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Psicología Evolutiva - Niñez |
Resumen para el 2do Parcial: "El Juego en la Evaluación del Desarrollo" | Cátedra: Pizzo |
1° Cuat. de 2013 |
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El juego en la evaluación del desarrollo
Lic. Karina E. Krauth
1.-Introducción:
La Psicología Evolutiva se aboca al estudio del desarrollo del ser humano, cómo
describirlo, y explicarlo son dos intereses centrales de esta disciplina.
2.-El Juego y el desarrollo:
El juego es una actividad central durante la niñez, le ofrece al niño/a la
posibilidad de elaborar conflictos, hallar satisfacciones, y expresar deseos.
Para el psicólogo supone una vía regia de acceso al psiquismo del paciente: a
través del juego del niño/a el profesional puede realizar una evaluación y
diagnóstico de lo que le sucede, y, si fuera necesario, indicar un tratamiento
adecuado para la problemática detectada.
Bleichmar señala que las funciones del juego en el desarrollo son:
• realización de deseos y postergación de la frustración;
• control imaginario sobre la realidad por medio de la asunción de diversos
roles;
• liberación de conflictos (mediante el juego se liquidan, ignoran o elaboran);
• intentos de comprensión y de elaboración de experiencias vividas.
Según la autora, la Hora de Juego puede emplearse como herramienta diagnóstica
con diferentes fines, si se considera el juego como actividad en sí misma nos
ayuda a:
A) estimar el nivel de desarrollo cognitivo-afectivo del niño/a; y
B) observar las modalidades que emplea el niño/a para tomar contacto y
relacionarse.
Si se toma el juego del niño/a en tanto material a descifrar, será el
Psicoanálisis el Marco teórico que nos permitirá disponer de la Hora de juego
diagnóstica:
C) “como vía regia de acceso a la subjetividad, a sus sentimientos y estados
mentales, que pueden ser desconocidos para el mismo niño y para sus padres”.
El juego se constituye entonces en la forma privilegiada de expresión de los
niños, y desde que Sigmund Freud (1909) descubrió su significación en la
elaboración psíquica, otros han realizado aportes cruciales para considerar a la
hora de juego diagnóstica como recurso fundamental para la caracterización
psíquica de los niños y como recurso terapéutico.
• Anna Freud intentó la primera sistematización del método de análisis de niños;
• Melanie Klein (1929) creó la técnica de juego como método para acceder al
psiquismo infantil;
• En Argentina, Arminda Aberastury creó la Hora de Juego diagnóstica (1962)
fundamentando que permite arribar a un diagnóstico inicial;
• Y Siquier de Ocampo (1975) construyó indicadores de la hora de juego
diagnóstica.
En la Hora de juego diagnóstica se dejan sobre la mesa o sobre el piso del
consultorio, a disposición del niño/a materiales:
• estructurados (diversos juguetes como familia de muñecos, muñecas, familias de
animales, transportes, juegos de té, herramientas, bloques de encastre, etc.)
• inestructurados (plasticolas, papeles, lápices, hilo, témperas, tijera, etc.),
Y se le invita a que use los que quiera y como quiera, sin que se lastime él o
al psicólogo. El profesional le explica que observará qué es lo que él/ella hace
para conocerlo/la y tratar de entender qué le sucede.
A partir de estudios de su autoría Luzzi y Bardi (2005) proponen qué indicadores
tener en cuenta en la Hora de Juego Diagnóstica, retomando aquellos construidos
por Siquier de Ocampo (1975):
*Cómo el niño/a acepta la consigna (totalmente o parcialmente; no la cepta).
*Cómo el niño/a comprende la consigna (con o sin dificultad).
*Si el niño/a demuestra capacidad o no para sostener la actividad.
*Cuál es la modalidad de acercamiento al material (previa estructuración del
campo; evitativa; impulsiva; resistencial).
*Cómo hace uso del espacio (adecuado; inadecuado/expansivo;
inadecuado/intrusivo; inadecuado/restringido).
*Cómo hace uso del tiempo (adecuado; inadecuado/lentificado;
inadecuado/acelerado).
*Cuál es la modalidad de relación con el psicólogo/a: adecuada/colaboradora;
dependiente; resistencial; hostil/rechazante; aplacatoria; indiferente;
temerosa.)
*Cómo expresa el motivo de consulta.
*Cuáles son las producciones lúdicas que realiza (si se expresa o no
simbólicamente; si su juego es dramático, de construcción, de competencia, etc.)
*Cuáles son sus verbalizaciones (si expresan sus conflictos mediante la palabra;
si son solo una vía de descarga).
