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Sociedad y Estado |
Resumen sobre Basualdo |
Cat: Mesyngier - Ruffolo |
1º Cuat. de 2013 |
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1. Transformismo político.
Proceso argentino, diferencias con Italia:
• El sujeto que genera la ideología que hace posible la vigencia del sistema de
dominación, con la integración de los intelectuales del campo popular al bloque
dominante, no es, como en el caso italiano, autóctono de los países centrales
sino que proviene de los países centrales por lo que esta dominación está vacía
de contenidos nacionales.
• En el caso argentino el sector dominante no pudo consolidar un partido
político con sus propios “intelectuales orgánicos” por lo que, para la
conducción del aparato estatal, tuvieron que realizar dictaduras militares y así
imponer sus políticas. Por ende ante la ausencia de dicho partido de derecha los
encargados de cooptar al partido político que precede al gobierno luego de la
dictadura y a la sociedad civil, también encargados de modelar el transformismo
argentino son los grupos económicos locales y algunos conglomerados extranjeros
(clase dominante)
• La corrupción y los altos ingresos relativos que perciben los integrantes del
sistema político fueron los encargados de impulsar la constitución de un nuevo
sistema político que responde a los intereses de la clase dominante, es decir,
al no haber una ideología los factores materiales asumen un papel decisivo en la
conformación del transformismo argentino.
La desocupación y la marginalidad social operan no solo como disciplinador de la
clase trabajadora sino también como un factor que impulsa la incorporación de
los nuevos cuadros al planteo dominante, garantizando así la permanencia y
cohesión de los mismos.
2. PRIMERA ETAPA: LA DICTADURA MILITAR.
La dictadura militar fue posible por las condiciones socio- económicas mundiales
externas pero también internas, con la idea de los sectores dominantes de
destruir la identidad nacional de los sectores populares adquirida en el
peronismo. A partir de allí comienza el aniquilamiento de muchos militantes y
organizaciones que conforman las conducciones de los sectores populares, también
la interrupción de la industrialización sustitutiva que sustentaba la lucha
social y estaba vigente en nuestro país desde los años 30.
Con la Reforma Financiera de 1977 comienza el predominio de la valorización
financiera, ya que los productos importados erosionan, vía precios, la
producción interna y, mediante la apertura financiera, irrumpe el fenómeno de
endeudamiento externo tanto del sector público como privado que significara un
factor fundamental para la instalación de la valorización financiera a partir de
una tasa de interés interna más alta que la externa.
El papel del estado:
- a través del endeudamiento interno mantiene una elevadísima tasa de intereses
en el sistema financiero local respecto a la vigente en el mercado
internacional.
-mediante la deuda externa es quien provee las divisas que hacen posible la fuga
de capitales.
- asume como propia la deuda externa del sector privado, incorporando una nueva
transferencia de recursos existentes que ya comprometían miles de millones de
dólares.
Es fundamental señalar que los principales perjudicados con este nuevo
funcionamiento de la economía argentina son los trabajadores ya que el origen de
los recursos que se transfieren al exterior durante la valorización financiera
no se ubica en la deuda externa sino en la brutal redistribución del ingreso en
contra de los asalariados.
5. Como diagnostico inicial durante el primer gobierno constitucional presidido
por Ricardo Alfonsín hay que tener en cuenta que a partir de 1982 comienza en
Latinoamérica la “crisis de la deuda externa”. En esta etapa se consolida la
valorización financiera por lo que el proceso económico es conducido por los
grupos económicos locales y los conglomerados extranjeros, así mismo se
caracteriza por el estancamiento y la escases de financiamiento internacional
producto de la presión que realizan los acreedores externos en base al
incumplimiento de pago de la deuda externa.
La evolución de la política económica en esta etapa tuvo influencia de Bernardo
grinspun que pretendía renegociar la deuda externa, la redistribución del
ingreso de los asalariados para la reactivación de la producción interna,
controlar precios claves y redefinir el poder sindical, esta plan fracasa.
