1.
Podemos decir que nuestro personaje se mantiene cuasi constantemente en un estado emocional determinado, lo que le permite diseñar algunas acciones, y otras no. Éste es:

Resentimiento, porque no acepta lo que fue en el pasado.

Paz, porque acepta lo que sucedió en el pasado.

Ambición, porque ve posibilidades de acción en el futuro.

Aceptación, porque no está enojado con lo que sucedió tiempo atrás.

Resignación, porque no ve posibilidades en el futuro.
2.
La Ontología del Lenguaje posee tres postulados básicos. El primero de ellos hace referencia a que los seres humanos son seres lingüísticos. Si trasladamos esto al cortometraje, podemos interpretar que:

La palabra es la parte más significativa del lenguaje.

La lengua es propia de la cultura.

Somos seres que habitamos en un mundo de palabras, y el pensamiento es un medio por el cual esas palabras son expresadas.

El lenguaje verbal es la clave para la comprensión de los fenómenos humanos, entre ellos, la relación que establecemos entre nosotros.

Como hablamos y usamos el lenguaje, éste es sumamente importante, ya que de otra manera no podríamos comunicar absolutamente nada.
3.
Tomando los aportes de la Ontología del Lenguaje, sobre todo, sus postulados básicos, podemos decir que el personaje central utiliza el lenguaje conversando consigo mismo para elaborar:

Y distinguir las posibilidades de poder acceder a los vínculos con los otros.

Estrategias que le permitan ser percibido por la chica que le interesa.

Planes de acciones que no terminará de cumplir en ningún momento porque “da muchas vueltas”.

Hipótesis delirantes sobre lo que sucede alrededor.

Mundos posibles a los que les atribuye características creadas por él mismo.
4.
En el cortometraje, las emociones juegan un papel fundamental en tanto éstas:

Hacen que la situación se ponga mejor y con mayores posibilidades.

Producen acciones más precisas.

Influyen en lo que los otros pueden ver y entender de cada uno.

Recortan las posibilidades de ver y reconocer siquiera la posibilidad de accionar sobre el entorno.

Preparan para la reflexión profunda de la situación y, de esta manera, poder pensar mejor y más claramente.
5.
Basándonos en los aportes de la Ontología del Lenguaje, cuando pensamos en el personaje del cortometraje podemos llegar a decir que “es un tipo demasiado tímido, y que no sabe cómo relacionarse con las chicas”; esta frase, ¿de quién habla realmente? ¿del personaje, o de mi?:

Del personaje al que hago referencia, dado que muestra abiertamente su timidez y su dificultad para acercarse a las chicas.

De ninguno de los dos, ya que es una convención lingüística sobre lo que las personas son o manifiestan.

De los dos, tanto de él, que muestra, como de mí que digo.

El lenguaje no hace referencia a nadie en especial, son solo palabras.

De mí mismo, y de lo que para mí es alguien tímido y que no sabe relacionarse.
6.
Decimos que las acciones que emprende nuestro personaje principal lo definen como ser humano, como el observador que está siendo, dado que:

Podemos cuantificar las acciones que emprendemos, lo que nos hace más o menos efectivos.

Somos capaces de mostrar nuestras competencias sólo a través de las acciones que emprendemos.

Estas acciones definen nuestros logros, la calidad de nuestras vidas e incluso, en último término, el tipo de persona que somos.

Desde la Ontología del Lenguaje no existe la esencia, sino que nos creamos todo el tiempo, allí radica lo incorrecto de la opción.

Lo más profundo de nosotros sale a la luz con lo que decimos.
7.
Si decimos que “la chica del cortometraje” es alguien que se caracteriza por su soberbia, y eso es lo que la hace mostrarse como alguien que está “más allá” de nuestro personaje central, estamos solamente diciendo que:

Lo que alcanzamos a distinguir habla de nuestra forma de estar siendo.

Lo que observamos es solamente la forma en cómo observamos.

Eso que nos encontramos es la realidad que podemos reflejar exactamente con nuestra percepción.

Ella es una persona que tiene mucha seguridad de sí misma, lo que la hace comportarse de tal forma.

Ella manifiesta un comportamiento al cual se lo denomina soberbia.
8.
Para poder hacer un cambio en las acciones posibles que ve nuestro personaje, éste tendría que hacer un cambio hacia una emocionalidad determinada ¿cuál?

La ambición que lo moviliza hacia nuevos espacios y transformaciones.

La paz de aceptar las situaciones como son.

El desinterés, en tanto no existe un interés manifiesto por la chica.

La resignación, ya que hay cosas que no se pueden cambiar, y que, por ende, implican que uno deba dejar de intentarlo.

La aceptación de que se es y de lo que no se es.
9.
Para que nuestro personaje encuentre nuevas posibilidades de acciones, se debería producir en él, previamente:

Modificaciones en el estado anímico.

Una modificación de su alma y esencia, si fuera posible.

Un cambio del observador que está siendo.

Una modificación de la emoción que tiene en ese momento.

Una superación de sus propios límites.
10.
Decimos que los humanos tenemos una tendencia especial inherente a la búsqueda de sentido. Esto se manifiesta en el cortometraje en:

Los diálogos entre los diferentes personajes.

El momento en que se define que la intensidad del deseo de estar con otros es proporcional a la distancia que esté ese otro de nosotros.

