Altillo.com > Exámenes > UBA - CBC > Sociedad y Estado
ROFMAN Y ROMERO. LA PRODUCCIÓN DE BIENES PRIMARIOS EXPORTABLES. (1852-1930)
El crecimiento industrial de los países centrales (EE.UU. y Europa Occidental) fue tal que abarco a los países periféricos, de esta forma se desarrolla la división internacional del trabajo, en donde los países periféricos se encargaban de vender materia prima a los países centrales, y estos vendían en productos manufacturados a los primeros. Durante este periodo la Argentina vive un acelerado crecimiento económico; la incorporación de la Argentina al sistema mundial, como productora de materias primas alimenticias, se vio favorecida; Para realizar esta adaptación recibió del exterior importantes contingentes de inmigrantes (italianos y españoles) y gran cantidad de capitales (que se usaron para la infraestructura de ferrocarriles y puertos, para el control del sistema de comercialización y para el financiamiento del estado nacional).
La expansión económica es dirigida por la oligarquía terrateniente, siendo la intermediaria entre los estímulos externos y el sistema nacional. Esta expansión se realizó al ritmo de la conquista y ocupación de territorios entregados por el Estado a precios muy bajos a lo que ya eran grandes propietarios. Los excedentes originados en la expansión agropecuaria fueron canalizados por la oligarquía, a través de etapas:
La función de la oligarquía en el plano político fue organizar el Estado nacional. Correspondió a un programa iniciado en 1852 y acelerado luego de la pacificación roquista de 1880:
Durante esta etapa la oligarquía gobernante recibía su poder tanto del control interno de la producción como de su capacidad para negociar eficazmente con el exterior, quedando el productor local como último eslabón de la cadena de beneficiarios. El crecimiento del sector primario exportador provocó una expansión económica global de la sociedad y la inmigración masiva (centrada en el Litoral) permitiendo el desarrollo de la clase media, a tal punto que en su condición de marginalidad crearon partidos como la UCR, exigiendo el sufragio universal y la vigencia de la constitución. Luego de varios movimientos revolucionarios, la oligarquía entiende el riesgo de no aceptar su participación política y sanciona la Ley Sáenz Peña en 1912, la que otorgaba el sufragio universal.
El radicalismo asume el gobierno sin cambiar los elementos básicos del poder permaneciendo en manos de los viejos sectores. En 1930 la oligarquía a través de un Golpe de Estado, termina con el periodo de gobiernos radicales para poder adaptarse a la nueva situación del mercado global, originado por la crisis mundial.
LA SUSTITUCIÓN DE IMPORTACIONES. (1930-1952)
La crisis y la Guerra Mundial aflojaron los vínculos de dependencia y elevaron el nivel de la frontera interna permitiendo a los grupos dominantes locales mayor autonomía en sus decisiones. La nueva organización del mercado mundial impulsó un cambio lento en la producción argentina, volcándose en el mercado interno. Este cambio, conocido como la sustitución de importaciones (ISI), fue acompañada por el cambio en la estructura del poder, el Golpe Militar primero y el peronismo después, la respuesta de la oligarquía a la crisis mundial fue recuperar el poder político y desalojar del gobierno al radicalismo. De esta manera, se comienza un proceso de exportación y desarrollo industrial.
La oligarquía, durante el gobierno de Uriburu (‘30/’32) se caracterizó por utilizar el aparato estatal para salvar el modelo económico en su conjunto. Adoptó la política para regular la producción y comercialización de productos agrícolas mediante la creación de la Junta Nacional de granos y la Ley de Carnes, otra medida empleada fue el tratado Roca/Runciman luego fueron necesarias otras medidas que ampliaran la base de sustentación del sector, para la protección y estímulo a la industria local.
El periodo de nacionalismo popular de 1943, surgió cuando ya estaban colmadas las posibilidades del proceso de sustitución de importaciones. La coyuntura favorable para los productos agropecuarios otorgó al país una gran cantidad de divisas y saldo comerciales favorables. Por esto la Argentina se convierte en acreedora de los países centrales. En este periodo, el movimiento peronista se presenta como una alianza entre los sectores nuevos de la burguesía industrial y la clase obrera, brindaba su apoyo a los sectores hegemónicos. Una de sus políticas iniciales fue la redistribución de ingresos, para sostener al mismo tiempo la política distributiva y la acumulación de capital se echó mano a la reserva de divisas acumuladas durante la guerra y a la transferencia de ingresos desde el sector rural al industrial. El Estado debió expandir sus funciones e intervenir ampliamente en la vida económica; el agotamiento de la sustitución de las exportaciones y de las divisas acumuladas originó tensiones en el sistema de producción y distribución, llevando a una modificación política peronista y luego a la disgregación del sistema.
EL PROCESO DE SUSTITUCIÓN DE IMPORTACIONES.
La crisis de 1929/30 disminuyó la demanda de alimentos y el precio de estos en el mercado mundial. El flujo de capitales externos decrece, esto sumado a las medidas empleadas para ahorrar divisas reduciendo las importaciones, hizo que las producciones se enfocaran en el mercado interno; Así se provoca un crecimiento económico y un desarrollo industrial por medio del ISI que se mantuvo de manera acelerada hasta 1943 y con un ritmo más lento hasta 1950 y terminando con la Ley de radicación de capitales extranjeros en 1953. Este proceso se caracterizó por la coexistencia de grandes empresas monopólicas u oligopólicas con infinidad de pequeñas empresas. El sector agrícola participó de dos modos distintos en la inversión industrial. Los que ya estaban ligados al capital financiero y los que estaban obligados a participar debido a las políticas de transferencia de ingresos. Las inversiones estatales, fueron reducidas provocando que, por ej., la falta de estructura o tecnología repercutiera en un futuro, impidiendo la expansión industrial a causa de productos costosos comparados con los del mercado exterior.
Los motivos de que este proceso se terminara fueron la escasez de divisas, debido al estancamiento de la producción agraria; El desarrollo enfocado a la industria de bienes de consumo, y no a otras industrias; la falta de inversión en bienes de capital (infraestructura- tecnología). Esta falta de desarrollo deriva en una mayor dependencia con el exterior.
