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PROCESO DE REORGANIZACIÓN NACIONAL 1973-1986
Durante esta dictadura caracterizada por un Estado Terrorista basado en quebrantar el orden constitucional y el Estado de Derecho se desplegó un sistemático uso del terror para reorganizar las relaciones sociales de la sociedad en tres niveles: a nivel social (con la destrucción de relaciones sociales contestatarias, críticas, de solidaridad y cooperación), a nivel político (despolitizando a la sociedad y quebrando los proyectos políticos alternativos basados en la justicia y transformación radical del capitalismo) y a nivel económico (con la destrucción de la industria y la imposición de un nuevo modelo económico de valorización financiera). Se siguió funcionando a través y apoyando la DSN, que consideraba que el comunismo acabaría con las libertades y los derechos individuales del país donde se instaurara, por lo tanto, las violaciones a los DD.HH eran “necesarias” para evitar la acción o instauración del comunismo. ¿Por Qué se necesitó un terrorismo de Estado? Porque se requería no solo la supresión de los mecanismos de representación y expresión de la sociedad civil, sino la imposición de ciertos comportamientos sociales con el fin de lograr la reconversión del modelo económico de la Nación. Esta dictadura fue la expresión política de un nuevo patron de acumulacion internacional y nacional basado en la valorización financiera (actividades de inversion, creditos, servicios) en detrimento de la valorización productiva (la industria y los sectores dinámicos que requerían mano de obra). Era imprescindible expulsar la fuerza de trabajo ya que no se requieren tantos obreros porque la producción de bienes de capital, indumentaria y otras mercancías dejaron de ser el eje de la economía argentina. Todo este proceso no se realizó sin conflictos ni resistencia.
SISTEMA POLÍTICO:
Dictadura institucional: Esta dictadura fue institucional porque las FF AA establecieron e hicieron efectivas una serie de normas para la sucesión en el ejercicio del Gobierno, asegurando la continuidad. No era institucional por el respeto a las instituciones democráticas, sino porque se proponían a institucionalizar un nuevo orden.Las FFAA, representadas por el Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea, elaboraron un acta con los “Propósitos y Objetivos básicos” y además, asumieron los tres poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
El 24 de Marzo del 76 la junta militar derrocó a Isabel y asumieron el poder político como representantes de los intereses de los grandes grupos económicos. Este golpe era apoyado por importantes sectores como el más concentrado de la burguesía nacional y transnacional, la Iglesia Católica, dirigentes políticos, sindicales y medios de prensa (quienes por medio de una estrategia sistemática fueron utilizados como herramienta de construcción y silenciamiento de cualquier oposición). Los militares impondrán el orden, y como en el pasado, dejaría paso a los civiles una vez “pacificada” la sociedad. El peronismo y el radicalismo no resistieron al golpe como se esperaba ya que sus dirigentes más tradicionales guardaron un silencio cómplice y los sectores más combativos y no tenían capacidad de respuesta debilitados por el accionar de la Triple A. Esta política utilizada por el gobierno no solo abarcó la eliminación física del enemigo, si no, todo aspecto de la vida cotidiana, la cultura, educación, mundo del trabajo, la censura de los MDC, en ámbitos de pensamiento y expresión de ideas, se basaba en el convencimiento de que la verdadera victoria era la que se ganaba a través de la cultura. Las universidades fueron amordazadas. Algunos eligieron el exilio y otros solo silenciaron por la imposición.
Integrantes: Los integrantes de la junta militar fueron Videla (Ejército), Massera (Marina) y Agosti (Fuerza Aérea). LOS PRESIDENTES DE FACTO FUERON: Videla (1976-81), Viola (1981) y Galtieri (1981-1982) y Bignone (1982-1983).
PRESIDENCIA DE VIDELA 1976-1981
Las primeras medidas fueron la pena de muerte para quienes hirieran o mataran a cualquier integrante de las fuerzas de seguridad, la clausura del Congreso Nacional, reemplazo de toda la Corte Suprema de Justicia y el Poder Judicial por jueces pertenecientes al nuevo régimen, el allanamiento e intervención de los sindicatos, prohibición de actividades políticas y la imposición de censura sobre todos los MDC.
