Altillo.com > Exámenes > UBA - Económicas > Historia Económica Argentina
1) En el transcurso de los años veinte se consolidan cambios importantes a partir de la consolidación del esquema trilateral entre ARG.-GB-EE.UU., en qué consistía dicha esquema y cuáles son sus limitaciones.
Según el autor Fodor-OConnell el funcionamiento del triángulo comercial era el siguiente.
Desde el punto de vista del triángulo comercial Gran Bretaña proveía productos alimenticios al resto del mundo, así como también los medios para transportarlos desde tierras lejanas (ferrocarriles). Esta posición de Gran Bretaña fue el motor para la expansión agrícola y ganadera de Argentina. Debido a esto, Gran Bretaña se convirtió en el mayor mercado mundial de productos alimenticios. Ellos se convirtieron de esta manera en nuestro principal cliente porque Argentina tenía un crecimiento de las exportaciones de carnes y cereales gracias a que Gran Bretaña nos compraba.
Por su parte, Estados Unidos se convirtió en exportador de manufacturas cuya producción estaba destinada para el mercado argentino. En primer lugar, debido a las similitudes geográficas y en segundo lugar debido a que EEUU había logrado una ventaja en la producción de maquinaria para el reemplazo de mano de obra. EEUU también era productor de la misma clase de agricultura que Argentina exportaba. Debido a esto, las exportaciones de Argentina a EEUU no tuvieron la misma importancia que sus importaciones desde ese país, se importaba más de lo que se exportaba a EEUU.
El nexo Gran Bretaña-Argentina no fue reemplazado por un nuevo bilateralismo Estados Unidos-Argentina sino por un triángulo comercial entre los 3 países.
A lo largo de este triángulo las corrientes comerciales tendieron a tener un sentido unidireccional. Desde el lado argentino a lo largo de un lado los productos se dirigían hacia Gran Bretaña mientras que a lo largo del otro lado se dirigían desde EEUU hacia la Argentina. En el caso de ambos lados las corrientes de sentido inverso eran de menor magnitud.
Desde el punto de vista del triángulo naviero el comercio unilateral de Argentina implicaba embarques en un solo sentido.
Como resultado de la unilateralidad de los embarques los exportadores norteamericanos se encontraban en desventaja frente a los exportadores británicos. El transporte marítimo hacia y desde la Argentina contribuía de otra manera a compensar el déficit comercial de Gran Bretaña. Gran parte de esa actividad eran compañías británicas cuyas ganancias podían contraponerse al exceso de importaciones de Gran Bretaña.
Desde el punto de vista de las transacciones de capital se podía decir que fueron las diferencias en la capacidad de exportar capitales la que llevó a los diferentes resultados de las exportaciones.
EEUU se había convertido en inversor de Argentina llegando a ser los inversores principales después de la guerra. El mercado de capitales de Londres quedó agotado como consecuencia de problemas de balanza de pagos de Gran Bretaña. Sin embargo, las tendencias de capital británico en la Argentina siguieron siendo importantes hasta fines de la segunda guerra mundial. Esta tendencia, como cualquier acreedor que presta dinero, generó una corriente de intereses. Para la Argentina la corriente de servicios financieros hacia el exterior era mucho mayor que la de capital recibido desde el exterior. Es posible que estas empresas hayan contribuido al desarrollo de Argentina, pero no contribuyeron nada de capital durante la primera mitad del siglo XX. La contribución total fue de EEUU. Mientras nuevos capitales de EEUU iban a Buenos Aires y a Londres, los servicios financieros se dirigían de Buenos Aires a Gran Bretaña. Estas corrientes unidireccionales constituían el triángulo de transacciones de capital Argentina-Gran Bretaña-Estados Unidos.
El funcionamiento del sistema triangular fue el siguiente. En el caso de Gran Bretaña las corrientes de capital proveniente de Argentina le permitieron saldar gran parte de su balanza comercial desfavorable. En el caso de EEUU la corriente de capital hacia Argentina representó un aporte para compensar su excedente comercial.