LA PENETRACION DEL CAPITAL INTERNACIONAL (1952- 1970).
Agotado el proceso de sustitución, la industria no pudo soportar la doble política de acumulación y redistribución de ingresos. Se hicieron frecuentes los enfrentamientos entre el sector obrero y la burguesía industrial, la respuesta oficial a esta situación fueron los Congresos de la Productividad, lo cual no le sirvió para ganarse el apoyo del sector propietario ni para evitar enfrentamientos con sectores militares y con la iglesia. La salida intentada por el gobierno peronista fue abrir las puertas a las inversiones con la Ley de Radicación de Capitales Extranjeros y con los contratos petroleros, sin embargo, al tener un poder tan disminuido y contradictorio, estas medidas y el levantamiento militar (revolución libertadora) determinaron la caída de Perón.
En la revolución Libertadora concluyó un conglomerado de intereses contradictorios, el grupo que con Leonardi había accedido a la presidencia trato con poca fortuna de reditar el acuerdo entre el ejército y la clase obrera, fue desplazado cuando fracciones de la burguesía reconstituyeron su dominio; Se adoptaron planes de estabilización monetaria, restricciones salariales y reducción de gastos públicos. La revolución fue incapaz de encontrar una solución a los problemas políticos.
El gobierno Frondizista, que accedió al poder en 1958, intentó desarrollar las industrias básicas con el apoyo del capital internacional. Lo que en realidad hizo fue marginar a los sectores industriales salidos del periodo de sustituciones, que habían prosperado y ahora resultaban ineficientes frente a las corporaciones. El flujo de capitales estuvo condicionado por las políticas de estabilización impidiendo un real desarrollo. Los problemas políticos se agudizaron, el movimiento obrero exigía mejoras salariales, la legalización del peronismo impulsaba medidas de lucha intensas, el ejército asumía el programa de autoritarismo y modernización. Así cayó el gobierno de Frondizi.
A partir de 1963 el gobierno de Illía represento el último intento por salvar el sistema democrático/ representativo. La UCRP trato de encontrar la forma de incorporar el peronismo sin entregarle el poder y realizar la obra modernizadora. Pero en 1965, la amenaza de un triunfo peronista se agravaba por la radicalización de los métodos de lucha que precipitaron su caída.
El nuevo orden político debía encontrar la forma de articularse en torno del capitalismo monopólico internacional; la solución más coherente la ofreció la revolución Argentina, instaló las fuerzas armadas en el control del Estado; se definió como autoritario y no democrático, asumió la función de organizar políticamente a las distintas fracciones de la burguesía sin la mediación de los partidos políticos mediante un juego de represión y soborno a los sectores más privilegiados del movimiento obrero y a su burocracia. El onganiato logró cierta “paz”, pero el “Cordobazo”, en mayo de 1969, marcó el límite de ese intento.
LA ACCIÓN DE LAS INVERSIONES EXTRANJERAS.
Desde 1953 (gobierno de Perón) el Estado adoptó políticas para estimular y regular la entrada de capitales internacionales. La Ley de Radicación de Capitales propició inversiones externas dirigidas a actividades mineras e industriales, estableciendo restricciones para el rendimiento del capital, al tiempo que se sancionaba un régimen de promoción industrial que beneficiaba con exenciones a algunas actividades. En 1958 el nuevo régimen (gobierno de Frondizi) autorizó la libre transferencia de utilidades y capitales, reiterando las exenciones para la promoción de industrias básicas. Estas medidas se complementaron con las garantías a las inversiones y otros estímulos que buscaban inversiones en EE UU. O Europa; estas inversiones crearon una nueva forma de dependencia al sector externo, y serios problemas en la balanza de pagos; el agro se demostró incapaz de suministrar las divisas necesarias, las exportaciones de productos industriales chocaban con las barreras arancelarias en los países centrales, las inversiones extranjeras acentuaron la independencia general del sistema nacional, para la propia estructura productiva. La concentración monopólica se afianza en el sector productivo, en la comercialización y en las finanzas. La acción del capital internacional modificó la totalidad del síntoma productivo, dentro de esta política se estimuló la liquidación de zonas cuya producción era ineficiente.
El problema central, que ocupa la atención de los sucesivos gobiernos, es el de la inflación, cuyo control se considera indispensable para la estabilidad del sistema económico. Las medidas reiteradas en función a esto fueron, el congelamiento de los salarios, la devaluación monetaria y la privatización de empresas estatales.
HUGO QUIROGA (1880- 1981)
Hegemonía: capacidad política que cuenta una clase social, para ejercer una función de dirección la sociedad.
En el siglo pasado se estructura en la Argentina una economía agroexportadora. Se conforma una burguesía agraria, ligada a la propiedad de la tierra y a la comercialización de los productos agrícolas, cuyo sector dominante era el exportador. Entre 1812 y 1930 el país no conoció ningún golpe de Estado y las instituciones funcionaron con continuidad pese a sublevaciones armadas militares y civiles que no lograron interrumpir ese proceso. Durante la hegemonía oligárquica el país conoció un progreso sorprendente a través de la inmigración, el capital extranjero y la demanda internacional de materias primas. En el terreno político, la clase conservadora se apoya entre 1880 y 1912 en un régimen democrático restringido. El periodo abierto en 1916 significará la apertura de un paréntesis en el sistema político oligárquico al extenderse la participación popular (Ley Sáenz Peña); pese al crecimiento económico, la oligarquía no podrá fundar un orden estable y consensual.
La crisis internacional hace perder a la Argentina la inserción estable que tenía en el mercado mundial. Con el golpe de 1930, el Estado oligárquico liberal entra en crisis definitivamente. Por un lado, el viejo conservacionismo llega al gobierno merced al fraude electoral, por el otro, con Justo y una serie de transformaciones podremos afirmar que la Argentina moderna nace en la crisis de los años 30. Características de la sociedad argentina: 1) Crecimiento industrial 2) Intervención estatal 3) El crecimiento de la clase obrera 4) El nacimiento de una nueva fracción de la burguesía industrial.