Doctrina de Seguridad Nacional: Esta doctrina fue implementada y utilizada del todo durante este régimen y los militares como base ideológica para reprimir y matar desplegando todo un aparato represivo contra quienes atentaban al supuesto “bien común”. En un principio, estaba dirigida a cualquier amenaza “comunista”, “marxista” o “socialista”, pero se sabe que cuando se instaló este nuevo gobierno el ERP y los Montoneros estaban prácticamente neutralizados, por eso, este golpe de estado respondió más a cuestiones estructurales para modificar el patrón de acumulación del capital, la distribución del ingreso y la inserción internacional de la Argentina, que a frenar la acción guerrillera que se había automarginado del contexto social. Este pretexto se expresa en la “teoría de los dos demonios” defendida por la UCR, según la cual un demonio era la guerrilla y el otro los militares, y en el medio había una población que no tenía nada que ver con nada. Una vez derrotados los movimientos guerrilleros, el estado terrorista desplegó un “mecanismo de control social sobre la población” con amenazas, secuestros y muertes de personas que no eran ni altos guerrilleros de izquierda ni meros trabajadores o estudiantes, sino militantes, sacerdotes, sindicalistas, abogados, intelectuales activistas de organizaciones de derechos humanos y muchos otros. La operación procuraba eliminar todo activismo, protesta social, hasta un simple reclamo de boleto estudiantil, toda expresión popular. Se buscaba convencer a la población de que la irrupción de las FFAA implicaba la opción entre el “caos o el orden” y que se estaba en “guerra con el enemigo interno”, esa concepción militar contra la “subversión”. Esta doctrina sirvió de pretexto a los militares argentinos para ampliar la influencia del país en ciertas regiones latinoamericanas saliendo a flote una creencia nacionalista que veía a la Argentina como una posible potencia geopolítica. Para todas estas tareas se necesitó un servicio de inteligencia que utilizaba métodos de tortura para obtener información.
Centros Clandestinos: La acción terrorista se dividía en cuatro momentos: el secuestro, la tortura, la detención y la ejecución. Para los secuestros se operaba de noche y en otras ocasiones, se realizaron en fábricas o lugares de trabajo, en la calle y en otros países con la colaboración de autoridades. La tortura ra sistemática y prolongada, tortura física de duración indefinida y utilizando la psicológica: sufrir simulacros de fusilamiento, asistir al suplico de amigos, hijos o esposos. En principio era para obtener información pero en general era para quebrar la resistencia del detenido, destruir su dignidad y personalidad. Los que sobrevivían a la tortura permanecían en detención en estos centros clandestinos, cuya existencia fue negada por las autoridades, degradando a las víctimas del todo, con sus heridas y sin atención médica, encapuchados y mal alimentados. Muchas detenidas embarazadas dieron a luz en esas condiciones y fueron despojadas de sus hijos. Estos centros clandestinos fueron todos organizados con una estructura y régimen de funcionamiento igual, con salas de torturas, salas de servicios médicos.
Figura del desaparecido: La desaparición no es sinónimo de muerte o asesinato, sino que se constituye en una exasperante sospecha de muerte que se prolonga durante muchos años hasta el proceso de apertura democrática. La estrategia “desaparecedora” servía para dificultar la prueba del cuerpo del delito y además, el desconocimiento del destino de los desaparecidos generaba terror en las víctimas y en la sociedad.
Madres y Abuelas de Plaza de Mayo: Esta agrupación se formó en abril del 77 con el fin de recuperar con vida a los detenidos desaparecidos. Se reunieron en la Plaza de Mayo manifestando la petición del paradero de sus hijos y también de esos niños que fueron secuestrados junto a sus padres y no habían aparecido, y a los hijos de las jóvenes que secuestradas embarazadas dieron a luz en prisión.
Los derechos humanos: Se buscó neutralizar a través de una campaña con el lema “los argentinos somos derechos y humanos” las denuncias realizadas por los sobrevivientes de los centros clandestinos, los exiliados y familiares de las víctimas en el exterior, que la dictadura llamó “campaña anti argentina”. La Comisión Internacional de Derechos Humanos abrió oficinas en todo el país que del 6 al 20 de septiembre del 79 recibieron miles de denuncias de secuestros y desapariciones, y llegó a la conclusión de que por acción de autoridades públicas y sus agentes, en la República Argentina se cometieron durante el período de 1975 y 79 numerosas y graves violaciones a los derechos humanos. Se considera que fueron crímenes de lesa humanidad por los asesinatos, exterminio deportación o desplazamiento forzoso, encarcelación, tortura, violación, prostitución forzada, esterilización forzada, persecución por motivos políticos, religiosos, ideológicos, raciales, étnicos, de orientación sexual u otros.
PRESIDENCIA DE VIOLA 1981:
Su gobierno adquirió un carácter polémico siendo cuestionado por los militares y por su intento de relacionarse con los partidos tradicionales y llevar adelante una moderada “apertura política” que empeoró la situación, siendo sacado del puesto de gobierno y reemplazado por Galtieri.
PRESIDENCIA DE GALTIERI 1981-1982:
Retuvo el control directo de las FFAA y las medidas económicas desarrolladas por su ministro de economía Alemann fueron la restricción del gasto público, la comprensión del circulante, la privatización de bienes estatales y el congelamiento de los salarios que llevaron a una grave depresión económica. La recesión llevó al cierre de numerosas industrias y a medidas drásticas de reducción de personal en otras.
Guerra de Malvinas: El desembarco argentino el 2 de abril del 82 conmovió al país y unificó temporalmente a todos los sectores detrás de la recuperación de las islas. El anuncio provocó expresiones de fervor patriótico y masivas concentraciones en Plaza de Mayo. La adhesión de la sociedad fue casi total. La izquierda se divide, un sector apoyó el operativo de las fuerzas militares pero sin apoyarlas a ellas, y otro, vio el triunfo de los militares como medio para terminar con la dictadura. El 14 de junio la Argentin se rinde y se dirigieron nuevamente a Plaza de Mayo miles de ciudadanos para repudiar al gobierno, ya que los medios de prensa informaban engañando sobre victorias argentinas en el campo de batalla. El final del conflicto fue un factor decisivo para la restauración de la democracia.
PRESIDENCIA DE BIGNONE 1982-1983: Galtieri renuncia y se nombra a Bignone como presidente quien cumpliría un período de gobierno limitado.
ECONOMÍA: Las políticas económicas de Martínez de Hoz se apoyó en dos grandes columnas: 1) LA APERTURA ECONÓMICA: con la apertura comercial, la protección a la industria desapareció y la aparición de productos importados más baratos que los nacionales terminó con la industria que no podía competir con esos niveles de productividad y eficiencia que imponía el mercado mundial. Y 2) LA REFORMA FINANCIERA DEL 77: que se basaba en supuestas virtudes del mercado como mecanismo asignador de recursos y fijador de precios y condenaba a la vez la intervención estatal en el sistema financiero.
La economía real: Esta hace referencia a los efectos que tuvo el conjunto de medidas neoliberales. En un contexto de liberalización creciente del mercado internacional de capitales, la nueva orientación desarticuló los instrumentos de intervención estatal característicos del modelo del ISI. Los militares irrumpieron en el modelo de industrialización sustitutiva y construyeron un nuevo modelo de acumulacion: el sistema de valorizacion financiera, sentando bases para el empobrecimiento de sectores medios y populares en beneficio de los grandes grupos económicos, a la vez, la quiebra de fábricas, irrupción de artículos importados y la invasión de nuevos bancos y organismos financieros.
CONSECUENCIAS: 1)LA CONCENTRACIÓN DEL INGRESO:: El salario pasó a ser visualizado como un costo para la mayoría de los empresarios afectando profundamente a los trabajadores. 2)CRECIMIENTO DE LA DEUDA EXTERNA: La deuda externa se multiplicó hacia 1983. 3)LA DESINDUSTRIALIZACIÓN: Se expresa en el cierre de más de 20 mil establecimientos fabriles y la industria dejó de ser el núcleo dinamizador de las relaciones económicas y sociales. También se neutralizó el poder de los sindicatos y se debilitó hasta casi desaparecer la pequeña y mediana industria que históricamente estaban aliadas con el sector popular en defensa del mercado interno. 4)FRAGMENTACIÓN DE LOS SECTORES POPULARES: La dictadura militar fue el inicio de un proceso de mutación y fragmentación de las clases populares por el debilitamiento del mundo de los trabajadores formales y de sus instituciones sindicales. La abrupta caída del salario hizo que la lucha de esta que fue siempre la base del poder de negociación de los sindicatos, deje de cohesionar a la clase obrera y contribuía a la ruptura de solidaridades al interior de las clases populares.
FIN DE LA DICTADURA: Tras las crecientes protestas sociales, la presión internacional por las violaciones a los derechos humanos y la derrota de la guerra, la Junta Militar decidió finalmente entregar el poder en el 83. Bignone llamó a elecciones presentándose Ítalo Luder ( quien rechazaba la revisión de lo sucedido durante la dictadura militar dando legalidad a la ley de autoamnistía dictada por los militares) y Raúl Alfonsín (favorable al enjuiciamiento de los responsables del terrorismo de estado). El 30 de octubre del 83 Alfonsín venció con los votos.
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