HERSKOVITS – El problema del relativismo cultural –  capítulo II.

 

Definiciones de cultura hay muchas. Todas están acordes en reconocer que es aprehendida; que permite al hombre adaptarse a su ambiente natural; que es por demás variable; que se  manifiesta en instituciones, normas de pensamiento y objetos materiales.

 

Una de las primeras definiciones fue dada por Tylor, al decir que la cultura es “el conjunto complejo que incluye conocimiento, creencias, arte, moral, ley, costumbre y sociedad.”

Conjunto complejo: la idea de sistema o estructura.

 

Las capacidades de construir: es una totalidad en la cual se articulan todas las capacidades humanas. Los hábitos son características de las capacidades, porque son automáticas y no lo hacemos totalmente consciente, por ejemplo, aprender a caminar.

A este olvido, Herskovits lo indica como paradoja, porque lo aprendemos a condición de automatizarla. El orden es el hábito que mantiene andando a la sociedad. Acá, Herskovits encuentra otra paradoja, porque la sociedad cambia, y da un conflicto entre lo habitual y el cambio.

 

Adquirido: es el eje básico de la conducta del hombre, porque si no nos situamos en un proceso de aprendizaje, no somos parte de la vida humana.

 

Como miembro de una sociedad: colectivo-social.

 

Una breve definición de cultura es la que la caracteriza como parte del ambiente hecha por el hombre, que tiene implícito el

reconocimiento de que la vida del hombre transcurre en dos          escenarios: el natural o hábitat, y el social. La definición implica      también que la cultura es más que un fenómeno biológico.

 

Para entender la naturaleza de la cultura, hay que resolver una     serie de paradojas:

 

 

-La cultura es universal en la experiencia del hombre, sin embargo cada manifestación local o regional de aquella es única. El hecho de que se diga que el hombre es un “animal constructor de cultura”, es un reconocimiento de la universalidad de la misma, que es un atributo de todos los seres humanos. Pero cada cultura es el resultado de las experiencias particulares de la población, pasada y presente, que vive de acuerdo con ella. Por tanto, la universalidad de la cultura es un atributo de la existencia humana, donde jamás dos culturas son iguales.

 

 

-La cultura es estable, y no obstante, la cultura es dinámica también, y manifiesta continuo y constante cambio. Las únicas culturas estáticas son las muertas. No tenemos más que mirar en nuestra propia cultura para ver cómo el cambio viene sobre nosotros, a menudo de tan sutil que no lo sospechamos hasta que proyectamos el presente sobre el pasado. Pero la cultura es a la vez cambiante y estable. La estabilidad puede ser entendida solo cuando se mide el cambio respecto al conservatismo.

 

 

-La cultura llena y determina ampliamente el curso de nuestras vidas, y sin embargo, raramente se entremete en el pensamiento consciente. Nos enfrentamos con cuestiones psicológicas y filosóficas. Tenemos que tratar de comprender el problema psicológico de cómo los seres humanos aprenden sus culturas y actúan como miembros de una sociedad y encontrar una respuesta a la interrogación filosófica de si la cultura es una función de la mente humana o si existe por sí misma.