Con Justo entra al gobierno la fracción más poderosa de la burguesía que busca reconstruir el capitalismo argentino. Hay una reformulación del binomio industrial-agro, pero con un alcance limitado, a su vez se impulsa un proceso de desarrollo industrial por sustitución de importaciones. Se trata de adaptar el viejo proyecto a las nuevas condiciones, y por ello la industria pasaba a ocupar un lugar más importante en la economía nacional. A partir de 1935 se verifica un crecimiento de la economía y una acumulación de reivindicaciones sociales y obreras., el peronismo satisface esto. La oligarquía no logra recomponer en la sociedad su quebrada hegemonía, por lo que tiene que gobernar por medio de un régimen democrático fraudulento. Esta crisis se agrava y se extiende, en 1955, al conjunto de la clase dominante cuando el golpe de estado destruye el sistema hegemónico creado por el peronismo, y no puede surgir otro grupo que lo recomponga.
El gobierno peronista logrará organizar un orden político legítimo y estable. La burguesía industrial se apodera del aparato del Estado, este sector de la clase dirigente logrará crear un sistema político consensual. La especificidad del estado populista consistirá en ampliar la acción económica y financiera del estado y la esfera social. Se trata ahora de un estado distribucionista que favorecerá la integración económica de amplias capas de la población y la política ideológica.
El golpe militar de 1955 desalojará al peronismo del poder del estado pero no podrá desintegrarlo como movimiento de masas y como dirección de los sectores populares. Se redefine, entonces, la ecuación Estado y sociedad, por la cual la supremacía de un grupo social ya no se encuentra vehiculizada solamente por el estado sino que es ejercida también por la sociedad civil a través de la hegemonía.
Pese a que ha disminuido sensiblemente el poder de la oligarquía sigue conservando importancia en la vida política y económica del país. Los golpes de 1966 y 1976 apuntaron a estabilizar institucionalmente y de manera estable a los sectores concentrados de la burguesía en el poder del Estado y en la sociedad; la caída del régimen peronista (1955) suscita a una crisis de hegemonía en el interior de la clase dominante.
A la situación de emergencia nacional se le une la coyuntura internacional de posguerra, lo que repercute en el balance de pagos del país. Decae la inversión privada y se estanca relativamente el crecimiento del PBI, por lo que el régimen peronista actúa reduciendo la acción social del “Estado benefactor”.
De la crisis de 1952/53 nacerá la política desarrollista que muestra el tope del régimen populista cuando se hace difícil armonizar las necesidades de acumulación del capitalismo argentino con la distribución social; Entra en crisis el proyecto peronista, el golpe de 1955, dirigido por la oligarquía, no da tiempo para que la necesidad de acumulación y la función de legitimación se profundice y ratifica la crisis del sistema hegemónico estructurado por el sistema de representación de partidos, no logran reunir la capacidad de organizar y construir una dirección político- cultural para el conjunto social. De aquí en adelante ningún partido político y ningún régimen militar podrán lograr lo que logro el peronismo, el consenso de la sociedad.
La crisis de hegemonía en el interior de la clase dominante encuentra su raíz en la estructura económica, de manera que los conflictos producidos por el choque de los distintos proyectos económicos conforman la base material de la crisis. Por lo tanto nacerá la especificidad del desarrollo capitalista argentino, con sus limitaciones y distorsiones. La industria argentina ha estado vinculada al crecimiento de las exportaciones agrarias, cuando la industria ocupa un lugar importante en la economía, su expansión y crecimiento dependerá de la capacidad de importar del país; Por lo tanto el déficit en la balanza de pagos va a delimitar el desarrollo industrial, esto muestra el valor estratégico del agro sobre la actividad económica global del país.
LA CRISIS ECONÓMICA
La importancia del agro y la industria para la expansión económica están íntimamente relacionadas. El agro continúa siendo el único que provee divisas al país; las condiciones de la producción agropecuaria desempeñan un papel fundamental en la determinación interna de los salarios y de su poder adquisitivo.
Se remonta a la crisis mundial de 1930, Argentina era un país productor y exportador de bienes primarios, esta crisis afecta la división internacional del trabajo, modificándose el comercio de los productos agropecuarios; en consecuencia se origina una tendencia a la disminución de las exportaciones. El lento crecimiento de la actividad agropecuaria relacionado con la evolución económica de la región de la pampa húmeda. La crisis de esta región influye directamente en el nivel de las exportaciones.
El estancamiento del agro, en tanto causa estructural y de fondo reside en la propia estructura económica argentina en el tipo de relaciones sociales de producción; Por un lado, la concentración de grandes extensiones de tierra en pocas manos y por otro lado, porque esa alta concentración de las mejores tierras determina que adquiera una importancia fundamental la renta del suelo.
1º Etapa (1930- 1945) fácil del ISI definida por la modificación de la división internacional del trabajo, en consecuencia, la disminución de la capacidad de importar a la Argentina se comienza a producir localmente aquellas mercancías que normalmente se importaban; el tipo de importación que se sustituye es el de la producción textil, se procuraba evitar el déficit de la balanza comercial por la contracción del mercado externo.
2º Etapa (1945- 1958)compleja del ISI, con el crecimiento industrial se va aumentando rápidamente el empleo industrial y el crecimiento de la clase obrera. Con la llegada del peronismo en 1946 se fomenta la producción de bienes de consumo masivo. Por un lado, están las inversiones que realiza el ente estatal, y por el otro, el régimen populista define una clara política industrialista que comprende un tipo de cambio favorable a los requerimientos de importación de la industria, créditos orientados a impulsar esta actividad, una política proteccionista a través del aumento de los aranceles aduaneros, la creación del IAPI, etc. Este crecimiento se apoya en la ampliación del mercado interno, mediante la distribución del ingreso, la incorporación progresiva de mano de obra, el desarrollo de la industria liviana, el fortalecimiento del capital nacional y la mayor participación del Estado en la economía. A fines de la década del 40, el desarrollo industrial de industria liviana tocaba fondo, la crisis nacional de 1952 inicia la política desarrollista del peronismo. Por un lado, había que reducir la acción social del Estado benefactor y por otro reducir la participación de los asalariados en el ingreso nacional. La penetración masiva de capitales y la instalación de las firmas multinacionales se realizará a partir de 1958 durante el gobierno de Frondizi.
