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y Epistemología Genética
Trabajo Práctico Nº I |
Psicología y Epistemología Genética (Cátedra: Barreiro - 2020) |
Psicología | UBA
¿Por qué se afirma que la acción es constitutiva de todo conocimiento? Incluya
en su respuesta una caracterización de los siguientes conceptos: interaccionismo,
constructivismo, esquema, asimilación, acomodación y organización.
La acción es constitutiva de todo conocimiento porque ya desde el principio,
comenzamos a descubrir el mundo a través de la interacción con los objetos que
se encuentran a nuestro alcance y en esta interacción se encuentra siempre
presente la acción por parte del sujeto.
El bebé parte de un acto reflejo que ya está dado biológicamente. Sus primeras
acciones van a ser agarrar y chupar los objetos. Así comienza a recoger sus
primeras impresiones y aparece una progresión en las habilidades, que va de la
conducta refleja al estadio que implica organizar y coordinar sensaciones con
movimientos físicos. Primero han de comprender el mundo que les rodea mediante
su exploración y luego, al ir ampliando su entorno, comparar lo que ya saben y
lo nuevo que descubren.
Gracias a los experimentos de Piaget, sabemos que el conocimiento se construye a
través de la interacción constructiva con el mundo que nos rodea.
El constructivismo sostiene que el conocimiento es un logro intelectual, basado
en la articulación progresiva de las acciones sobre el mundo.
En la medida que las habilidades van progresando, se van estableciendo esquemas:
estructuras mentales que pueden ser transferidas y generalizadas a otras
situaciones.
Estos esquemas serán, en el comienzo del desarrollo, esquemas de acción
elementales que se irán enriqueciendo y complejizando a medida que el
conocimiento progresa.
Los esquemas son como los ladrillos del conocimiento en la perspectiva de
Piaget.
A los primeros esquemas (agarrar, chupar, reflejo de prensión) los llama
esquemas primarios. Luego aparecen los esquemas secundarios, que derivan de las
coordinaciones entre los esquemas primarios, y son los más relevantes para la
construcción del pensamiento lógico y matemático.
Hay esquemas prácticos y esquemas representativos. En el periodo sensorio motriz
hay precursores del pensamiento: la actividad está dirigida de manera directa,
el esquema es práctico. Cuándo aparece un proceso interiorizado y conceptual hay
una elaboración mental y el esquema es representativo. Hay una representación
imaginada de los rasgos del objeto.
La asimilación juega un papel importante en cómo aprendemos acerca del mundo que
nos rodea. Designa la acción del sujeto sobre el objeto. Un mecanismo antagónico
pero complementario es la acomodación: Ella designa la acción del objeto sobre
el sujeto.
La adaptación es para Piaget un acto complejo que resulta del interjuego de
mecanismos de asimilación y acomodación.
No existe la asimilación pura. Un niño no puede llegar a conocer sino aquellos
objetos que es capaz de asimilar a esquemas anteriores. La acomodación se
refiere al proceso de modificar esquemas para acomodarse a nueva información, se
realiza siempre. El esquema cambia cada vez para incorporar aquello que es
asimilado.
Asimilar una situación a un esquema es distinto que modificar un esquema por
acomodación. En cierto sentido, son funciones opuestas, pero no se puede dar una
sin la otra. Si fuéramos pura asimilación, nuestro conocimiento no cambiaría, Y
si yo solamente acomodara mis esquemas, no habría ninguna continuidad en mis
conocimientos, solo habría modificación. En cambio, lo que hay es continuidad y
discontinuidad, cambio y permanencia, hay actividad sobre el mundo y cambio de
la actividad sobre el mundo. Ambos son las dos caras de una misma moneda.
Hay una interacción entre acomodación y asimilación que Piaget llamaba
adaptación, hay también una cierta organización. La inteligencia es una
adaptación. Construye mentalmente estructuras susceptibles de aplicarse a las
del medio. Es especialmente una organización y su función es estructurar el
universo.
En el niño y en el adulto hay una creación continua de estructuras, pero las
grandes funciones del pensamiento permanecen constantes.
Los organismos humanos comparten dos “funciones invariantes”: organización y
adaptación. La organización (aspecto interno del ciclo) es inseparable de la
adaptación (aspecto externo del ciclo) desde el punto de vista biológico, son
dos procesos complementarios de un único mecanismo.
La “concordancia del pensamiento con las cosas” y la “concordancia del
pensamiento consigo mismo” expresan este doble invariante funcional de la
adaptación y la organización. Estos dos aspectos son indisociables: el
pensamiento se organiza a si mismo adaptándose a las cosas y es al organizarse a
sí mismo como estructura las cosas.
La organización queda definida por la relación entre las partes y el todo: cada
esquema se encuentra coordinado con todos los demás (es parte de una totalidad),
y a su vez constituye él mismo una totalidad de partes diferenciadas.
Las repeticiones sucesivas debidas a la asimilación generan un reconocimiento y
una generalización. Cuando el nuevo objetivo se asemeja al antiguo hay
reconocimiento y en la medida que difiere de él, hay generalización del esquema
y acomodación. La misma repetición produce un todo organizado. La asimilación es
a la vez el resultado y el origen de la organización.