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1º Parcial A  | Taller de Introducción al Estudio de la Historia (2021)  |  UNLU

1. A. En el texto de Alejandro Cataruzza “Los usos del pasado. La historia y la política argentina en discusión”, específicamente en la primera parte del primer párrafo, el autor comenta “Los esfuerzos por construir y difundir imágenes del pasado atravesaron un periodo importante desde las primeras décadas del siglo XIX cuando algunos intelectuales dedicados a la investigación histórica plantearon con éxito los requisitos que ella debía cumplir”, aquí es donde vamos a poner nuestro foco de atención para encarar el análisis del texto, en la investigación histórica y los medios o formas para la transmisión de la historia.
Para ello debemos tomar en cuenta dos escuelas de pensamiento que tuvieron lugar en el siglo XIX. La primera de ellas es la denominada “Escuela científica alemana”, a la cual el autor Josef Fontana presta especial atención y nos propone como conceptos centrales el historicismo y el nacionalismo. Para la historia, fue fundamental la valoración del pasado clásico con elementos nacionalistas, y consolidando la historia científica a través del desarrollo de métodos de crítica erudita. En cuanto a la política, debido a la amenaza revolucionaria se vieron obligados a crear un consenso social basado en la lucha nacionalista. Uno de los principales exponentes de esta escuela de pensamiento es Leopold Von Ranke, quien introdujo el concepto de historicismo. El concepto de historicismo se define por presentar un rechazo a la Ilustración y una visión donde cada nación es una totalidad orgánica con propias leyes de evolución. Retomando a Leopold Von Ranke, el autor Eduardo Hourcade en su texto “El conocimiento histórico objetivo según Ranke” intenta retomar los aportes que el historiador prusiano ha hecho sobre el oficio del historiador en el siglo XX, y plantea que no es posible separar fundación de un orden y instrumentos a través de los cuales se objetivizo. Hourcade propone que frente a la figura de Ranke la historiografía experimenta una sensación algo incómoda, debido a que, si bien la recusación metodológica es compartida, su programa profesional es crucial en cuanto a la objetividad. Aquí también podemos poner un punto de conexión con el texto de Alejandro Cataruzza ya que el autor expone que la nota más distintiva en cuanto a los procedimientos de investigación para la historia científica era la objetividad.
Por su parte, George Iggers también va a hablar sobre Ranke y dar su perspectiva en cuanto al historicismo y va a proponer ver a este último como una forma de ver a la historia como ciencia. Sitúa al origen de la historia en el establecimiento de la historia como ciencia y como una manifestación del mundo moderno occidental. Pone foco de atención en el historicismo clásico y explica que su método era ver la historia sujeta a lo impredecible y singular de las motivaciones humanas.
La segunda escuela de la vamos a tratar es la "Escuela Metódica" la cual se desarrolló en el siglo XX en Francia. Esta escuela de pensamiento va a querer imponer una investigación científica. Sus principales exponentes son Charles Langlois y Charles Seignobos, quienes proponen una disciplina para el tratamiento de los documentos denominada "heurística". La Escuela Metódica propone la importancia de los documentos escritos por sobre otras formas de medios de transmisión.
En el segundo párrafo del texto de Cataruzza podemos ver como relata, casi literalmente, los principales principios de la Escuela Metódica, ya que uno de los principales objetivos de esta escuela es el de la formación de nuevas generaciones con el amor a la República a través de la escuela y especialmente en los manuales de historia, en ellos la escuela metódica expone sus principios sin ningún tipo de censura y propone que el profesor de historia debía formar republicanos y soldados. En América Latina, y especialmente en Argentina, también se vivieron estos fenómenos de nacionalización de las masas en las últimas décadas del siglo XIX.