3º Etapa (1958- 1976)de desindustrialización. Frondizi, con su ley de inversiones extranjera de 1958, abre las puertas al capital extranjero. El hecho de que el capital extranjero invierta en este periodo directamente en la producción, no es más que la expresión de un modelo de acumulación definido por el capital internacional. Se trata de la internacionalización de las grandes firmas multinacionales, ingresa masivamente en la Argentina en dos momentos diferentes, en el primero se autorizan radicaciones esto constituye una gran ola de inversiones que lleva a la creación de nuevas industrias; en un segundo momento, se produce otra ola de inversiones donde se llega a la compra de paquetes accionarios existentes.
Por otra parte, la crisis de 1952 demanda el inicio de un profundo proceso de sustitución de trabajo por capital en la industria, la nueva estrategia consistió en una débil incorporación de mano de obra, en una redistribución regresiva del ingreso y en el desarrollo de una industria de bienes de capital e intermedio con sectores dinámicos. Podemos concluir que en la Argentina el sector industrial encuentra un conjunto de límites a su expansión, por un lado el carácter atrasado de la estructura industrial; por el otro lado la estrechez del mercado argentino limita la expansión de la industria, hay que valorar la dependencia de la industria de la capacidad de importar del país.
Para Aldo Ferrer el estancamiento del país se explica por la insuficiente capitalización de los sectores básicos de la economía, por el creciente atraso relativo del Interior del país y por la subsistencia de un régimen de tenencia de la tierra que obstaculiza el desarrollo rural. Para Oscar Braun, el crecimiento insuficiente de las exportaciones en los últimos años es la causa principal del lento crecimiento de la economía. Para Guillermo Flichman la renta del suelo es el problema fundamental. Para Moisés Ikonicoff se encuentra en la estrechez de la demanda interna y el déficit exterior, agregando las limitaciones en la oferta de las exportaciones y los problemas financieros externos, generando inflación.
Por nuestra parte se trata de un país que tiene una formación social dependiente que se articula con una economía y una estructura de clases determinadas. De manera que ha dado lugar a un desarrollo deformado y limitado en su economía, por la forma particular en que la argentina se integra en el mercado mundial. Otro rasgo es que ha necesitado de la intervención creciente del Estado para poder darle continuidad a su desarrollo, han sido firmas multinacionales las que instaladas en los bienes de consumo durable han influido decisivamente en el sistema económico, en definitiva, la dependencia externa de los bienes de capital e insumos, provoca una reproducción ampliada de capital insuficiente para alentar un crecimiento económico sostenido.
Después de la derrota de Rosas por Urquiza en la batalla de Caseros, son diez años de intento de reorganización nacional, la falta de unidad política divide al país en la Confederación, que nuclea al interior y el litoral por un lado y Buenos Aires por otro. Se caracteriza por una lucha permanente y enfrentamientos armados entre los caudillos del interior y el poder central de Buenos Aires; la Argentina de la época era la sumatoria de estados regionales autónomos. Hizo falta un nuevo enfrentamiento armado entre Bs. As. y el interior para poner fin a la reorganización nacional, las fuerzas del interior son derrotadas por Mitre en la batalla de Pavón, se inicia la fundación del Estado nacional en 1862, se impone en consecuencia una hegemonía y una subordinación.
Estructuración del Estado nacional 1862- 80:
Con la inserción en el mercado capitalista mundial, comienzan a generarse las condiciones materiales que harán posible el surgimiento de un Estado nacional y un mercado nacional; Por un lado el componente material de la nacionalidad, y por el otro el componente inmaterial, el rol del Estado ha sido el de dirigir la lucha por la unidad nacional y el de fomentar esa identidad colectiva. El Estado argentino ha generado clase social; La naturaleza de clase del Estado está otorgada por la inserción de la economía en el mercado mundial, y es a través de él que la burguesía agraria se organiza como clase dirigente. El estado nacional dejará su impronta en la constitución de las clases sociales y en el proceso de formación, evolución y modernización de la sociedad.
Es válido afirmar que se trata de una clase social llamada oligarquía o burguesía agraria, que se desarrolla en estrecha dependencia, de la intervención estatal, el carácter global que asume esta intervención es una intervención masiva en la vida pública, mediante los golpes de Estado.
A partir de 1935 la debilidad económica de la clase dominante a la par que aumenta la relación de dependencia con el capital extranjero, requiere mayor intervención en la producción y a nivel de la circulación, el aumento de las funciones económicas del Estado tiende a restablecer las condiciones de valorización de capital. Desde el punto de vista político institucional, los estratos más concentrados en la clase dominante, no les queda otro recurso que el golpe de Estado. El circulo vicioso de gobiernos civiles interrumpidos por gobiernos militares no ha sido todavía borrado de su historia política, el Estado participa en la formación de la naciente burguesía industrial de las décadas del 30 y 40 a través de una política de distribución de ingresos, pero actúa también como empresario, realizando diversas actividades productivas o bien controlando la producción de energía.
Período de 1880- 1930 Es un Estado liberal porque su acción principal es dejar en libertad al mercado, favorecer la libre empresa y el libre comercio. La especificidad pone en énfasis en el autonomismo del mercado que tiene que ponerse al servicio del desarrollo capitalista, el Estado no era tan sólo el árbitro y guardián del orden público, está activo en la formación de empresas privadas, principalmente de las extranjeras; en el caso de la inversión más importante de la época la construcción de las líneas férreas.
El Banco de Nación era un banco privado bajo tutela del Estado, su directorio estaba compuesto por los miembros más destacados de la oligarquía nativa y los importadores ingleses, alemanes y franceses. La preocupación de la oligarquía fue la de incorporar al inmigrante a la actividad económica pero no a la política. La Constitución Nacional de 1853 no estableció limitaciones para la emisión del sufragio. La primera Ley de elecciones de 1857 establecía el voto universal para los varones, el período de 1857 a 1912 se caracteriza por la exclusión política de la mayoría, de ella surgen lo que serán en el futuro los partidos políticos, en el año 1912 se estableció el voto obligatorio y universal, lo cual permitirá en 1916 el ascenso del radicalismo al gobierno. Algunos sectores marginados del sistema político actuaban o como grupos de presión o bien defendiendo intereses sectoriales al estar excluidos de la actividad política. Las elecciones de 1916 fueron las primeras en las que hubo una participación casi total de la población aunque el voto femenino estaba excluido. El régimen radical, no sale de la modalidad que caracteriza el Estado liberal aunque si bien produce una seria fisura en el interior de la república conservadora como la crisis de ese Estado liberal.
