse muy bien sin él. La originalidad es la única cosa cuya utilidad no pueden comprender los espíritus vulgares.
Actualmente, los individuos están perdidos en la multitud. En política es casi una trivialidad decir que es la opinión pública la que gobierna el mundo. El único poder que merece tal nombre es el de su mismo nivel, pero esto no hace que el gobierno de la mediocridad deje de ser un gobierno mediocre. Ningún gobierno por una democracia o aristocracia numerosa ha sabido elevarse de la mediocridad, la iniciación debe venir de los individuos.
El mayor peligro de nuestro tiempo se muestra en el escaso número de personas que se deciden a ser excéntricos.
Por otro lado, la grandeza de Inglaterra es colectivo, pero fueron los hombres individuales, héroes, los que hicieron de ella lo que es; mientr4as que la costumbre conlleva a la decadencia. El espíritu del progreso no es siempre un espíritu de libertad. El futuro de Europa se ve como el de China, anclado en un mismo sistema y mismos pensamientos que le han llevado al estancamiento y costumbrismo, con un pueblo igual y uniforme.
Los llamados DEBERES para con nosotros mismos no son socialmente obligatorios, a menos que a la vez sean deberes para con los demás. “deber para consigo mismo” expresa propio respecto y desenvolvimiento; y a nadie puede obligarse a dar cuenta a sus semejantes de ninguna de estas dos cosas, porque no produciría a la humanidad ningún beneficio.
Debe hacerse una DISTINCIÓN entre la parte de la vida de una persona que se refiere a él sólo y la que se refiere a los demás. ¿Cómo puede haber alguna parte de la conducta de un miembro de la sociedad que sea indiferente a los otros miembros? Ninguna persona es un ser enteramente aislado. Si deteriora sus facultades corporales o mentales, causa un mal a todos aquellos cuya felicidad dependía, en parte, de él y se incapacita para prestar los servicios que debe a sus semejantes. ¿Debe la sociedad abandonar a su propia guía a aquellos que son incapaces para ello? Si a los niños menores se les debe abiertamente una protección contra ellos mismos, ¿no está la sociedad también obligada a concedérsela a las personas de edad madura que son igualmente incapaces de gobernarse por sí mismas? Si el juego, la embriaguez, la incontinencia, la ociosidad o la suciedad, son tan perjudiciales para la felicidad y tan grandes obstáculos para el mejoramiento como muchos o los más de los actos prohibidos por la ley, ¿por qué no trata la ley de reprimirlos?
Cuando por una conducta semejante una persona llega a violar una violar una obligación hacia otra u otras personas, el caso deja de ser personal y queda sujeto a la desaprobación moral (Si, por ejemplo, un hombre es incapaz de mantener una familia, será castigado por el incumplimiento de sus deberes, no por la extravagancia).
Siempre que existe un prejuicio o un riesgo definidos de perjuicio, el caso se sustrae al campo de la libertad y entra en el de la moralidad o la ley.
Si se ha de castigar a las personas adultas por no cuidar debidamente de si mismas, preferiría que se hiciera invocando su propio interés que no con el fin de impedir que se incapaciten para hacer a la sociedad beneficios que la sociedad misma no pretende tener derecho a exigirles. Como si la sociedad careciera de otros medios para elevar sus miembros más débiles al nivel ordinario de una conducta racional, sino a esperar a que hagan algo irracional y castigarles entonces.
¿Qué puede hacer el pobre público sino aplicar estas instrucciones y hacer obligatorias para todo el mundo sus propias definiciones del bien y del mal, cuando respecto a ellas se ha logrado una suficiente unanimidad? ¿Quién puede condenar a las gentes por desear la supresión de lo que consideran como un escándalo ante Dios y ante los hombres? Para que una civilización pueda sucumbir ante su enemigo vencido necesita haber llegado a un tal grado de degeneración que ni sus propios sacerdotes y maestros, ni nadie, tengan la capacidad ni quiera tomarse el trabajo de defenderla. Si esto es así, cuanto antes desaparezca esa civilización, mejor.
Tales oposiciones de intereses entre individuos, frecuentemente tienen su origen en instituciones sociales defectuosas, pero son INEVITABLES. Cualquiera que tiene éxito en una profesión o en un concurso, se beneficia con la pérdida de otros.