Argentina estaba ubicada en el Atlántico, entre EEUU y Gran Bretaña, una zona estratégica para que se lleve a cabo este triángulo. Por ende, el funcionamiento del triángulo argentino dependía de 2 factores no excluyentes. O Gran Bretaña tenía la capacidad de mantener un déficit comercial con Argentina mayor que las remesas que recibía de ella como acreedor y/o EEUU tenía la capacidad de mantener exportaciones de capital hacia Argentina. Luego, ninguno de estos 2 factores se mantendría de pie con la llegada de las próximas crisis.
En cuanto a las limitaciones de este sistema podemos decir que no era posible invertir los sentidos de los lados del triángulo comercial desde el punto de vista argentino. No era posible la transformación de las corrientes unidireccionales en corrientes de ambos sentidos para ninguno de los 2 lados argentinos del triángulo. A lo largo del lado Argentina-EEUU debido a la resistencia de ellos en aceptar nuestros productos competitivos con su propia producción y a lo largo del lado Argentina-Gran Bretaña debido al fracaso de la industria británica en satisfacer las nuevas demandas del mercado argentino.
El triángulo Argentina-Gran Bretaña-Estados Unidos no implicaba una compensación trilateral. Al contrario, la Argentina al vender a Gran Bretaña y comprar en Estados Unidos implicaba un déficit comercial para Gran Bretaña con Estados Unidos.
Este triángulo tuvo otra limitación debido a la “relación especial” de Gran Bretaña con Argentina.
La relación especial entre Gran Bretaña y Argentina consistía en lo siguiente. Gran Bretaña era el principal cliente de Argentina y esto tenía su fundamento en las grandes compras de carne, trigo y maíz. La dependencia argentina del mercado británico era enorme en el caso de la carne, especialmente carne enfriada.
De la prosperidad de la industria de la carne enfriada dependían empresas y de un sector clave. El procesamiento y el transporte de la carne estaban controlados por firmas navieras y de frigoríficos extranjeros. Éstos habían formado un “pool” para distribuirse entre sí las cuotas del mercado británico de carne vacuna refrigerada. Éstos poseían la clave de este mercado.
Los frigoríficos reforzaron el alto grado de concentración de la producción. Su política era comprar a los productores para asegurar un abastecimiento de novillos de alta calidad para ser exportados como carne enfriada. De esta manera los productores más grandes se especializaron en este rubro que daba precios más altos que los de mercado abierto. Estos productores entonces formaron con los frigoríficos una sociedad lucrativa importante. Al mismo tiempo se comprometían con un producto que debido a su precio y su gusto tenía mercado sólo en Gran Bretaña.
El “pool” permitía preservar las ganancias de los frigoríficos trasladando a los productores cualquier caída de los precios. No había dudas sobre quien era el socio principal en el comercio de exportación de carne. Como consecuencia de esta dependencia, los frigoríficos y los productores de ganado compartían un interés en común el cual era la preservación del mercado británico, del cual dependía toda su prosperidad.
La dependencia de Argentina con respecto a Gran Bretaña era la dependencia de los grandes productores de ganado del mercado de carnes británico.
Algunos de los sectores británicos afectados por la dependencia del abastecimiento de carne argentina fueron los siguientes. La carne enfriada se había convertido en un artículo esencial en la dieta de la clase trabajadora británica entonces se podía esperar que el Partido Laboralista apoyen medidas favorables para los productores argentinos. Lo mismo hubiese pasado si estuviera el partido liberalista.
La “relación especial” entre Gran Bretaña y Argentina pasó a depender de que el Partido Liberal o el Partido Laboralista estuvieran en el gobierno.
El segundo aspecto de la “relación especial” es la inversión de capital inglés en préstamos públicos, ferrocarriles y otros servicios públicos, bancos, seguros. Las tarifas de transporte y los salarios de los obreros ferroviarios eran las fuerzas principales que determinaban las ganancias en pesos, mientras que el valor del peso determinaba su equivalente en libras.
Las tarifas afectaban directamente los ingresos de los productores rurales. Las compañías ferroviarias estaban en conflicto con ellos y con los obreros. En el caso de las tarifas las compañías decidieron estar a favor de los ganaderos para no tener problemas con los grandes productores. En el caso de los obreros las compañías se debilitarían a medida que surgen los sindicatos. El valor del peso también era otro tema de conflicto ya que las compañías se veían favorecidas con la valorización del peso, pero los ingresos de los productores aumentaban con la devaluación del peso.