B. El pasado 14 de diciembre entre las calles Caratini y Lois del barrio Parque Irigoyen en la localidad de General Rodriguez se llevó a cabo un acto institucional por el Día Internacional de los Derechos Humanos y se inauguró un monumento en honor a las víctimas de la última dictadura militar en nuestro país. En dicho monumento se encuentran los nombres de las 13 personas que fueron identificadas como detenidas y desaparecidas y en discurso llevado a cabo por el Intendente Mauro Garcia se alentó a continuar recuperando y simbolizando los lugares de memoria.
En el texto “La historia como memoria colectiva” el autor Peter Burke menciona que los recuerdos se ven afectados por la organización social de la transmisión y los medios utilizados y procede a mencionar cinco medios o formas de transmisión de memoria colectiva: las tradiciones orales, los recuerdos y los registros escritos, las imágenes, las acciones y por último pero no menos importante, el espacio. El monumento en honor a los desaparecidos pertenece al último medio de transmisión nombrado, el espacio. Sobre este medio específico, Burke resalta el valor de poder ubicar lo que se desea recordar en marcos imaginarios, como estos contribuyen a crear un vínculo con los recuerdos. En este caso resulta más que obvia la importancia de la memoria colectiva, incluso es uno de los lemas más presentes cuando se habla del tema, el hecho de que un pueblo debe tener memoria de lo que ha vivido, porque de otra forma se verá condenado a repetir su historia. Mantener el recuerdo vivo de lo que ha ocurrido es vital para la memoria de un pueblo.

2. Eurocentrismo
La noción de eurocentrismo y esta idea de que ciertas personas son por naturaleza mejores que otras se inauguró con el “descubrimiento” de América (nótese las comillas en descubrimiento) específicamente en el año 1492.
Pero antes de entrar en discusiones sobre en donde y donde no se ven los puntos de conexión entre los diferentes autores, debemos plantear a qué nos referimos cuando hablamos de eurocentrismo, cuales son los principios que sigue, como se fundo este mito de superioridad, bajo qué validez se regía, entre otros.
Entendemos por eurocentrismo a este mito que pone a Europa como centro de la historia universal, perspectiva y modo concreto de producir conocimiento (Quijano) el cual se nos ha sido impuesto violentamente y el cual, aún luego de siglos y siglos, sigue internalizado en nosotros. Ahora bien, cómo llegamos a esto es una historia a la cual mucha gente sigue tratando de disfrazar y pintar de rosa para hacer quedar a los colonizadores como héroes civilizadores que solo querían el bien común y a los americanos como pobres, inadaptados y salvajes. Claramente nos estamos refiriendo al descubrimiento de América, ya desde el hecho de que llamen a este hecho “descubrimiento” muestra un gran nivel de eurocentrismo y superioridad. La historia de cómo se nos fue impuesta esta construcción no es un hecho tan difícil de entender, cuando Colón y sus tropas llegaron a América por error se dieron cuenta de la cantidad de cosas materiales, como piedras preciosas y demás, de las que se podían apropiar y su forma de justificar que ellos podían tomar lo que era de los americanos sin pedir permiso y sin importar bajo qué costo fue a través de la concepción de raza. Esta construcción mentales un tema muy marcado tanto el texto de la autora Sophie Bessis como en el de Anibal Quijano, y hace referencia a que esta superioridad que es la base de la noción eurocentrista no es más que un hecho biológico, que por naturaleza se da así y que estaba científicamente probado que ciertas personas con una determinada estructura biológica eran en todos los ámbitos superiores a otros, y convenientemente, los colonizadores eran los poseedores de dichos rasgos. Esta construcción que fue desmentida un largo tiempo después, sirvió para legitimizar los actos violentos de dominación por mucho tiempo.
Lamentablemente, América no fue la única víctima de este mito de superioridad, ya que poco tiempo después, Europa y Portugal, mayores colonizadores de América, pusieron foco de atención en África y se impusieron con la misma violencia allí. “África desagrada” es el nombre que le pone Bessis a este hecho para explicar las políticas sangrientas que se dieron lugar en África durante siglos. Este suceso, relata Bessi, fue legitimizado por la idea de razas superiores sumado a causas evangélicas sostenidas por la Iglesia, la Biblia y un criterio antiafricano.
Este eurocentrismo del que habla Quijano, fue el que le dio a Europa el privilegio para maltratar, someter y explotar a cientos de pueblos por un fin económico cegados por la construcción de una identidad cerrada y una consiguiente deshumanización. Sin embargo, y no con el afán de justificar o liberar de culpas a nadie, no fue toda Europa la culpable de estos hechos, sino que fue Europa Occidental específicamente. Enrique Dussel en su texto de “Europa, modernidad y eurocentrismo” relata cómo Europa Oriental fue desplazada del plano.
Hasta acá entendemos que el mito eurocentrista fue principalmente originado para que Europa Occidental pueda tomar lo que desee con un objetivo más que nada económico bajo esta idea de superioridad biológica, pero las repercusiones de esta visión se sufrieron en todos de la vida del hombre alrededor de todo el mundo. Un punto clave del seminario "Filosofía Política en América Latina hoy" de Enrique Dussel en Quito es cómo esta visión eurocéntrica afecto en la idea que tenemos sobre todas las culturas y de la historia en general, ya que esta ha sido desarrollada en un esquema donde Europa es el centro de todo.
La gran propuesta de Dussel, que debería llevarse a cabo pero lamentablemente sus probabilidades son nulas, es romper con este esquema eurocentrista, destruirlo por completo y volver a reescribir la historia mundial para tener una historia más justa y real.