Período 1933- 1943 El surgimiento de la Argentina moderna, el crecimiento industrial, el crecimiento de la clase obrera y de la población urbana como las nuevas modalidades de intervención del Estado son definidas de esta década. La crisis del Estado liberal con su modelo de desarrollo económico está estrechamente vinculada a la gran depresión de 1929. Se inicia así un proceso de transformaciones económicas y sociales irreversibles íntimamente asociados a la organización del capitalismo mundial.
En 1935 nace el Estado intervencionista en el país, que define una política más clara en materia de obras públicas, y también en el control de la producción y precios, creándose las Juntas Reguladoras que adaptaron medidas concretas de reglamentación y contralor de las principales actividades agropecuarias del país, con la creación en 1935 del Banco central y del Instituto Movilizador de inversiones bancarias se establece un nuevo ordenamiento monetario, la caída de la moneda argentina crea necesidad de establecer el control de cambios como instrumento nuevo de la política económica. La intervención creciente del Estado se explica en sus orígenes por la función anticrisis. En estos otros años nace el Estado Moderno argentino como resultado de la crisis del Estado oligárquico, el intervencionismo estatal acontece fundamentalmente en el terreno económico y en beneficio de las clases poseedoras.
Período 1946- 1955 la llegada del gobierno peronista en 1946 se hará sobre la base de una nueva alianza de clases en el poder, la burguesía de apodera del aparato del Estado, definiendo y planificando por primera vez en la historia del país una verdadera política industrialista. La finalización de la segunda Guerra Mundial plantea a la Argentina el peligro de la disminución del volumen de las exportaciones, la ampliación del mercado interno, impide la recesión y se asegura el ritmo creciente de la producción industrial.
El populismo, será el régimen que modificará el patrón de distribución social, una nueva modalidad de intervención es la que se modificará permitiendo la formulación de una ecuación política capaz de articular una nueva relación entre el Estado y la sociedad. Su participación en la actividad económica por un lado financia el desarrollo industrial a través del traslado de ingresos del Estado agrícola al manufacturero; el IAPI por otra parte define una política de redistribución del ingreso a favor de los asalariados que mejora objetivamente su situación, incrementando notablemente los ingresos a través del llamado salario indiscreto. La especificidad del Estado populista consiste en ampliar la esfera económico- financiera y la social bajo asignaciones.
Período 1958- 1973 se puede hablar de un país semiindustrializado, se hace evidente la necesidad de reorientar el proceso de industrialización que inicia en 1958 como las grandes firmas multinacionales. Europa Occidental se encerraba en una política proteccionista, la creación del mercado común Europeo con su barrera aduanera impedía competir a los productos agrícolas extranjeros y con Inglaterra, fuera del mercado común; de alguna manera, Argentina quedaba afuera de la reestructuración del mercado internacional. Por otro lado la crisis económica de 1952, además un año de gran sequía en el país determina una emergencia económica y social.
La burguesía debe asociarse al capital extranjero y buscar la reinserción en las nuevas condiciones de la economía mundial. La necesidad de un plan de contención de salarios y los gastos públicos, el estado juega un rol fundamental en el apoyo y ampliación del esfuerzo industrializante como en la política de ingresos que reduce los costos salariales ese Estado pasa a ser el interlocutor local privilegiado de las grandes firmas; del resultado emergerá una nueva capa social tecnocrática, en el terreno político el peronismo después del derrocamiento y exilio de Perón el partido y el movimiento justicialista fueron proscriptos de la escena política argentina. La oligarquía y los sectores más reaccionarios de la clase dirigente no podrían pensar un retorno al funcionamiento pleno de la democracia sin imaginarse el triunfo peronista, la única salida de la encrucijada política era el recurso al estatuto prescriptivo. En la elección de 1951, la democracia no podrá de nuevo funcionar en plenitud.
El régimen Frondizista va a organizar el ingreso del capital extranjero, la represión al movimiento obrero y el plan Conintes, fueron componentes de este gobierno. El gobierno de Illía, constituye un intento moderador de la política desarrollista y modernizante de Frondizi. Esta experiencia pone en práctica una administración respetuosa de las libertades públicas y de los principios republicanos, dificultando a la clase política la tarea de estructuración de un sistema político hegemónico acorde con la etapa de acumulación de capital.
SARA LIFSZYC. EL CAPITALISMO. HACIA UNA REDEFINICIÓN.
El capitalismo se considera como un sistema cuyo funcionamiento está regido por leyes del mercado, basado en la libre empresa y en la iniciativa, también se categoriza como un fenómeno presente en las sociedades urbanas e industrializadas, en las que el poder político y el ejercicio de la dominación se encuentran centralizando en un estado nacional; se consideran capitalistas las sociedades modernas en las que predominan las libertades individuales, estos significados son parciales, para Marx el capitalismo es un fenómeno integral caracterizado por un tipo de organización de la sociedad en su conjunto, en el que las relaciones sociales asumen la forma de relaciones entre los propietarios y no propietarios de los medios de trabajo.
EL CAPITALISMO UN CONCEPTO Y UN DESARROLLO HISTÓRICO.
El análisis de Marx del capitalismo comienza por la mercancía por la forma concreta que adopta el resultado del trabajo y al mismo tiempo expresa las relaciones sociales de producción que esa clase de trabajo requiere; estas categorías constituyen la base de la sociedad, la estructura sobre la cual se va configurando la otra dimensión social, la superestructura jurídica, política e ideológica. En la sociedad capitalista las relaciones de producción adaptan la forma de relaciones entre propietarios aparentemente iguales, que intercambian libremente sus productos. La aparición del trabajador libre como categoría ha sido el resultado de un proceso histórico, la separación del productor de su producto y de sus instrumentos comienza en el mundo feudal.