Las quejas de los argentinos no solo eran por la ganancia de éstos sino porque también los precios de todos los productos ferroviarios eran más altos que los de Estados Unidos pero las compañías británicas tenían la política de comprar siempre en Gran Bretaña ya que existían vínculos entre los dueños de los ferrocarriles británicos y los dueños de las compañías de carbón y material ferroviario. De esta manera mucho de los productos británicos tenían un privilegio en el mercado porque no tenían competencia, era una especie de monopolio.
El comercio entre Gran Bretaña y Argentina se practicaba bajo la comercialización de compañías que operaban en los 2 países.
Desde el punto de vista argentino la “relación especial” era una cuestión de carne enfriada junto con los intereses de las firmas a ellas vinculadas y de la oligarquía terrateniente.
Desde el punto de vista británico se trataba de los ferrocarriles y su poder financiero y que acaparaba todo el mercado, sin competencia.
2) La crisis de 1929, marco las políticas económicas de los años treinta. ¿Qué transformaciones se operaron en dichos años y cómo dichas transformaciones implican, incluso con su carácter acotado, cambios a nivel estructural?
Según el autor OConnell la política económica durante la Depresión fue la siguiente.
La vulnerabilidad externa de la economía argentina determinaba límites a la autonomía de la política económica. Ya no podían ampliarse las exportaciones y los mercados de capital estaban cerrados. Había 2 opciones, o reducir las importaciones o dejar de pagar la deuda.
Sin embargo, el gobierno e intereses británicos definieron una estrategia para salvar los problemas del pago de la deuda externa. Tal estrategia aseguraba la repatriación a Gran Bretaña de las ganancias sobre inversiones en el exterior y se pretendía que parte de sus industrias pudiesen seguir colocando su producción en otros mercados. Las dificultades de pagos externos era lo central a solucionar.
En cuanto a política económica el régimen de cambios transitó desde la inconvertibilidad hasta la instauración del control de cambios en diferentes etapas.
La primera empieza en 1931, la segunda en 1933 implicaba un permiso previo de cambio que después de 1938 se hizo obligatorio para las importaciones. Además, en 1933 se establecen 2 mercados de cambio, uno oficial y otro libre y dentro del oficial uno “comprador” y otro “vendedor”. Los ingresos de divisas de estos mercados provenían de las exportaciones no tradicionales, la importación de capitales, las ganancias por fletes.
En 1939 se eliminó el mercado libre para transacciones de mercadería. Como consecuencia este mercado no controlado llevaba a la liberalización total de los cambios extranjeros. Su funcionamiento podía impedir el aumento de las importaciones.
Los que estaban a cargo del control de cambios fijaron prioridades desde 2 puntos de vista. Por un lado, los servicios de la deuda pública, las importaciones básicas, y las remesas de ganancias de los servicios públicos cuyos dueños eran empresas extranjeras tenían prioridad frente a las otras demandas. Al comenzar el control de cambios se obligaba a las grandes cerealeras la entrega de sus divisas ya que se había observado que implicaba una retención especulativa de ingreso por exportación.
Por otro lado, las divisas se adjudicaban según el país que debía recibir el pago. De esta manera, con el control de cambios, se aseguraban reducir las importaciones y por lo tanto fomentar de alguna manera la industrialización del país.
El control de cambios sirvió para mantener el tipo de cambio a un nivel más bajo del que hubiera alcanzado en un mercado libre, haciendo más competitiva las importaciones frente a la producción interna.
Hay un conflicto de intereses entre exportadores y los acreedores según el nivel del tipo de cambio, a algunos sectores les favorecía un tipo de cambio alto, y a otros los beneficiaba un tipo de cambio bajo. Un tipo de cambio alto favorecía a los exportadores y perjudicaba a aquellos que querían remitir beneficios al exterior.
A saber, los productos que se importaban de Gran Bretaña a un tipo de cambio más bajo eran aquellos para los cuales Argentina ofrecía mejores perspectivas para su industrialización.