Sourrouille, que asume luego de Ginspun, pone en marcha el plan austral que
tiene como objetivo la superación económica sustentada en el modelo exportador y
la reactivación de la inversión.
En 1985 se pone en marcha el denominado plan Baker que aludía las reformas
estructurales que debían efectuar los países deudores de la deuda externa debido
la presión de los acreedores externos, para esto se aplicaron los denominados
programas de conversión de deuda externa que consistían en el rescate de los
bonos de la deuda externa a cambio de activos físicos y no de divisas, ya que su
pago en efectivo era imposible. Este es el origen de la privatización de las
empresas públicas y de las nuevas políticas del gobierno radical desde 1988 en
adelante; en ese mismo año se lanza un plan de privatización de las empresas
públicas que fue rechazado en el Congreso Nacional por la oposición del partido
peronista, plan primavera. Esta situación trajo aparejado que dentro de los
sectores dominantes, los acreedores externos tuvieran, en buena medida una
participación relativa secundaria en la redistribución del excedente interno que
culminará en mayo de 1988 con la moratoria externa “de hecho”, al suspender los
pagos de las obligaciones vinculadas a su endeudamiento con el exterior.
Crisis Hiperinflacionaria de 1988
Con las presiones de los acreedores externos el FMI, que exigía la normalización
de los pagos y el Banco Mundial que insistía en las reformas estructurales y el
apoyo de EE UU para regularizar dichos requisitos los bancos extranjeros inician
la “corrida” cambiaria de febrero de 1989, desatando la crisis inflacionaria.
Se trato de una crisis que se dirigía a remover las restricciones estructurales
que impedían el desarrollo y la consolidación del patrón de acumulación, basado
en la valorización financiera. Exige redefinir el carácter del estado y
modificar también la distribución del ingreso y más aun la propia relación entre
el capital y el trabajo. Esta crisis de gobierno provoco la salida anticipada de
Alfonsín.
Transformismo:
Los comienzos del transformismo estuvieron asociados al pago de la deuda externa
ya que Alfonsín en su campaña electoral repudiaba el pago de la misma ya que la
entendía como ilegitima y luego en el poder con la presión principalmente de los
acreedores externos implemento un “pago a mediano plazo”. Estas vinculaciones
entre el partido de gobierno y los sectores dominantes ponen en marcha no solo
un proceso de cooptación ideologica sino también de negocios políticos y
económicos.
Primer mandato de Menem, políticas aplicadas.
La crisis hiperinflacionaria continuaba a pesar de la sucesión de gobierno, por
lo que se pone en marcha una serie de reformas destinadas a modificar
drásticamente la estructura del sector público y la orientación de las
transferencias de los recursos estatales.
-Ley de emergencia económica destinada a eliminar subsidios, reintegros
impositivos y distintas transferencias implementadas por el sector publico.
-Ley de reforma del Estado, intervención de las empresas estatales, fijando el
cronograma y los criterios para la transferencia de los activos públicos al
sector privado, entre los que se encontraba la conversión de la deuda externa.
SEGUNDA CRISIS HIPERINFLACIONARIA producida en diciembre de 1989 que culmina en
marzo de 1991, con el Plan de Convertibilidad por parte de Cavallo.
En 1992 se retoma el pago de la deuda externa a partir de la implementación del
plan Brandy para garantizar el pago a los acreedores externos. Esto conlleva a
un abundante endeudamiento externo tanto en el sector público como del privado.
La etapa más brillante del nuevo patrón de acumulación abarca desde 1992 hasta
fines de 1994 donde convergen dos procesos complementarios y decisivos:
- sectores dominantes adquieren una homogeneidad inédita ya que las empresas
extranjeras, grupos económicos y banca transnacional constituyes una comunidad
de negocios sobre la base de su asociación en la propiedad de los consorcios que
adquieren las agencias estatales que son privatizadas.
- a partir de la superación de la inflación del nuevo ciclo de endeudamiento
externo y de la expansión del crédito interno se genera un ciclo expansivo de
consumo interno que incorpora vastos sectores sociales, dando lugar a la etapa
de mayor consenso social del nuevo modelo e acumulación.
En las privatizaciones de la “acumulación originaria” se generaron “retornos”
(sobornos) que estuvieron vinculados a cuatro aspectos claves:
a. es precio fijado para los activos y los montos posibles de capitalización de
deuda.
b. el endeudamiento externo de las empresas durante el proceso de privatización
que en muchos casos fue sumamente acelerado.
c. la adjudicación de las licitaciones o concesiones propiamente dichas.
d. el contenido de los marcos regulatorios iníciales.
En este periodo el transformismo está vinculado a un nuevo formato de sistema
político que implica la cooptación de fuerzas políticas enteras, aun aquellas
supuestamente contestarías. Esto está claramente demostrado en el denominado
“pacto de olivos”, el acuerdo que pone en marcha una reforma constitucional que
permitirá la reelección de Menem donde de esta manera se aprueba todo lo actuado
y la posterior reforma de la corte suprema de justicia al mismo tiempo que ubica
al peronismo como el partido de mayor jerarquía orgánica y al radicalismo como
su rueda auxiliar.
Segundo mandato de Menem.
Con las políticas implementadas en el primer gobierno de Menem, se genera una
etapa de crecimiento económico que culmina en el tercer trimestre de 1994. Años
caracterizados por una acentuada expansión del consumo interno, beneficiando a
la cúpula empresaria que evolucionaba de una manera similar a la expansión de la
economía en su conjunto. A partir de la crisis de 1995 se altera este
comportamiento. Esto provocó el empeoramiento en las ya comprometidas
condiciones de vida de los asalariados. La desocupación y la subocupación se
estabilizaran en 1995 en niveles inéditos y alarmantes, operan con el clásico
“ejercito industrial de reserva” (precarización laboral, bajos salarios y
marginalidad social). De esta manera el desarrollo de la valorización financiera
y el sistema de dominación que lo hace posible, el transformismo argentino,
instalan el fenómeno estructural de diciplinamiento y desmovilización de la
clase trabajadora. Es importante señalar que la nueva estrategia productiva de
los grupos económicos consiste en concentrar su capital fijo en las actividades
que exhiben ventajas comparativas naturales, específicamente en la producción
agropecuaria y agroindustrial. En cambio el avance de los conglomerados
extranjeros y las empresas transnacionales se origina en dos procesos
complementarios: la incorporación de nuevas empresas y la adquisición de
empresas ya instaladas, así como en el dinamismo de su facturación,
especialmente en la comercialización y en la producción automotriz<, sector
industrial que goza de protección excepcional.
Transformismo: se generan modificaciones en este con el intento de modificar la
escena política por parte de los sectores subalternos, como en las condiciones
estructurales que irrumpen en esta etapa. Surge un tercer partido que cuestiona
desde afuera al establishment por neutralizar a los sectores opuestos con el
descabezamiento (absorción) de sus condiciones políticas y sociales. Esta
experiencia termina cuando el partido auxiliar establece la alianza con la
fuerza política emergente. Tres errores estratégicos:
1. Haber considerado que la regresividad económica y social que se consolida
durante los noventa surge con el menemismo.
2. la notable distancia de los dirigentes de la fuerza pública respecto a la que
constituía su fuerza social, que trae como consecuencia el desaliento de la
organización de la fuerza pública.
3. Los dirigentes consideraban la corrupción un fenómeno privativo del partido
hegemónico y no inherente al sistema de dominación generado durante la
valorización financiera.
En síntesis, se expresa la ignorancia acerca del patrón de acumulación en curso
y del sistema político que genero durante su desarrollo.