Entre los siglos XII y XIV el productor delegará la venta de sus productos en el mercader, aprovechando las diferencias de precios entre la compra y la venta para obtener sus ganancias y como forma de incrementar sus beneficios, extenderá los límites hacia lugares cada vez más lejanos. A partir del siglo XV las innovaciones científicas, los descubrimientos de territorios, la circunnavegación, la colonización y los mercados, dieron al comercio un nuevo impulso. La manufactura vino a ocupar el lugar del artesanado, que no podía abastecer la demanda de los nuevos mercados extranjeros, la introducción de la máquina a vapor revolucionará la producción y la gran industria sustituirá a la manufactura. Los pequeños productores independentistas no podrán resistir la competencia del capital y los transformará en obreros industriales y la economía del mercado comenzará a transitar hacia una más amplia y desarrollada, la economía capitalista.
Entre los siglos XVII y XIX culminó con dos grandes revoluciones que dieron sustento político, jurídico y tecnológico a la consolidación del capitalismo moderno. La revolución Francesa en el siglo XVII, porque liberó a los individuos de las relaciones de propiedad personal estableciendo la libertad y la igualdad de las personas. La revolución industrial en el siglo XIX con la adopción de la nueva tecnología.
EL VALOR DEL TRABAJO Y EL TRABAJO COMO VALOR
El trabajo es la actividad que realiza el ser humano con la ayuda de instrumentos- herramientas para transformar en un tiempo y espacio un objeto en producto. Cuando los productos son consumidos o usados por su propio productor se le da un valor de uso, pero cuando lo producido es vendido en el mercado, el producto además de un valor de uso contiene el valor de cambio, el producto adopta la forma de mercancía. El trabajador vendió al propietario de los medios de producción su fuerza de trabajo y éste la compro por su valor equivalente en dinero, pero a lo largo de su jornada produce un valor superior al que ha sido comprado. La diferencia entre el valor que ha producido y el valor por el cual fue comprado es la ganancia del propietario de los medios de producción. Este recupera el capital invertido más el plus de ganancia que será nuevamente invertido, para continuar y ampliar el ciclo productivo y reproductivo; el capitalismo se caracteriza por la apropiación del plus- valor que es el motor de su funcionamiento, la continuidad del capitalismo se centra en el aumento permanente de la productividad del trabajo, con el fin de obtener cada vez mayor ganancia. Si bien la creación del plus- valor se inicia en la producción culmina en el mercado con la venta de la mercancía, cuando se transforma en capital. La acumulación de capital provendrá del trabajo-realizado-no-remunerado. El valor del trabajador se calcula como la cantidad de medios de vida suficientes para volver a trabajar. Aristóteles descubrió en la expresión en el valor de la mercancía una relación de igualdad.
La expansión e integración constante del mercado exterior en una gran unidad económica más el creciente aumento de la productividad del trabajo, por la permanente innovación tecnológica, son los mecanismos que organizan su continuidad. Considerando que la sociedad actual es una sociedad capitalista, y teniendo en cuenta las transformaciones que en todos los planos de la vida social se están desarrollando desde hacía varias décadas algunos autores sostienen que estos cambios, propios del capitalismo, corresponden a su nueva etapa, la globalizadora, para otros autores son el fin del capitalismo.
Debido a la mayor automatización es posible inferir que está desapareciendo un tipo de trabajo, el asalariado creador de valores de cambio propio del capitalismo industrial. Podría ser el fin en tanto actividad como forma de hacer o como forma de concebir el trabajo pero no es el fin del trabajo concebido como potencialidad creadora y transformadora propio del ser humano; el trabajo como tal seguirá persistiendo. Por más especulaciones que se hagan es prematuro prever el desenlace de este proceso.
SERGIO NICANOFF. EL ESTADO MODERNO. PRIMERA PARTE.
1) EL NACIMIENTO DEL ESTADO MODERNO
A partir del siglo XVI en Europa se comenzaron a sentar las bases del estado moderno. La sociedad feudal se caracterizaba por la estructura de dominación social feudal piramidal y fragmentada. Con el tiempo se empieza a centralizar el poder político y los ejércitos (dominación por coerción). Así nace el Estado absolutista, mientras que se mantiene la estructura feudal y aparecen las relaciones sociales de producción basadas en el capital. La revolución francesa y la industrial inglesa inauguraron la era del despliegue pleno de la sociedad capitalista.
2) EL ESTADO MODERNO CAPITALISTA
Sociedad capitalista, la relación entre empleadores y trabajadores se representa bajo una relación entre hombres libres e iguales y de derechos formales. Clase dominante es aquella que a partir del control de determinados medios de producción y del despliegue de su poder militar, político y cultural se garantiza la apropiación mayoritaria para su clase de la plus- valía. El Estado moderno es la forma política que adquiere la dominación en la sociedad capitalista, de esa manera el conflicto en las sociedades es inherente al tipo de sociedad estructurada en clases diferentes que disputan por la riqueza social; El Estado es el garante de la relación global del capital y esa relación implica la relación capitalistas- trabajadores, debe garantizar el beneficio, la ganancia de capital pero también ciertos derechos de los trabajadores para lograr que el sistema siga funcionando.
La necesidad de construir la legitimidad estatal requiere una serie de acciones materiales y simbólicas destinadas a las clases populares. El Estado está atravesado por ese conflicto, por las relaciones de fuerzas existentes entre las clases sociales en pugna por el reparto del excedente.
3) LAS DIMENSIONES DEL ESTADO
Compuesto por instituciones que posibilitan el uso legítimo de la coerción, de la extracción de recursos cohesión entre gobernantes y gobernados. Las instituciones funcionan gestionado por una tecnoburocracia que las administra.
El poder estatal y el funcionamiento del conjunto del sistema requiere de una serie de creencias de percepciones, de concepciones, de ideas que se interiorizan en cada individuo por medio de complejos procesos sociales que buscan lograr el acatamiento consensual de la población de determinadas acciones políticas y situaciones.