En cuanto a la política comercial hubo incremento de los aranceles y el hecho más importante fue el bilateralismo que se vio reflejado en el pacto Roca-Runciman. Una de las mayores clausulas preveía la adjudicación completa de divisas originadas en la compra de productos argentinos. Gran Bretaña fue la que comenzó a aplicar una serie de tratados que involucraban preferencias especiales, usa su poder de comprador importante para asegurarse el pago de las deudas de capital y de intercambio.
No puede decirse que el bilateralismo fue como tal, solo beneficiaba a Gran Bretaña. Argentina, para seguir exportando, tenía que comprar bienes de consumo que ella misma podía producir a fin de adquirir a cambio bienes de capital y otras importaciones esenciales.
En cuanto a la política fiscal, ésta se volvió restrictiva. Se crearon nuevos gravámenes o incrementaron los que ya existían, sumado a esto también se redujeron los gastos.
En cuanto al ámbito monetario se creó el Banco Central el cual tenía la facultad de intervenir en las operaciones de mercado abierto. Ante el ingreso de dinero especulativo el Banco Central vendía títulos para absorber parte de la expansión que estos fondos inducían.
Argentina tuvo que cambiar algunos aspectos para adecuarse al nuevo orden internacional. Por un lado, el ritmo de crecimiento que había caracterizado el periodo anterior de auge, esta vez fue de crecimiento negativo.
Por otro lado, las exportaciones perdieron importancia debido a que Argentina se iba cerrando al mundo (es el fin del modelo agroexportador) las importaciones también se redujeron.
El capital extranjero dejó de invertir. Dentro de las exportaciones hubo un desplazamiento de los cereales y lino hacia la carne. También hubo desplazamiento hacia el engorde de ganado más refinado. Como consecuencia de la agricultura hacia el engorde generó la expulsión de la mano de obra.
En cuanto al crecimiento industrial fue desparejo. Los sectores de mayor crecimiento fueron refinería de petróleo y el de artículos de goma por dar algún ejemplo.
El análisis de la política económica durante la Depresión demuestra la falta de autonomía y su vulnerabilidad a la evolución y necesidad de Gran Bretaña.
La economía argentina se cerró al mundo, llegó el fin del modelo agroexportador y la industria aumentó su participación en el ingreso nacional, comienza el proceso de industrialización por sustitución de importaciones y además se crearon organismos del Estado (ej Banco Central) para atender estas necesidades económicas y tanto el ingreso como la actividad industrial crecieron lentamente.
3) ¿Cuáles son los rasgos sobresalientes del Estado Nación que termina por delimitarse en 1880 (tenga en cuenta rasgos políticos, estructura social, elementos dinámicos de la economía, los sectores que son de alguna forma los que se encuentran a la vanguardia económica)? Señale cuando y porque luego de dicha fecha se produce la primer gran crisis de fines de siglo en la Argentina, describa sus rasgos centrales.
Según Cortes Conde este periodo desde 1880 a 1890 fue el siguiente. Durante 1880 el hecho más significativo fue el incremento del número de cabezas de ganado y la elaboración de productos basados en la ganadería, pero para describir ello es necesario analizar los factores de producción, a saber, tierra, mano de obra y capital.
- Tierra : el crecimiento económico de Argentina entre 1870-1914 fue resultado de cambios en el comercio internacional. Hubo que hacer frente a numerosos obstáculos y fue necesario hacer ajustes para que desde el lado de la oferta fuera posible responder la demanda mundial. Era necesario reorganizar la producción con el objeto de obtener más productos básicos. Había que explotar recursos productivos que hasta entonces no se habían utilizado.
En Argentina abundaba la tierra, pero no se habían colonizado las grandes extensiones de territorio.
Durante la década de 1870 se tuvo que ampliar la frontera para dar lugar a los crecientes rebaños de ovejas y facilitar la ubicación en un nuevo lugar del ganado vacuno criollo.
El crecimiento de las existencias produjo el agotamiento de los pastos. Había necesidad de buscar pasto nuevo. Esta expansión del ganado vacuno no se debió a la demanda internacional si no que fue porque los precios de las exportaciones bajaron y con ello también bajo la rentabilidad. Para volver a tener mayor ganancia había que producir más. La única forma de producir más era con la incorporación de nuevas tierras a un bajo costo a fin de incrementar las existencias.