¿Hasta qué punto la libertad puede ser legítimamente invadida para la prevención del crimen o del accidente? Mi opinión es que se debe tan sólo ser advertido del peligro, sin impedir por la fuerza que se exponga a él.
Una cuestión ulterior es si el Estado, en tanto que tolera una conducta que considera contraria a los más sagrados intereses del agente, debe, no obstante, favorecer indirectamente su abandono; si, por ejemplo, debería hacer más costosos los medios de embriagarse. Es deber del Estado considerar, al establecer impuestos, cuáles son las sustancias de que el consumidor puede prescindir. Por consiguiente, los impuestos sobre los estimulantes son no sólo admisibles, sino convenientes.
Una persona debe ser libre de obrar en sus propios asuntos, pero no debe serlo cuando obra en nombre de otro, con el pretexto de que los asuntos de éste son propios suyos. Es el caso del poder casi despótico de los maridos sobre sus mujeres.
Si desde un principio fuera admitido el deber de imponer una educación universal, se pondría fin a las dificultades sobre lo que el Estado debe enseñar y la manera de enseñarlo. El medio de imponer la ejecución de la ley no puede ser otro que el de examinar a todos los niños DESDE SU INFANCIA.
Deben ponerse límites a la intervención del Gobierno. Son casos en los que las razones contra la intervención no se refieren al principio de la libertad: la cuestión no es si se han de restringir las acciones de los individuos, sino si se ha de ayudarles. Las objeciones a la intervención del Gobierno, cuando no implica violación de la libertad pueden ser:
Creo que el principio práctico por el que todos los arreglos expuestos deben ser juzgados es la mayor dispersión de poder compatible con la eficacia; perlo la mayor centralización posible de información, y su difusión desde el centro.
El valor de un Estado, a la larga, es el valor de los individuos que lo componen. Con hombres pequeños ninguna cosa puede ser realizada.
Pedro Kropotkin- El ESTADO
El Estado, para la visión anarquista, supone la imposibilidad de que la sociedad se base en la cooperación entre iguales; se trata de una institución que trata siempre de someter a la sociedad bajo su tutela y arbitrio. Puede decirse que cuanto mayor poder tenga el Estado, menos tiene la sociedad y viceversa.
Kropotkin considera que el Estado supone la más peligrosa concentración de poder en la sociedad y el mayor enemigo de las clases oprimidas; como es sabido, el autor de El apoyo mutuo se esforzó en poner ciencia y teoría al servicio de la praxis revolucionaria, por lo que no pudo dejar de analizar la génesis y el desarrollo de la institución estatal. En una conferencia, pronunciada en 1897 y publicada dos años más tarde, como ampliación del prólogo realizado en 1892 para el folleto de Bakunin La Comuna y la noción de Estado, llamada El Estado. Su rol histórico, rechaza en primer lugar la identificación que tantos autores han realizado entre sociedad y Estado. Sin embargo, Kropotkin tampoco identifica necesariamente el Estado con el gobierno, ya que aquel supone, no solo la colocación de un poder por encima de la sociedad, también “una concentración territorial y una concentración de muchas funciones de la vida de las sociedades entre las manos de alguno (o hasta de todos)”.
Comprendido esto, se explica por qué Kropotkin gusta de aquellos modelos históricos (la polis griega, la comuna medieval..) en los cuales no estaba eliminado el poder, sino diluido y minimizado gracias a la Asamblea Popular; la existencia de una red de vínculos horizontales, por una parte, en una unidad territorial y la concertación de lazos federativos, por la otra. El paradigma del Estado procede para Kropotkin de la antigua Roma, ya que de ella procedía todo: la vida económica, el ejército, las relaciones judiciales, los magistrados, los gobernadores, los dioses… Todo el imperio reproducía en cada región la centralización procedente del Senado y, posteriormente, el poder omnipotente del César.
Puede decirse que para la concepción histórica de Kropotkin, la historia de la humanidad se divide en dos opciones: la imperialista o romana y la federalista o libertaria. Sin embargo, para comprender la naturaleza y evolución del Estado, es preciso abordar en primer lugar el gran problema del origen de la sociedad humana. Kropotkin no dejaba de reconocer que la teoría del contrato social había servido como importante arma para acabar con la monarquía de derecho divino; a pesar de ello, rechazó todo idea contractualista. Frente a todo estado humano previo a la sociedad, Kropotkin recoge la herencia aristotélica al considerar al hombre un “animal social” y a la sociedad humana como una realidad primaria, no como un derivado de una asociación basada en una supuesta asociación libre.
El hombre, al igual que la mayoría de los animales, ha vivido siempre en sociedad, tal y como Kropotkin trata de demostrar en El apoyo mutuo; el desarrollo del intelecto se habría producido en las especies más sociables. El hombre no ha creado la sociedad, sino que nace ya en ella; el punto de partida de la sociedad sería el clan y la tribu en los primitivos, de los cuales se habría hecho un conveniente retrato de pueblos feroces y sanguinarios, pero el estudio de su vida comunitaria demuestra lo contrario. Kropotkin observa en aquellas sociedades primitivas una emergente moralidad tribal y una serie de instituciones; aunque existían directores y guías, tales como el hechicero o el experto en las tradiciones de la tribu, tales cargos eran solo temporales y no permanentes, ya que habrían sido creados para una tarea muy concreta. Tal y como recogerán antropógos posteriores a Kropotkin, así como los estudios contemporáneos de Pierre Clastres, en aquellas sociedades no existía alianza entre el hechicero y el jefe militar, por lo que no había entonces una forma de Estado.
Los bárbaros que invadieron Europa, a comienzos de nuestra era, desde el norte y el este, mezclados a la vez entre sí, acababan de salir de esa fase primitiva que duró milenios. Aquellos pueblos que inundaron Europa, empujándose unos a otros y mezclándose recíprocamente, perdieron su conciencia como tribus primitivas y sus lazos antiguos para ver nacer nuevos vínculos basados en la posesión comunal de la tierra, dentro de un territorio sobre el cual una determinada aglomeración acabó por fijarse. Así, nace la comuna, en la que el cultivo se realiza en común, aunque el consumo se realizaba ya por familias; era un órgano soberano en el que la costumbre hacía las veces de ley y la asamblea suponía la única corte de justicia.
Para Kropotkin, por encima del derecho romano, las instituciones que ofrecen garantías a los derechos del individuo proceden de ese derecho consuetudinario de los bárbaros. Las comunas respondían a la mayor parte de las necesidades del ser social, por lo que surgieron dentro y fuera de ellas múltiples asociaciones de apoyo mutuo, las guildas, las cuales se confederaron de forma paralela a las propias comunas. Sin embargo, al asentarse y establecerse las tribus en el territorio del imperio romano, se constituyeron comunidades de agricultores y pastores, los cuales empezaron a delegar la defensa de sus tierras y de sus personas en ciertos individuos, a los cuales podemos llamar guerreros profesionales, rodeados de una pequeña banda de aventureros o bandoleros. Aquellos defensores comenzaron a acumular riqueza, ofrecieron regalos a los que quisieran seguirlos y se echaron así las bases de un poder militar.
Kropotkin denuncia que la mayor parte de la historiografía se empeña en hacer remontar a Roma todas las instituciones, ignorando o pasando por alto la revolución comunalista del siglo XII. Se produce así la negación de la vida social debido al derecho romano, basado en la centralización, en el patriarcado y en la propiedad privada; para Kropotkin, romanos y bizantinos son mucho más bárbaros que los que se ha considerado pueblos bárbaros, en los cuales se dio en gran medida un sistema basado en el apoyo mutuo, en el trabajo colectivo y en la propiedad común de la tierra. Tal y como se expresa en El apoyo mutuo, el municipio o ciudad medieval tiene su origen, por una parte, en una asociación de comunas rurales y, por otra, en una red de guildas y confraternidades. Las ciudades libres, entonces, estuvieron formados por vastas confederaciones de, a su vez, federaciones de comunas.
En ocasiones, este proceso federal y confederal se produce por un desarrollo natural de la vida, pero en otras es una auténtica revolución contra el señor feudal, el obispo o el reyezuelo; el movimiento se extenderá por Europa en el tiempo de un siglo. Aunque presentaron, como es lógico, rasgos diferentes según la zona, lo que las caracterizaba es una unidad basada en la libertad frente a toda imposición realizada desde arriba (en su versión moderna, sometimiento a ley o autoridad). Es curiosa esta visión de Kropotkin sobre el medievo, opuesta en gran medida a la de la Ilustración, aunque no negara la realidad del feudalismo y de la servidumbre; esas ciudades libres, formadas por federaciones de barrio y de gremio, y confederadas a su vez con otras, es la forma no estatal por antonomasia muy próxima al ideal del comunismo libertario que desarrollará Kropotkin. Aunque este autor confiará en el progreso, en la ciencia y en el desarrollo tecnológico, pondrá de relieve la creatividad del artesano medieval, la belleza y perfección de sus obras, así como el gozo estético que producen en el productor y en el consumidor, frente la mecanización alienante, la inmediatez y la precipitación que gobiernan el trabajo de los modernos obreros de la industria. Incluso, los conflictos que se produjeron en las ciudades medievales, al producirse entre iguales los interpreta Kropotkin como un esfuerzo de innovación y progreso frente a unas guerras entre Estados que tienen como objeto anular libertades, someter al individuo y acabar con la libre iniciativa.
Es en el siglo XVI, cuando los modernos bárbaros, los auténticos para Kropotkin, comienzan a destruir la civilización del medievo: sujetan al individuo eliminando sus libertades, le obligan a olvidar las uniones basadas en la libre iniciativa y en la libre inteligencia, y se ponen como objetivo nivelar la sociedad entera en una misma sumisión ante un dueño (Estado y/o Iglesia). Para Kropotkin, los modernos bárbaros son los que dan lugar al Estado: la triple alianza del jefe militar, el juez romano y el sacerdote. El inicio de la moderna nación/Estado está en la incapacidad de las ciudades libres para liberar a los campesinos del feudalismo, así como el fin de las polis griegas tiene su origen en la persistencia de la esclavitud. En el siglo XII, los futuros reyes no eran más que jefes de pequeños grupos de bandoleros y vagabundos, los cuales se acabarían imponiendo con habilidad y usando la fuerza y el dinero; recibieron el apoyo de una Iglesia, siempre amante del poder.
En el siglo XVI, y salvo algunas resistencias en las que Kropotkin sigue viendo la lucha de clases y el afán de una sociedad libre y comunista (el hussismo en Bohemia y el anabaptismo en Alemania), el europeo que unos siglos antes era libre, federalista y no buscaba remedios en la autoridad se convierte en todo lo contrario bajo la doble influencia del legista romano y del canonista. Así nace la institución estatal para Kropotkin, en oposición a la historiografía liberal y universitaria, la cual presenta el Estado moderno como una obra del espíritu unificadora de lo disperso y conciliadora de los antagonismos existentes en la sociedad medieval. Por el contrario, para Kropotkin, se acaba con una servidumbre para reconstituirla nuevamente bajo múltiples formas nuevas, así como se inaugura una igualdad que solo quiera la sumisión al Estado; en el siglo XVIII, al menos la mitad de las tierras comunales pasarán al clero y la nobleza para un siglo después consumarse la propiedad en manos privadas.
Como es sabido, Kropotkin y los anarquistas denunciarán que esta evolución estatista, así como la educación que preconiza, ha llevado a que incluso los que se denominan socialistas y revolucionarios vean en el proceso un progreso hacia la igualdad y la modernidad; todos los recursos de nuestra civilización, la ciencia y la psicología incluidas, se colocaron al lado de ese ideal centralizador y autoritario. Fiel a su criterio biológico y evolucionista, Kropotkin considera que el Estado se desarrolló gracias a la función que tuvo que desempeñar de aplastar toda comunidad de hombres libres e iguales, por lo que no puede esperarse nada diferente de él. En oposición a Marx, considera que el Estado no funciona mal porque esté gestionado por burgueses o capitalistas, sino que es lo que es por su génesis y desarrollo histórico, por lo que no puede ser nunca una palanca de emancipación social. Sobre las acusaciones de utopismo o ingenuidad que se hace a los anarquistas, no existe un juicio definitivo, ya que en este análisis del Estado han demostrado en gran medida estar en lo cierto. Kropotkin, y diríamos que el anarquismo en conjunto no tiene una visión teleológica ni se arrodillan ante la historia, buscan modelos válidos en el pasado, sobre las bases de la libre iniciativa y la libre federación de intereses, y con el objetivo de una sociedad sin clases y sin un gobierno central, confiando igualmente en el futuro.
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