Ningún sistema de dominación puede descansar en el ejercicio de la violencia, necesita consenso de la población. Concepto de hegemonía, consiste en una capacidad político cultural de una clase o grupo que permite convencer a la mayoría de la población que los intereses de esa clase son intereses del conjunto de toda sociedad. El Estado como fórmula: Estado = sociedad política + sociedad civil, esto es hegemonía revestida de coerción. Una clase se torna dirigente cuando conduce y no solo impone o reprime. Una clase dominante se vuelve dirigente cuando supera su mirada corporativa, para incorporar la capacidad de otorgar concesiones materiales a las clases sobre las que ejerce la hegemonía. Cuando se produce una crisis del sistema en su máximo grado de intensidad se vuelve una crisis orgánica.
Todo el entramado institucional, la dimensión material e ideal, ideas y cosmovisiones, en la sociedad son fruto de luchas entre clases sociales diferentes. De acuerdo a la correlación de fuerzas resultante se condensan ideas fuerza e instituciones son fruto de procesos históricos.
LA CRISIS ORGÁNICA
Cuando se habla de una crisis de hegemonía se hace referencia a una situación donde la clase dominante no logra recrear las condiciones para lograr que su dominio se basa en condiciones de legitimidad y consenso mayoritario, dominan pero no son dirigentes. Las clases subalternas, la dinámica de la conflictividad se traslada a un enfrentamiento más explícito entre las clases dominadas que ven amenazada la totalidad del sistema de dominación que han construido y es el trasfondo que posibilita el desarrollo de actores sociales que impugnan el orden establecido.
UNA CRÍTICA A CIERTAS MIRADAS SOBRE EL ESTADO.
En primer lugar descartamos las perspectivas que ubican al Estado como portador de una supuesta neutralidad y como instancia situada al margen y por arriba de la sociedad, en segundo lugar no hay que confundir Estado y gobierno, en tercer lugar quienes conciben al Estado como un aparato de instituciones dejan de lado su dimensión ideal. Finalmente un problema de abordaje se presenta con la dupla Estado- Nación.
El problema radica en que los Estados modernos ejercen su soberanía sobre una población que habita un territorio, esto significa que los estados nación modernos son una experiencia muy específica.
Para Aníbal Quijano, se trata de sociedades políticamente organizadas como estado nación.
Para Oscar Oszlak, los atributos que hacen que un Estado sea Estado requiere la capacidad de difundir e internalizar en la población una identidad colectiva, así el Estado construye una identidad nacional, que es un elemento central de la acción ubicada en el plano de lo ideal. La construcción de la nación también requiere de un plano material vinculado a la integración de la actividad económica dentro de un espacio territorialmente delimitado, de esa manera es necesario diferenciar las categorías Estado y nación.
SEGUNDA PARTE
1) ESTADOS LATINOAMERICANOS
La constitución de los Estados latino americanos siguió en la conquista de américa y la constitución de un sistema mundo, se caracteriza por el desarrollo del sistema capitalista, implica la existencia de países centrales que explotan al resto de los países, países semiperiféricos que son explotados pero a su vez explotan a otros y países, países periféricos son dominados sin explotar a otros, esa economía se articula y se sostiene conectada con relaciones sociales, políticas y culturales.
Para Quijano, la conquista de américa se basó en el genocidio de indios; esto fue pieza determinante de la acumulación originaria, remite a cuando se produce el despojo de millones de productores directos del control de sus medios de producción, los que se ven empujados hacia vender su fuerza de trabajo para poder sobrevivir. Complementario con ese mecanismo , el eurocentrismo eligió un nuevo patrón en esa perspectiva Europa es ubicada como el punto máximo de la civilización humana, su lugar de llegada y de evolución más acabada.
Progreso, el predominio de los patrones eurocéntricos se derramó sobre los pensamientos emancipadores opuestos a las burguesías Europeas de la mano del crecimiento de la clase obrera. En el caso del anarquismo el rechazo de muchas de sus vertientes al mundo cultural y simbólico de las clases populares no obreras, tuvo episodios tremendos en Latinoamérica. El ciclo de revoluciones independentistas rompió con el colonialismo pero no con la colonialidad del poder.
Las clases criollas mantuvieron la sociedad colonial heredada sin modificaciones, la colonialidad del poder se mantuvo viva como sostén de desigualdad social. En las últimas décadas del siglo XIX, la transformación del sistema capitalista que ingresaba en su fase imperialista configura la división internacional del trabajo, la categoría de imperialismo refiere a procesos expansivos de ocupación y de control de algunos Estados sobre otros.
En el siglo XIX se termina de configurar la división internacional del trabajo, en la forma que postuló el eurocentrismo, cada país debía especializarse en producir aquello que hacía mejor y más barato para venderlo en el mercado mundial y adquirir el resto. Se recomendaba el abandono de las protecciones aduaneras. Latinoamérica ingresa al esquema como productora de alimentos, materia prima e importadora de manufacturas. Con esto, los países industrializados se benefician del nuevo orden mundial aumentando sus riquezas, mientras que los países latinoamericanos aumentan su dependencia debido al intercambio desigual. Teoría de la dependencia se trata de una relación de subordinación entre naciones independientes en cuyo marco las relaciones de producción de las naciones subordinadas son modificadas o recreadas para asegurar la reproducción ampliada de la dependencia.
2) LA CONSTITUCIÓN DEL ESTADO ARGENTINO Y EL ESTADO OLIGÁRQUICO
En américa latina la consolidación de los Estado Nación fue posterior a las revoluciones independentistas de principios del siglo XIX ciertos niveles de centralización se dieron en la región, pero fueron débiles, efímeras y no lograron cuajar en una instancia del poder del Estado Moderno. El predominio de Rosas en nuestro país expresa el peso de los grandes propietarios que tenían como preocupación asegurar las salidas de sus bienes exportables y mantener el control de los recursos aduaneros y el puerto más que lograr una unificación nacional.