3. El historiador francés Lucien Febvre propone una mirada interesante en cuanto a la historia y al historiador ya que sugiere que la historia es una ciencia de los hombres, no algo ajeno a él, y que la tarea del historiador se basa en volver a encontrar a los hombres que han vivido los hechos y a los que se alojaron en ellos para interpretarlos. Menciona algo importante de remarcar en cuanto a los textos ya que propone humanizar los textos y documentos ya que estos están formadas por la sustancia humana lo cual ocasiona que no se de un lugar para ser objetivo o para realizar una investigación donde el historiador es ajeno al objeto de estudio.
Por otro lado, las escuelas de pensamiento que surgieron en la misma época proponen diferentes puntos de vista. Primero tenemos a La Escuela Científica Alemana, cuyo mayor exponente es Leopold Von Ranke, sostiene que la intención de la historia era conocer la verdad de los hechos a través de un método crítico, de una investigación objetiva. Para esta escuela lo fundamental recae en que el historiador no debía emitir ninguna clase de juicio de valor o crítica a lo hechos, sino que debía comprobar los hechos de modo imparcial y erudito. Con respecto a la Escuela Metódica, no presenta diferencias tan relevantes en cuanto a la objetividad para la investigación histórica y sobre el papel o la tarea del historiador. En esta escuela de pensamiento los principales exponentes son Charles Langlois y Charles Seignobos, quienes fueron los responsables por escribir las reglas de esta escuela poniendo atención a los problemas epistemológicos. La historia pasa a ser la puesta en práctica de los documentos escritos y solo estos son la historia, para ello ponen en práctica una disciplina denominada “heurística” basada en el stock de materiales disponibles. Este es un punto directamente criticado en el texto de Lucien Febvre y cita“Hay que utilizar los textos, sin duda. Pero todos los textos, y no solamente los documentos de archivo en favor de los cuales se ha creado un privilegio (...) También un poema, un cuadro, un drama son para nosotros documentos, testimonios de una historia viva y humana (...)”. (Febvre, 1953) Aquí claramente presenta una crítica a las escuelas de pensamiento anteriormente mencionadas por limitar las fuentes para escribir e investigar la historia únicamente a documentos escritos dejando de lado la enorme cantidad de fuentes que se pueden encontrar.

Bibliografía y referencias
-Bessis, Sophie,” Occidente y los otros” Historia de una supremacía, Madrid, Alianza, 2002
-Burke, Peter, “La historia de la memoria colectiva”, en Formas de Historia cultural, Madrid, Alianza, 2000, pp. 65-85.
-Cataruzza, Alejandro “Los usos del pasado. La historia y la política argentinas en discusión, 1919-1945”, Buenos Aires, Sudamericana, pp 24-26.
-Febvre, Lucien, “Combates por la historia”, Barcelona, 1992, pp 29-31.
-Fontana, Josep, “Historicismo y nacionalismo”, en La Historia de los Hombres, Barcelona, Crítica, 2001, pp. 165-179
-Hourcade, Eduardo, “El conocimiento histórico objetivo según Ranke”, en Estudios Sociales, N° 1, 1991, pp. 209-214.
-Iggers, George, “La ciencia histórica desde el historicismo clásico hasta la historia como ciencia social analítica”, en La ciencia histórica en el siglo XX, Barcelona, Labor, 1995, pp.
23-58.


 

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