La incorporación de nuevas tierras hizo incrementar los rebaños y expandir la producción a un bajo costo compensando de esa manera la baja de los precios y mantener la rentabilidad de la cría de ganado.
Lo que generó expansión no fue la subida de precios, sino el hecho de disponer de nuevas tierras y la necesidad de reducir costos. También esta expansión territorial fue gracias a una mejora de la actividad económica. La expansión de la agricultura a fines de 1880 estuvo vinculada al crecimiento de la red ferroviaria.
Las características regionales, pero sobre todo la proximidad de los mercados determinó los patrones de utilización de la tierra en diferentes momentos y en distintas regiones.
En las regiones aisladas, sin ríos navegables, sin ferrocarriles, los costos del transporte eran altos y había menos probabilidad de colonización. En estas regiones estaba muy extendida la cría de ganado que eran explotadas por los terratenientes. Había también un sistema de arrendamiento y aparcería que nunca llegó a estar tan difundido como en años siguientes estaría la agricultura. En las regiones donde las condiciones del suelo y los costos de transporte lo permitían, se expandió la agricultura.
- La oferta de mano de obra: La escasez de mano de obra fue uno de los problemas del siglo XIX. A partir de los primeros años de la Confederación comenzó la inmigración de extranjeros, en su mayoría, italianos y españoles. Esta migración fue favorable para la formación de la fuerza laboral ya que eran en su mayoría jóvenes y varones. Hubo un crecimiento de la población total y mano de obra que entró directamente en el mercado de trabajo.
Los indicadores más útiles para estudiar los cambios en las pautas de empleo son en el caso del empleo urbano las inversiones en obras públicas y la construcción privada, para el empleo en la construcción de infraestructura las variaciones en las extensiones de la red ferroviaria y para el empleo agrícola las variaciones en la extensión de la tierra cultivada.
Estos sectores aportaban la mayor demanda de mano de obra. Otro indicador útil es la cifra de las importaciones. En esta época se produjeron cambios en la oferta y demanda de mano de obra. El incremento de las importaciones y el aumento de la actividad económica produjeron un aumento en la demanda de trabajo. Con la crisis de 1890 y la disminución de importaciones no solo bajo la demanda de mano de obra sino también una baja de la oferta debido a una caída de la inmigración.
La demanda de mano de obra volvió a aumentar para los años 1900 porque vinieron más inmigrantes al país.
- Capital: El capital escaseaba. Los habitantes poseían activos fijos en grandes extensiones de tierra, no había otra opción para sus ahorros. Las instituciones financieras eran pocas. Había mucha actividad por parte de grupos privados, nacionales como extranjeros, en particular británicos, sobre todo en el sector ferroviario. El Estado no podía financiar para invertir en infraestructura entonces tuvo que pedir préstamos a Europa, Gran Bretaña en especial.
La expansión no se debió a los sectores de exportación agrícola y pecuaria, sino a la inversión en transportes, obras públicas y construcción privada. Gracias las inversiones extranjeras se pudo importar bienes de capital que se transformaron en vías férreas y obras públicas. Esto dio origen a una gran actividad económica y fue el factor de esta expansión.
Las exportaciones crecieron a un ritmo más lento que las importaciones. Hubo un déficit comercial pero la llegada de capital hizo que la balanza de pagos sea positiva, superavitaria. En 1881 se estableció una sola unidad monetaria, el peso oro nacional. 1 peso oro = 25 pesos corrientes.
A partir de 1853 se autorizó a emitir billetes. Con la ayuda de un préstamo extranjero aumentó la emisión de dinero. Sin embargo, en 1855 el Banco Nacional pidió al gobierno que suspendieran la convertibilidad de sus billetes. El gobierno accedió y suspendió la emisión.
Según el autor Rodríguez Alfredo La primer gran crisis fue la de 1890. La crisis de 1890 se debe a la Ley de Bancos Garantidos durante la presidencia de Juarez Celman, esta es una ley análoga a la Banca Simon de EEUU.