La caída de Rosas estuvo lejos de generar condiciones para la centralización, se reeditó el conflicto entre una Buenos Aires que pretendía continuar siendo hegemónica frente a una Confederación del resto de las provincias lideradas por Urquiza, la discusión era sobre el peso de cada una de ellas en el Estado nacional y el reclamo para asegurar la libre navegación de los ríos, con la aparición de la división internacional del trabajo la mayor demanda de materias primas y alimentos aseguraba un mercado externo en expansión; la existencia de excedentes financieros en los países centrales garantizaban capitales dispuestos a invertir en la periferia. Estas transformaciones aceleraron la preocupación de las clases dominantes locales, quienes controlaron la producción de los bienes primarios para la exportación y se aliaron con los capitales ingleses tuvieron los mayores beneficios. El proceso se dará durante los gobiernos de Mitre, Sarmiento, Avellaneda y Roca.
Por medio de la modalidad represiva se consolidó un ejército nacional para garantizar esa superioridad de los gobiernos. Aprovechando la velocidad de despliegue que les daba la creciente expansión de las líneas ferroviarias, las fuerzas militares sofocaron a sangre y fuego diversos levantamientos populares en el interior, en paralelo libraron una guerra internacional aliados con Brasil y Uruguay contra el Paraguay, el ejército nacional llevó adelante la Campaña del Desierto, la esclavitud fue restaurada en esos días, en nombre del progreso y de la civilización contra la barbarie, las tierras resultante de la expulsión indígena engrosaron rápidamente, fue a través de esos pasos que se consolidó el Estado legítimo de la coerción.
La modalidad cooptativa buscó negociar e integrar a las oligarquías provinciales, puso en marcha un proceso fundamental dado que un estado nacional capitalista requiere de una clase dominante nacional que se piense a sí misma en términos no locales, ese proceso no fue lineal sino, contó con variados momentos de crisis.
Roca fundó el PAN que actuó como representante de los intereses de todas las oligarquías provinciales, al mismo tiempo montó un régimen político, el voto cantado y no obligatorio dentro de la propia clase dirigente, tenía como objetivo resguardar a las clases dominantes para que mantuvieran el control estricto del gobierno y del Estado. La modalidad material ubicó al Estado como articulador de la llegada de inmigrantes de la atracción de capitales extranjeros y de garantizar la transferencia de tierras a manos de la burguesía agraria.
En la esfera material el Estado jugó un rol activo en la formación de las empresas privadas, generaba condiciones monopólicas y desiguales de los mercados, para una vez garantizado esto “retirarse” y dejar el escenario para el libre juego de la oferta y la demanda. El Estado fue concebido como refugio para cubrir las debilidades políticas y económicas de la clase dominante. Finalmente, la modalidad ideológica permitió a la clase dominante generar instrumentos para una construcción hegemónica sobre la población.
La Ley que establecía la educación pública, gratuita, laica y obligatoria fue central para conseguir la nacionalización de los inmigrantes. De la misma manera el servicio militar obligatorio, se tornó un dispositivo esencial en el disciplinamiento de los varones jóvenes de las clases populares. El recorrido de la hegemonía oligárquica no estuvo exento de resistencias, el modelo agroexportador plasmó condiciones sociales para la aparición de nuevas clases que desarrollaron conflictos. La emergencia de fracciones de clase media urbana y rural generó la base social para la aparición de la UCR. Exigió nuevas reformas que posibilitaran un acceso de las clases medias a la educación y el empleo público, su represión fue tal que se sancionó la Ley Saenz Peña de 1912 que estableció el voto secreto obligatorio universal, permitió el triunfo de Yrigoyen iniciando un ciclo de gobiernos radicales hasta el Golpe de 1930, mantuvieron sin cambios los elementos celulares y determinantes del modelo.
Las clases medias y sectores minoritarios de grandes propietarios apoyaban al radicalismo, pugnaban por ser parte del modelo y por no modificarlo ni por erradicarlo; el movimiento obrero en el país formó los sindicatos por oficio, por medio de la huelga y la movilización, se fue construyendo un repertorio de lucha de clases populares, las ideologías anarquista y socialista desarrollaron una organización de la clase trabajadora de la época, el anarquismo se tornó un desafío para el poder, la respuesta desde el Estado combinó la represión con la profundización de estrategias de nacionalización de la población, en un giro ideológico se desarrolló un discurso para ver en los trabajadores extranjeros un peligro para el sistema.
La perspectiva del peligro rojo y la conspiración revolucionaria a la que se “enfrentaba” el país llegaba a que cualquier demanda obrera se reprimiera. Los limites estructurales del modelo se manifestaron cuando al comienzo de una crisis mundial del sistema capitalista provocaron el derrumbe de la economía y evidenciaron cuanto dependía de factores externos que no controlaba, la primera respuesta de la clase dominante consistió en derribar el segundo gobierno de Yrigoyen, iniciando los golpes de Estado de la historia Argentina.
3) ESTADO Y MODELO AGROEXPORTADOR
Las visiones de las ciencias sociales exaltan el crecimiento del PBI, la expansión del comercio exterior; la modernización económica y el progreso serían el corolario de este proceso. El deterioro de la Argentina fue posterior, fruto del abandono de esta senda de desarrollo, el conflicto social es enfocado como una problemática secundaria, el modelo permitió posibilidades de ascenso social. El Estado se mostró eficaz en la resolución de las demandas de apertura política, críticas:
En primer lugar el Estado resultante de estos procesos y la nueva estructura económica y social que este contribuyo a crear se edificaron sobre la base de genocidios, funcionales al poder dominante, lo mismo se puede afirmar para el tratamiento del conflicto social entre los trabajadores, el capital y el Estado.
En segundo lugar la economía agroexportadora sometió el país a variables externas y construyó un mercado interno y una industria totalmente subordinados al sector exportador. El control de áreas estratégicas por parte del capital extranjero marcó un proceso de modernización.
En tercer lugar la concentración de la tierra en pocas manos bajo la propiedad latifundista y el consiguiente control de una minoría social sobre la producción y distribución de alimentos se terminó de edificar.
Finalmente si todo Estado articula la dominación y genera condiciones para hacerla posible al ser la Argentina un país capitalista dependiente de desarrollo desigual y combinado eso se manifiesta e interioriza en el tipo de estructura estatal dependiente del mercado mundial y la naturaleza desigual del sistema mundo.
Preguntas y Respuestas entre Usuarios: