Aspectos de la Universidad

Es una expresión concreta de la tendencia natural del hombre a la vida social. Teniendo en cuanta la extrema carencia con la que el ser humano llega al mundo, es claro que no puede alcanzar el estado de perfección por sí solo.

Sus integrantes son docentes y alumnos. Se distinguen según el aporte que cada uno puede ofrecer a ese objetivo en común: los maestros transmitiendo conocimientos y experiencias, y los alumnos dedicándose al estudio.

La Universidad se constituye esencialmente a partir de la búsqueda de la verdad. Los que buscan la verdad deben apartarse de todo otro quehacer, y entregar su esfuerzo a esa vocación.

Tres instancias en el cumplimiento de la finalidad de la Universidad:

El primer paso del hombre es adquirirla la verdad.

El segundo paso es la comunicación de la verdad, para conservar la tradición y el patrimonio intelectual.

El tercer aspecto tiene que ver con los servicios a la sociedad que la tarea universitaria supone. La Universidad debe permanecer fiel a su espíritu de investigación y enseñanza; el perfeccionamiento de la comunidad es el mayor beneficio para cada una de las personas que la conforman.

El alma de la universidad son cada uno de sus miembros, sobre todo, los alumnos y profesores.

La Universidad es alma mater: un seno fecundo que nos da luz en el conocimiento y virtud superiores.

Áreas del desarrollo personal en la preparación universitaria:

Los hábitos intelectuales. Son aquellos que nos ayudan a distinguir lo importante de lo accesorio, a razonar con orden y limpieza, etc.

La visión sapiencial, permite integrar los conocimientos y privilegiar la mirada unificadora de lo trascendente.

Los hábitos morales son aquellas virtudes éticas que orientan hacia el bien de todos los esfuerzos del hombre y lo preservan de la tentación y el egoísmo.

La práctica religiosa.

El hombre es un animal, primeramente; y en segundo lugar, el hombre es un animal raro de especie única.

Jerarquía de los entes

Inanimados: Entes corpóreos sin vida ni interioridad.

Animados:

Dotados de vida vegetativa: vegetales

Dotados de vida vegetativa y sensitiva: animales

Dotados de vida vegetativa, sensitiva y espiritual: hombres

La vida se manifiesta por un movimiento espontáneo e inmanente.

Espontáneo: Todos los actos o cambios provienen del organismo mismo.

Inmanente: El mismo ser viviente es el beneficiario de sus actos.

Alma: el principio interno de la vida corporal. No es una noción exclusivamente humana.

Espíritu: Un principio de ser y de obrar superior e inmaterial. Está por encima de lo corporal y material.

“El alma es aquello por lo cual, primeramente vivimos, sentimos, cambiamos de lugar y entendemos”. Aristóteles.

El hombre es un animal raro, de especie única. La rareza le viene dada a este animal por el alma espiritual, siendo ella la que determina su pertenencia a la especie humana.

El cuerpo es la causa material: aquello de lo que algo está hecho.

El alma es la causa formal: aquello que determina y especifica a una cierta materia y la hace ser lo que es.

Ambas juntas constituyen la esencia humana.

Sustancia y accidentes: manzana es la sustancia, rojo y dulce son sus accidentes.

Para el apetito sensible animales y hombres poseen las potencias concupiscibles, e irascibles, que les hacen tender a un bien, o a rechazarlo.

Para el apetito espiritual la potencia es la voluntad. Su acto es el amor.

Conocimiento: Actividad vital, espontánea en cuanto a su origen, inmanente en cuanto a su término, por la cual un sujeto hace se hace presente interiormente alguna realidad.

Imagen: La representación concreta de un objeto.

Concepto: La representación abstracta de un objeto.

Conocimiento sensible: Es la forma más elemental del conocimiento y permite percibir las cosas que rodean al hombre.

Conocimiento intelectual: Aprehender la esencia abstracta y universal de las cosas.

Abstraer: Separar la esencia de una cosa de sus caracteres particulares.

Apetito Espiritual: La voluntad. Es la potencia apetitiva espiritual que tiende al bien conocido por la inteligencia, y su acto propio es el amor o querer.

La voluntad tiende siempre al bien. (Bien siendo algo valioso en sí o para el propio ser sin importar su valor moral)

Libertad es la capacidad que tiene la voluntad de optar entre bienes.

El hombre puede pensar en sí mismo, se pregunta por el sentido de su propia vida.

El hombre presenta dos polos

Polo inferior, corpóreo, material, orgánico, y sensible: por el cual el hombre esta ligado a la tierra de donde extrae su alimento vital.

Polo superior o espiritual: por el cual el hombre es capaz de:

Trascender lo material y poder expresar por medio de conceptos.

Descubrirse entre otros seres y fundar comunidades.

Reflexión, por el cual puede tomar como objeto de conocimiento su propio acto de conocer, y así saber que conoce.

Relacionarse a través del lenguaje y crear un mundo de cultura.

El hombre es un ser finito capaz de infinito porque se crea nuevas necesidades y jamás esta satisfecho.

El hombre quiere ser.

El hombre quiere ser más.

El hombre quiere ser en el gozo. Quiere ser feliz.

El hombre quiere saber.

Un ente cultural es un ente natural transformado por el hombre. Desde el hombre, el mundo de la cultura es realizado, comprendido y aprovechado por el hombre.

Uno de los bienes más complejos y acabados logrados por la cultura es el lenguaje.

Tres sectores de la cultura:

El hacer técnico. Realización de un valor de utilidad. Lo que importa en la técnica no es tanto la buena factura lograda, como el artesano bien formado para hacerla.

Cultura artística. Se ordena a realizar belleza sin detenerse en lo útil de ésta.

Cultura moral. Acción de la voluntad dirigida por la inteligencia para enriquecer a ésta con los hábitos virtuosos que permiten evitar los goces materiales y rehuir a lo dificultoso. Para crear los hábitos virtuosos es necesaria la virtud de la prudencia.

Cultura teorética (contemplación, admiración). Formación de hábitos para razonar con rectitud y llegar a la verdad.

Saber: Saborear. Poseer la verdad de un modo seguro y firme.

Saber es:

DISCERNIR: Distinguir lo que es de lo que no es. Ej. un moneda de oro pero que en realidad es falsa. Podemos distinguir que es moneda y además que es falsa, mediante la inteligencia.

DEFINIR: Poner límites. Además de poder DISCERNIR entre un triángulo y un cuadrado, hay que saber que es un triángulo y que es un cuadrado.

ENTENDER y DEMOSTRAR: Además de DISCERNIR y DEFINIR, para lograr un completo saber se deberá entender la CAUSA, o el POR QUE del objeto a saber.

El hombre sabe de dos modos: por experiencia y por ciencia.

El medio físico: Del que depende el hombre como organismo viviente (clima, paisaje, vegetación, lannura)

El medio social e histórico: Tradiciones familiares, patrias, nacionales, rudimentos aprendidos en la escuela, revistas, libros, etc.

El mundo de los valores: Del que depende el hombre para satisfacer las exigencias espirituales. Desde nacimiento el hombre se ve expuesto a valores tales como los jurídicos, estéticos, científicos, religiosos, etc)

La experiencia son los conocimientos adquiridos por la simple existencia y el contacto directo con las cosas y los hombres.

El saber científico

Ciencia: Conjunto de conocimientos metódicamente adquiridos y sistemáticamente organizados.

Método: Camino a seguir para alcanzar la verdad del saber.

Sistema: Ordenamiento de verdades que se sustentan entre sí apoyadas en una idea central.

Objeto material: Es aquello que estudia cada ciencia.

Objeto formal: Es el ángulo especial desde donde es visualizado el objeto material.

Saber particular: Investiga las causas segundas o próximas.

Saber filosófico: Investiga las causas primeras o fundantes.

Saber teológico: Investiga la causa primera Divina a partir de las verdades que Dios ha revelado sobre Sí Mismo, sobre el hombre, y sobre el mundo.

Ej.: En una obra musical, que se trate de una sinfonía o de música pop se debe a causas históricas (segundas). La racionalidad y libertad del hombre son la causa primera.