El derecho penal es aquella parte del ordenamiento jurídico que determina las características de la acción delictiva y le impone penas o medidas de seguridad. 

El principio de reserva establece que los medios de prueba obtenidos en violación a las garantías amparadas en nuestra constitución y tratados internacionales de derechos humanos incorporados a esta, no pueden ser utilizados como prueba de cargo. 

La teoría de la retribución moral de Kant se enrola dentro de las teorías de la prevención general positiva de la pena.

La Criminología es un saber interdisciplinario que estudia el comportamiento del delincuente y la cuestión criminal.

La “Criminología Positivista” considera que una persona se hace delincuente por asociarse con diferentes que tienden a identificarse positivamente con la violación de la ley, alejándose de aquellos que ven a tal quebranto como algo negativo. 

Los elementos que conforman la conducta son la voluntad y la finalidad del agente. 

Los actos reflejos, como causas de exclusión de la acción, encuadran dentro de la fuerza física irresistible de la naturaleza interna. 

Los tipos normativos son aquellos elementos que se captan a través de los sentidos. 

Son delitos especiales propios aquellos que pueden ser realizados por cualquier persona. 

Según Zaffaroni se excluye la tipicidad conglobante, por ausencia de lesividad, en los delitos de bagatela. 

El error de tipo es un error que recae sobre el conocimiento de la antijuricidad del acto. 

La teoría de la “equivalencia de las condiciones” es la única de la imputación basada en las leyes de causalidad natural. 

Los efectos de las causas de justificación benefician al autor y a los demás partícipes del delito. 

Un error de subsunción de la conducta es un error de tipo. 

Un niño de diecisiete (17) años será inimputable para aquellos delitos cuya sanción no exceda los dos años de pena privativa de libertad.

Autor es la persona que tiene dominio del hecho. 

Es autor mediato quien utiliza, como instrumento, a una persona que actúa sin dolo.

La etapa de preparación, dentro del “iter criminis”, es punible. 

El estado de inconciencia absoluta, del sujeto activo del delito, es causal de exclusión de la culpabilidad. 

La legítima defensa necesaria no puede aplicarse contra ataques de animales.