*Cómo hace el cierre de la tarea: (acepta que la actividad ha terminado, o
continúa jugando aunque el psicólogo le señala que es momento de concluir).
*Si hay producciones gráficas también se toman en cuenta y se analizan.
Nora Fornari Y Griselda Santos, se dedican desde hace varios años a la
investigación del juego en la niñez en nuestro medio socio-cultural, desde
diferentes perspectivas y con variados objetivos.
Nora Fornari señala que en el juego del niño/a las acciones se despliegan de
manera singular, el niño/a “habla” en sus juegos, con su cuerpo y con lo que
hace con los objetos, que de este modo, "se animan" adquiriendo “formas diversas
y cambiantes”. Es así que el psicólogo puede “escuchar” lo que el niño/a “dice”
cuando juega.
3.- Para pensar la evaluación del desarrollo:
Si bien Marcos tiene 9 años, más de la mitad de su vida está signada por
diagnósticos e intervenciones. Su madre solicita una entrevista porque con mucha
angustia dice “no sé qué le pasa, ya no se qué hacer”. Le preocupa porque “no se
vincula con sus compañeros, no participa dentro de grupos, reacciona mal frente
a cualquier situación, se enoja, no tiene amigos…le hablo y no me responde”.
Profesionales consultados anteriormente lo evaluaron mediante técnicas y tests
objetivos y, siguiendo los criterios del DSM-IViii: algunos determinaron que
tenía un “Trastorno Generalizado del Desarrollo no especificado”iv; otros,
atendiendo a sus tics concluyeron “Gilles de la Tourette” ; ciertos
profesionales, por la dificultad para relacionarse con pares y el aislamiento,
pero el buen rendimiento académico, diagnosticaron “Síndrome de Asperger”vi; y
finalmente quienes se centraron en la meticulosidad con que ordena todo, el
tiempo que le requiere hacer una tarea y la baja tolerancia a la frustración,
“Trastorno Obsesivo compulsivo”vii. En cada consulta realizada les dijeron que
no había tiempo que perder, debían diagnosticar a Marcos y empezar un
tratamiento. La madre llega con esta urgencia, quiere saber qué tiene su hijo,
rápido, cuanto antes.
Se propuso a los padres de Marcos realizar una evaluación del desarrollo, pero
esta vez sería a través de la realización de entrevistas a padres, la
construcción de la Historia Vital Evolutiva de su hijo, y de indicadores tomados
de la Hora de Juego Diagnóstica.
Tal como plantea Juan Vasen (2011) “la humanización del encuentro debería
sobreponerse a la tabulación de la entrevista”, y desde este enfoque, dando
espacio y tiempo para el despliegue subjetivo, y dejando de lado la recolección
de datos “objetivos”, se trabajó con los recursos arriba enumerados. Se dispuso
un espacio para que la madre contara lo que le pasaba, y más calmada y menos
enojada con los psicólogos, se acordó una entrevista con su marido para
construir la Historia Vital Evolutiva de Marcos. La propuesta y la apuesta de la
psicóloga era tomar un tiempo para escucharlos, para conocer a Marcos, con el
fin de entender qué le estaba pasando.
En las entrevistas resulta muy importante no solo escuchar qué dicen los padres,
sino cómo lo dicen, con qué adjetivos caracterizan al niño/a, cómo lo nombran,
cómo enuncian lo que les preocupa de su hijo/a, si vinculan las problemáticas
con ellos o no.
La teoría nos señala que a través de su juego el niño/a expresa su malestar.
Arminda Aberastury (1965), pionera en psicoanálisis con niños en Argentina,
sostiene que en la primera hora de juego el niño presenta su problema y fantasía
de curación.
Saimovici (1979) afirma que una atenta lectura a la obra de Freud arroja que “el
juego expresa como otras actividades psíquicas, aspectos inconscientes del niño
o púber, y por lo tanto la actividad de juego tiene su significado y es
traducible”.
La práctica nos deja saber que los niños van contando lo que les sucede a través
del juego, y es el psicólogo, en los sucesivos encuentros con el niño y sus
padres, quien va tratando de entender qué le sucede para poder diseñar los pasos
a seguir.
Tomando palabras de Beatriz Janin (2011:34), desde el psicoanálisis “tratamos de
desarmar aquello que determina, de un modo singular, esa dificultad”. No nos
interesa solo saber qué nombre tiene eso que le pasa (ubicando un diagnóstico),
sino qué le sucede, por qué le sucede, y cómo ayudarlo a elaborar sus
conflictos.