El momento en que el personaje define cómo son las características que posee él mismo.

Procurar interpretar lo que está sucediendo en el marco de la fiesta.

La forma en cómo se construye la escenografía, determinando el momento en que se está.
11.
En el caso de nuestro personaje, vemos cómo las emociones van fluyendo, posibilitando y obstaculizando acciones. Entonces se puede concluir que:

De acuerdo a cómo interpretamos racionalmente a nosotros mismos y al entorno, podremos accionar sobre el sistema/entorno.

La acción depende del grado de razonamiento que pueda poseer sobre determinadas situaciones.

Nuestro estado emocional es tanto posibilitador de acciones como inhibidor de las mismas.

En tanto las pueda controlar, las emociones no poseen ningún efecto sobre la posibilidad de resolver situaciones diversas.

Solo podemos accionar cuando somos conscientes de las posibilidades.
12.
Cuando hablamos del eje del observador denominado “el mundo”, vemos que en el cortometraje aparece cuando:

El padre comienza a transmitir al hijo una fórmula matemática del deseo y la pulsión, cosa que él trae como experiencia inicial.

Pregunta si alguien también piensa en su papá.

Él interacciona con la chica para preguntarle sobre cómo está la fiesta.

La madre menciona datos que hacen a la historia del personaje en relación a su delgadez.

Se cree que la chica lo está mirando a él.
13.
De los 10 ejes del observador que hemos trabajado en la bibliografía, hay algunos que aparecen claramente enarbolados por el personaje central el cortometraje. Éstos son:

Las expectativas.

Los límites del alma humana.

La díada inquietud / deseo.

La línea de la posibilidad / facticidad.

La habitualidad interpretativa del observador.
14.
La Ontología del Lenguaje sostiene la concepción de un ser humano como un ser en constante proceso de devenir, de inventarnos y reinventarnos. En tanto este supuesto, podemos decir que nuestro personaje:

Tiene alternativas para cambiar su forma de ser en tanto sea algo que decida hacer.

Es la persona tímida y retraída que plantea ser, y no tiene muchas alternativas para cambiar esto.

No alcanza a comprender lo que está sucediendo y cómo está influyendo en el proceso de conquista.

No busca reinventarse, sino que se resigna con su situación actual.

Reconoce sus límites y acepta que podrá ser otra cosa en algún momento.
15.
Podemos decir, desde el planteo de Rafael Echeverría, que el personaje podría ser diferente si él pudiese:

Emprender acciones diferentes a las que está llevando a cabo.

Decir exactamente cómo es y a dónde quiere ir.

Lograr lo que se propone.

Repetir innumerables definiciones distintas de sí mismo.

Hacerse responsable de lo que dice.
16.
En el marco de esta historia podemos hacernos muchos planteos, juicios, suposiciones, opiniones, etcétera. Teniendo esto presente, ¿por qué para la Ontología del Lenguaje es significativa la siguiente enunciación? “Cada planteamiento hecho por un observador nos habla del tipo de observador que ese observador considera que es”:

Porque apunta a la noción de que el ser está en cada uno, a modo de alma o espíritu.

Porque reconoce lo inmutable y absolutos que somos cuando mencionamos cada opinión.

Porque de esta forma podremos encontrar respuestas a las inquietudes que tenemos sobre los otros.

Porque esto nos revela aquellos supuestos subyacentes que poseemos los seres humanos y desde los cuales actuamos.

Porque nos muestra cómo somos realmente los seres humanos.
17.
Cuando el personaje dice que “siempre existe un límite autoimpuesto”, podemos relacionarlo con el hecho de que:

Aparece la reflexión sobre las reales posibilidades que tiene.

Siempre que lo podamos mencionar lo vamos a poder superar.

El lenguaje con su cualidad generativa hace que, al mencionar el límite, ya estamos provocando que éste exista.

Reconoce que realmente no podrá conquistar a la chica deseada.

Esto funciona como un aspecto desafiante en lo verbal, demarcando objetivos autoimpuestos.
18.
Decimos que lo que creemos que vemos, que solemos dar como categoría de “realidad”, solo es la forma en cómo la vemos. Nuestro personaje tiene una forma de ver lo que está sucediendo en la fiesta, y lo que puntualmente sucede con la chica que le interesa. Esto nos hace pensar en los filtros que tenemos a la hora de percibir. Los filtros que más se destacan en él son las creencias subyacentes y sus valores e ideas previas respecto a la conquista.

Falso, el filtro que más se destaca, son sus emociones.

Verdadero, por ejemplo, a través de las ideas que le inculcó su padre.
19.
Podemos reconocer cómo el personaje central utiliza muy bien los dominios básicos del observador. Éstos son:

La emoción.

El cuerpo.

El alma.

El lenguaje.

Los supuestos.
20.
El segundo postulado de la Ontología del Lenguaje es el que establece que el lenguaje es generativo. Analizando la conversación interna del personaje, se puede inferir que:

Nadie le presta atención a pesar de lo que diga o haga.

El resto le prestará atención en tanto pueda transmitir lo que piensa y siente con las palabras.

No puede accionar sobre el entorno en tanto está estancado en una elipsis verbal.

Prácticamente no logrará ningún resultado positivo.

Genera, a partir de la conversación propia, juicios y emociones que hacen que sus acciones manifiesten su gran incompetencia al relacionarse.