Mediante esta ley se autorizaba a cualquier entidad bancaria a emitir billetes con la condición de realizar un depósito en oro en el tesoro nacional, por el cual recibiera una determinada cantidad de bonos públicos. Para controlar el cumplimiento de la ley se creó la Oficina Inspectora de Bancos Garantidos. El sistema fracasó.
- Se produjo un aumento de las entidades bancarias.
- Se produjo un incremento del circulante y con ello inflación y especulación.
- La aplicación del régimen se volvió ilegal y favoritismo para algunos sectores deteriorando el clima político.
- Había déficit presupuestario.
- Hubo desequilibrio de la balanza de pagos y los prestamos extranjeros.
Por un lado, la expansión del sector financiero. Había 20 entidades emisoras, el Banco Nacional, 13 bancos provinciales y 6 privados. Además, el auge económico y la política permisiva favorecieron la aparición de muchas otras entidades privadas, nacionales y extranjeras.
Por otro lado, hubo un aumento del circulante, hay una expansión monetaria. Estas emisiones pretendían ser justificadas por el crecimiento económico. Sin embargo, se recurrió a déficits presupuestarios, la aplicación abusiva de la ley y la política expansiva de inversiones financiadas con préstamos externos. Por otra parte, los productores y exportadores agropecuarios no tenían interés en el saneamiento monetario, ya que la depreciación del peso los beneficiaba.
En cuanto a la aplicación discrecional de la ley podemos decir que las provincias tenían interés de participar de esta ley. Los títulos que compraban como requisito para emitir los utilizaban después como garantías de préstamos en el exterior. Esto a su vez fomentaba la expansión de la deuda pública (representada por los títulos que se emitían) y el emisionismo. Otro hecho de aplicación discrecional fue que el Banco Nacional consiguió que el gobierno les autorizara a sustituir el oro por letras y otras garantías o en algunos casos sin ellas, facilitando así la emisión. El hecho más importante fueron las emisiones clandestinas, las realizadas al margen de la ley.
En cuanto al sector externo hubo un crecimiento de las importaciones y exportaciones. Este proceso vino acompañado de déficits elevados y continuos. El país no podía aguantar un crecimiento basado en endeudamiento interno y externo pero el crédito de la deuda externa era una fuente de recursos fundamental. La Argentina tenía la solución, si se complica pagar, tomamos nuevos préstamos deuda para pagar.
Durante los 90 hubo una especulación de la tierra. Este fenómeno obedece al afán de ganancias fáciles. La expansión monetaria de los bancos daba los recursos para volcarse en este tipo de negocios. Concedían créditos para lograrlo y de esa forma se fortalecía el proceso y se encarecía el crédito. Los bancos tuvieron fuertemente una fiebre especulativa.
Para enfrentar esta situación el Estado tuvo actuó de la siguiente manera.
El 26 de Julio estalla el movimiento revolucionario, pero triunfa el gobierno. Lo sucede a Juárez Celman su vice Pellegrini. Este tiene la confianza y simpatía de varios sectores y por esto banqueros y hombres de negocios efectúan préstamos para cancelar las obligaciones. De esta manera se lleva cierta confianza hacia los acreedores, pero la tensión con la Baring Brothers no cesaba. Para negociarlo en noviembre del 90 está en Londres Victorino de La Plaza quien consigue un préstamo que reemplaza a todos los anteriores, es decir, consigue la famosa moratoria, se la conoce como “Consolidación Morgan”. Para el gobierno significó un avance, para otro significó la venta de la Aduana porque se afectaban los derechos de importación. Sin embargo, el acuerdo trajo alivio y una especie de reconstrucción.
De la mano de este acuerdo de Victorino de La Plaza, el gobierno de Pellegrini tomó cartas en el asunto de manera que hubo un recorte en el gasto público, se reducen sueldos, jubilaciones, pensiones. En cuanto a la cuestión monetaria se creó la Caja de Conversión con funciones de instituto emisor de billetes y propender la convertibilidad. Pero no hubo ningún mejoramiento, el resultado fue la liquidación de varias entidades privadas y también de bancos garantidos de cuyas deudas en el país y en el exterior se hace cargo la nación, incluidos los Bancos de la Provincia y Nacional.
Preguntas y Respuestas entre Usuarios: